86 EOS EOS 87 CONVIVIO Desde que leí la palabrita, me cargó. Porque huele a pedantería, a la legua. Convivio. ant. Convite.
Así dice el Diccionario. Pues si convite es la palabra actualmente usada ja que ir a buscar esa otra tan desagradable al oído y quizá, a causa de esto, condenada por el uso?
Se puede apostar cualquier cosa a que ese nombre lo escogió Brenes Mesén, para los cuadernos portátiles que lo llevan. Si me preguntan el porqué de mi creencia, no sabría decirlo. Pero la palabrita esa se parece a Brenes Mesén.
Abro uno de esos cuadernos portátiles y leo. Voces DEL ANGELUS. Cuando vino a mí con sus oscuros cabellos sueltos, traía ceñida a sus sienes y a su frente, una corona de azahar. Cuando se dice de algún guerrero que se ciñó la espada, o de algún soberano que se ciñó la corona, todo el mundo entiende que el primero se la ciñó a la cintura, y el segundo a la cabeza, a las sienes, a la frente. Pero Brenes Mesén es hombre explícito, para que nadie se equivoque. Lo que vino a él «traía ceñida a sus sienes y a su frente, una corona de azahar. Si la corona sólo alcanzaba a ceñirle las sienes y la frente, sería media corona, pero media o entera, debió de ser de azahares, a menos que no fuera sino una corona blanca. En sus manos pálidas, como tejidas de mosquetas, portaba un joyero de mirra que puso junto a mí, sobre la mesa de roble. Es mucho tejer unas manos, y con mosquetas, imposible. Pero Brenes Mesén vió mal, a pesar de sus antiparras o por su culpa; fué un pebetero con mirra, y no un joyero, lo que puso junto a mi. es decir junto a el) sobre la mesa de roble.
Nunca he cruzado ni un saludo con Brenes Mesén; pero la precaución de llevar un pebetero con mirra y ponerlo junto a él, hace pensar que la de las manos pálidas quería zahumarlo. La precaución resulta insultante. Alcé los ojos para mirarla y ví en los suyos dos flámulas profundas, más allá de las pupilas, en la negrura de un abismo de pensamiento, combo y movible, a la manera de un mar ante las primeras palabras del canto estrellado de la noche. Esto es ver hondo y expresar con elocuencia su visión. Porque, no cabe duda, Brenes Mesén está viendo cosas. qué vió más allá de las pupilas? Pues no fué cosa mayor: dos banderas estrechas y largas a modo de gallardetes que eso son flámulas y nada más. Es verdad que las flámulas corrientes carecen de profundidad o apenas la tienen, puesto que son de tela delgada; pero puede que las que vio Brenes Mesén fueran profundas o que no las viera bien, porque estaba muy oscuro.
Mas lo curioso del fenómeno está en que vió las dos flámulas profundas en los ojos del fantasma, aparecido, espanto o lo que sea, más allá de las pupilas, en Este documento es propiedad de la Biblioteca Nacional Miguel Obregón Lizano del Sistema Nacional de Bibliotecas del Ministerio de Cultura y Juventud, Costa Rica.