84.
RENOVACION monótona desnudez de estas paredes contento como una campana de pasvolverá a gozar entonces, como de iin cua.
inusitado espectáculo, de los campos Mientras tanto tratad de soureir, de esmeralda y de las montañas de siquiera alora en presencia de tani zafiro, y vuestro corazón palpitará lindas muchachas, Algo de todo Tome Ud. Heste rollo de literatura otoñales y cipreses melancólicos, lo patria, me dijo un amigo esta taba largo del cual discurren sombras ama.
oa, entregándome un fajo de periódi. bles que desterro la muerte, cos. Viene otoroso a cosas del terruño. El pasado es, entre nosotros, 11n. Tal vez seat aires del Tablazo o abiejo vino con que restaur brisas de Cartago, le repusę. zón las heridas que el Destino le Cierzos querrá usted deciſ.
infiere. No importa. Siempre serán menos Así la vida resulta al cabo, algo fríos que las ráfagas húmedas del Sena como un antiguo viaje familiar: cada y con aquella idea te llevé el regalo, peregrino lleva, a guisa de manes Pero he aquí que al abrirlo me 50:1 protectores, un fresco Tatuo clę remiríe una cara conocida: la Gioconda! niscencias.
Coufieso que comenzaba a olui En estos centros es un verdadero darla. Paris es un crisol donde se vértigo que enloquece y arrastra. Es funde y acaba por evaporarse la me preciso andar siempre muy ligero, y moria, Las sensaciones se suceden. 11 quien en San José podía dedicarse sio él, rápidas y fugaces. no podría ser peligro a hacer filosofía al modo peride diverso modo. Hay otras que espe patético en mitad de la calle, aquí, Tad su turno lo mismo mismo que las gentes para ganar una acera, debe dar más en la taquilla de un teatro.
brincos que un saltanoutes. Si fuera Aquí el entusiasmo y la desespera11 cipo a meditar un segundo al tiempo.
za duran lo que el devaneo de una co de atravesar el bulevar correria proqueta o el llanto de un niño, el ceño bablemente la suerte del infortunado del odio es un rasgo borroso, la troin. Curie, peta de la Fama, un clarín inconstante. Pero esto no lo explica todo. Lutelos ardores de la polémica estímulos cia es olvidadiza por temperamento.
pasajeros, et esplendor del triunfo hri La inconstancia es un defecto de sus ilo fugaz, las inquietudes del Gobier nervios, sus divina, pervios que solo no o las amenazas populares cosas de vibrau por impresiones momentáneas, un día, la literatura y la moda, Chan lo mismo que las cuerdas de una lira.
tecler y la Jupe culotte caprichos de No obstante reparad con qué amor una bora. Duelo y placer, apoteosis y la quieren y con qué celo la sirveti los descréditos, triunfos y derrotas, todo. Cinceles prodigiosos, las paletas sabias, hasta el Anior y la Muerte mismos las piwas admirables, las voces miladesapátecen al punto en esta loca vo grosas, los cuerpos encantadores y torágine de formas y colores.
dos los que han heredado el don doloCuén diferente la existencia en ese roso del genio o el privilegio envidia.
tierra, propicia al recuerdo como la ble de la herinosura. Ellos compren.
cabeza de un abuelo! En ella tenemos den que Lutecia es más voluble que la todos tiempo para hacer añoranza del ola, más ligera que el viento, más caayer y soñar un poco en la mafiana prichosa que la nube. Ellos están seEl pensamiento está acostumbrado guros que ella no será nunca de nadie.
a recorrer un camino que aqui nadie Pero ellos sabeu también que una sola conoce, un camino bordeado de rosas mirada de sus ojos es la consagración Este documento es propiedad de la Biblioteca Nacional Miguel Obregón Lizano del Sistema Nadonal de Bibliotecas del Ministerio de Cultura y Juventud Costa Rica