REPERTORIO AMERICANO 317 tes a los de mi padre, pero sí sé que en mu debía asumir nuevamente su papel: él, el NOTICIA DE LIBROS cho debo a ellos lo mejor de mi poca felici de padre; yo, el del hijo. Esto era necesadad presente, mis recuerdos más puros y rio en presencia de los demás y especial(Viene de la pág. 315)
mis mejores fuerzas.
mente ante mi madre. Nunca se me ocurrió El Padre Kino es el civilizador del NorTerminado el refrigerio, mi padre fuma indagar el porqué de esto. Pero eso no evi oeste de México. En 1945 se celebró su ba, leía y yo me tendía soñoliento y feliz a taba el que yo padeciera con el cambio. tercer centenario.
contemplar las aguas de esmeralda.
él parecía sucederle lo mismo. En ocasiones El tirolés Padre Kino. El papel de apóstol lo llevaba en la sangre.
De vez en vez preguntaba a mi padre socreí descubrir en sus ojos algo como un bre algo que me intrigase. Podría ser un ruego amistoso: No hables a nadie de lo árbol de forma extraña, una piedra de coque hemos conversados. Nunca lo hice; a Sobrina de Julio Flores, que guió sus lor, una alimaña. todavía tengo que agralas preguntas de mi madre, respondía con primeros pasos, doña Emma Vargas Florez de Argüelles (Concha del Marl. es prodecerle que respetara mi edad, mi ingenui agitadas descripciones del paisaje, reía ruidad, mi seria humildad de niño ante los dosamente y gesticulaba, procurando ahofesora. Nos remite, y cómo se lo agradeceproblemas eternos. Pues jamás cometió el gar lo que yo estimaba, y sigo estimando, mos, un ejpr. de Ecos del alma, en que están reunidas sus poesías: sencillas, pulcras.
error de fatigarme con una explicación un secreto precioso que a nadie debía com 11En la segunda parte, con el título de «científica o docta. Sus demostraciones nicar. No obstante, mi madre comprendía.
Campanas de Cristal, escribe para los niños obedecían a un secreto lirismo que yo comYo no podía dejar de notar que en el fondo y lo hace muy bien.
prendía mejor que todo lo que de él venía.
ella lo sabía todo, no sé de qué modo. Me Sefias de la autora: No eran sus explicaciones fantásticas o caiba a acostar en la mayor incertidumbre.
Carrera 25. 26 prichosas, por el contrario, encerraban un Pensaba que al día siguiente, lunes, venBogotá. Colombia.
profundo realismo. Pero esta sabiduría no dría de nuevo lo pasado y vulgar de la era hija de su intelecto superior, de sus coexistencia: la escuela, llena de compañeros nocimientos adquiridos. Era producto del ruidosos y atolondrados, de la mayoría de EI NO 23 de las Vidas Mexicanas. antecitadas: niño grande que había en él. Era producto los cuales solía yo aislarme; el trabajo de de un alma gemela a la mía que había cremi padre, que tanto lo alejaba de mí y lo José Rojas Garcidueñas: Don Carlos Si.
cido y madurado y había tenido tiempo y preocupaba, haciendo de él una persona güenza y Góngora erudito barroco. Ediciones XOCHITL. México 1945.
ocasión de observar las cosas con la mirada mayor completa; las fatigosas horas de La erudición, en Sigüenza y Góngora, es, limpia e ingenua. Fue cuando aprendí que clase, durante las cuales en vano me esforante todo, una posición de superioridad. En los poetas son aquellos que dejan en liberzaba por asimilar conocimientos cuyo equi 1945 se celebró el 3er. centenario de Sitad esta parte de sí mismos, que confían en valente jamás encontré fuera, en los anchu güenza y Góngora.
ella, que en ella viven y con ella adquieren rosos campos donde zumbaba el verano y la sabiduría del mundo.
la vida, la vida libre y bella que trabajaba El Núm. 46 de los celebrados Cuadernos Puedo decir que algunas veces él mismo pujante en sus bellezas.
Literarios de la Asociación de Escritores no se daba cuenta de qué era lo que hablaEsta época pasó pronto. Muchas cosas Venezolanos: ba por él; pues, distraído en su lectura, lecocurrieron. Mi padre salió de viaje durante Miguel Utrera: Rescoldo (Poemas. tura que pertenecía a otro mundo, no senun tiempo Cuar do regresó, tuye cabal con(«Miguel Utrera es en la actualidad.
tía cuando el fondo claro de su infancia ciencia de lo que yo había cambiado; ya era uno de los poetas venezolanos en cuya obra pugnaba por responder a mis preguntas. incapaz de comprenderlo. Todas estas tris: se siente una más profunda evocación de la En tales momentos, se interrumpía, sortezas, no obstante, no bastaron a destruir provincia nativa. prendido, y me miraba, como temiendo sorel recuerdo de las relaciones más sabias y Señas del autor: San Sebastián, Aragua, Venezuela.
prender en mí el conocimiento de su distracfelices que puede tener hombre alguno.
cion; pero yo le miraba atento y respetuoso Es cierto que todavía a veces, aun siendo La benemérita Dirección de Cultura del y entonces proseguía.
yo mayor, creí sorprender en mi padre moMinisterio de Educación de Cuba nos remiVenía la tarde. Algo cansados ya, trepámentos análogos a los que disfrutábamos te el Cuaderno de la sexta serie de bamos dificultosamente a la fiel bicicleta juntos, a la orilla del río, los días de paseo. Cuadernos de Cultura: empolvada y emprendiamos el retorno DuPero ya entonces estos breves e inútiles inCarlos Finlay: Estudios sobre febre rante el regreso casi nunca hablábamos. tentos de comunicación quedaban velados amarilla. Presentación y ordenación por el medida que nos acercábamos al hogar, se por ese otro yo que mi persona era enton Dr. Manuel Villaverde y Alvarez. La Haba.
iba acentuando aquella sensación tensa, ces, es decir, el adolescente pre untuoso, na, 1945.
desagradable, que separa comúnmente a los agitado, impaciente. no ha sido sino padres y a los hijos. De una u otra manera, hasta ahora, cuando ya puedo sentirme un Un cuaderno de poemas: Soledad y artácitamente, comprendíanos que cada uno poco más tranquilo, que me es posible vol. gustia. Del poeta venezolano Beníto Raúl ver a reflexionar en las relaciones que tuve Losada. Caracas. 1945.
con mi padre y rozar su verdadero signifi. Porque sé del dolor toco el arcano.
cado. Rozar, digo, porque sería imposible De la fidelidad del título al contenido comprenderlas del todo. Haría falta cual poético del cuaderno.
Señas del autor: Urb. Los Caobos. AveABOGADO y NOTARIO quiera de estas dos cosas: tener seis años o Buenos Aires.
ser poeta. De los seis años estoy muy lejos Oficiua: 25 varas al Oeste de la Tesoreria de la Junta de Protección Social y para ser poeta me falta la mayoría de una Qta. Zolita. Caracas. Venezuela.
vida de luchas, de experiencias, de aprenTELÉFONO 418 dizajes incesantes, de leccionee que no se Agencia del APARTADO 338 aprenden en las aulas ni en los libros, sido Repertorio Americano en el antiguo y supremo caudal de la sabien Londres: Imprenta Aurora Social Ltda duría del corazón, en el libro de la vida. B. STEVENS BROWN LTD.
quiso el destino, como lo quiso para otros New Ru kin House, TELEFONO 4310. CASILLA 884 afortunados como yo, que el prólogo de este libro lo encontrara, a temprana edad, en 28 30, Little Rusell Street, 1, sus órdenes el fuerte y querido corazón de mi padre.
London, England Octavio Jiménez Este documento es propiedad de la Biblioteca electronica Scriptorum de la Universidad Nacional, Costa Rica