REPERTORIO AMERICANO 205 Dos poemas de Carlos Ma. CAMPOS JIMENEZ (En Rep. Amer. Entre la forma. Sangre de flor.
Forma y distancia.
Flor de la flor.
Luz del mensaje. Flor del amor.
SONATA pues en tus huertos cerrados me he de quedar extasiada.
Dónde estás, tú, que me ciegas, dulce amor nunca colmado?
Fuente sellada.
Miel detenida.
Rompió tu sello. olor de amor.
Cuarto Movimiento: Adagio Andante. Maestoso.
EL HOMBRE El poema Sonata. está escrito tomando en consideración dos aspectos: el musical y el poético.
Desde el punto de vista musical, cada movimiento tiene un ritmo y sonoridad que trata de interpretar el tema principal, guardando siempre el mismo tono de toda la obra. En algunos temas, se alternan los solos con el coro. En otros hay un mayor equilibrio entre todos los elementos sonoros.
El concepto de unidad musical se mantiene además, utilizando frases poéticas semejantes en los diferentes movimientos, y relacionando el desarrollo de temas secundarios de un movimiento con lo expuesto en el anterior.
Poéticamente el autor ha tratado de despertar ciones que sugieran el tema de cada movimiento. utilizando para esto una combinación de imágenes, con solos, y coros a la manera griega. Este estilo aparece en su más fuerte expresión en el cuarto movimiento: El Hombre.
En el poema Protesta. se emplea también, la misma técnica poética, en un grado menor.
Una ventana cerrada llena de estrellas ausentes.
0Voz de los ciegos.
Raiz desnuda.
Manos que anudan.
Vienen.
Se van. Yo he visto en mis entrañas, florecer manantiales; y en plena primavera, marchitarse el rosal.
Torrentes de obsidiana los ojos de las fieras.
Serpientes de los aires las voces del silencio.
Asombro entre las venas.
Horizontes de hierro cortando el cielo a los árboles.
Sueños de hoguera que suben.
Tambor sonoro la espera.
De los poros de la tierra suben mil lenguas pastores.
Buscando están sus ovejas entre el pecho de sus sueños.
Reman fuerte los boteros navegando entre las yenas al compás del corazón.
Flor de granada las manos.
Asombro y luz las palabras.
Flor que germina.
Tierra madura.
Dolor alado.
Canción que canta.
De rodillas tiempo y cielo!
De rodillas el mensaje!
Desde el principio en el caos.
Desde el verbo, la esperanza Desde la savia, los frutos.
Desde la roca el milagro.
En el vientre de los cielos brotó la luz de semilla, y entre la flor del anuncio corrió sangre de promesa.
LA CREACION Flor de las luces del cielo germinando entre las rocas.
Bramaban las tinieblas y el caos era el principio.
Nahual de las edades fotaba entre la nada.
Palpitar de la piedra.
Semilla de la aurora.
Pedernal del silencio.
Funeral de la luz.
y estupor de su ser, la tierra sublimada tuvo voz y palabra, y en la forma hubo ritmo, y en la sangre, poder.
Segundo Movimiento: Andante, Fondas de voces.
Hierba mojada.
Huellas al viento.
Vienen.
Se van. Yo he sentido en mis manos, dolor y olor de hiedras: y entre piedras he visto, desnudarse la luz.
El corazón del cielo germinaba distancias, y atabales de forma ensayaban su voz.
LA ANUNCIACION Era la fuerza, lengua.
Era el signo, creación.
Una campana callada.
Un mar de voces, ausente.
Una llamada.
Una estrella.
Todos fueron.
Son.
Se van.
Tercer Movimiento: Scherzo Rio de niños!
Volvedme mis frescores!
EL NACIMIENTO Telúricos mensajes ias aguas asombradas.
Vegetal resonancia los poros del color.
La sombra desbordada, espectante y alada volaba en mil pedazos transformándose en luz. Ay amor, del amor medida.
Dulce yugo no sentido.
Promesa, esperanza y camino.
Bien que por siempre suspiro.
En el desierto marchita, dormida está la esperanza, Entre las manos, mil dueños ce han formado de deseos.
Corderos los ojos fueron, apacentados de sangre.
El ara de los mayores asombrada de conjuros, cerró la puerta de entrada de la miel y de la fuente.
Arenas de esperanza.
Agujas de la espera.
Tambores del silencio.
En el bosque hay perfumes bañados de distancias. Cantar yo quiero un himno. Ay mi carne aun en flor. Crugir de las hogueras.
Palpitar de la aurora.
Espacio y tiempo el sueño.
De la tierra es esencia.
En la oruga hay canción.
Ten el vientre sonoro, se forjaban dolores.
En la sal de los vientos, se pulía la canción.
En el sol de la lengua, navegaban palabras, y al conjuro del verbo hubo ayer, y hubo hoy.
Las horas congeladas, gotearon su llamada.
Crugieron los estratos de la sangre aun en flor. entre savia salvaje.
Mudez de las miradas.
Resonar de potencias. Ay mis voces que se apagan.
Ay esperanza esperada.
Promesa, camino y entrada.
Dónde estás que por ti gimo?
Blanqueando están ya los huesos de las mil huestes guerreras.
En el monte se apagaron el incienso y las plegarias.
Polvo de estiércol la vida.
Sombra de muerte los sueños. Estas mis flores sin voz. Entre las tinieblas, verbo.
Entre los silencios, Juz. Estas mis palabras, lenguas de la forma, tornáronse raíces para encadenar mi voz. Yo he despertado mis manos, para soñar tu canción.
Desde el principio. Carne aun en flor. Miel de las flores mis manos ro irán a panal aejno, En la selva las huellas son caminos sin fin.
11 Este documento es propiedad de la Biblioteca electronica Scriptorium de la Universidad Nacional, Costa Rica