REPERTORIO AMERICANO 243 Adrián lanzó un grito y se desmayó encima Apreciaciones.
Luego, mirando sus manos llenas de sangre: de las cañas. He podido comprarlo a fuerza de comer Cuando recobró el conocimiento oyó rumor de (Viene de la pàg. 2:39)
gachas y verdura con vinagre. Me había eml oces.
Cordero no desoye a quien le habla con lealtad, porque peñado en compralo. No me gustan los mataAlumbrados débilmente por las primeras luces alma leal es la suya, y porque ha dicho noble y fran lones.
del alba, el tío Dimi y el guarda del pantano ciscanamente: He aprendido a amar, no sólo la sinceAngel se irguió en toda su magnifica estahablaban de pie delante del cadáver del caballo, ridad del arte, sino también la de la critica. ha de ver su obra definitivamente labrada, brillar entre las tura, hundidas las manos en los bolsillos del panque yacia en un charco de sangre con los intestinos columnas del Templo nuevo de nuestro arte americano.
talón: desparramados en torno suyo.
Asi sea. Dimi. Escucha: yo te doy mi caballo. Sé bueno, Osmán decía el tío No me Antonio Médiz bolia que no es un matalón. Llévatelo ahora mismo!
lleves detenido. Bastantes desgracias tengo, El otro, abatido, sin levantar la vista del suecomo puedes ver. Anda, sé bueno, Osmán. De RICARDO LEÓN. lo, gimió entre los apretados dientes. El turco, enorme, con el fusil en un hombro Jorge Sáenz Cordero, cuyo precioso libro Kaaba. No quiero tu caballo.
y el morral de provisiones en el otro, de rostro traido a mi por las manos afectaosas del Sr. Garcia El bueno de Angel se esperaba esta respuesta: cobrizo y velludo, de negra e inteligente mirada; Monge, me ha conmovido profundamenter, no era para aceptarla hoy para lo que Dimi había se cruzó de brazos ante el infortunio y dijo en rechazado siempre sú ayuda. Sin embargo, inun rumano apenas inteligible. De ALFONSO REYES: sistió. Ser bueno. No poder ser bueno,. Dimi. Salgo de la lectora de su libro Kaaba con los me Vamos, no seas testarudo. Yo te compraré Boyardo pagado, boyardo servido.
jores auspicios, joven poeta. Vaya d. con paso seguro, uno si no quieres el mío. El boyardo no va a ser menos rico.
que es de buena raza. Guardate tu dinero. Evete (1. Boyardo rico, ma Dios luerto. Qué vas a hacer entonces. Otro caballo Después, clavando sus ojos huraños en el deste hace falta para vivir.
panzurrado animal, pronunció el veredicto que tiro de la derecha y al lado el caballo desempare Postrado, Dimi murmuró con voz apagada. alivió el corazón dolorido del campesino: jado, que inclinaba tristemente la cabeza. Que qué voy a hacer. Pues voy a decir Bueno, vu. Ma no hablemos.
Retornó a pasos lentos, lívido, mudo, y sir telo: voy a cargar mi escopeta con un buen cebo, volviendo la espalda a la tragedia, se alejó viéndose aguardiente bebió con su hermano. Este y esta noche esperaré al propietario en la cuneta a paso tardo.
le puso al corriente en breves palabras y con la del lado por donde pase su tartana y le meteré Dimi abandonó al compñero que tantos ser garganta oprimida concluyó: a bocajarro dos salivazos en los riñones. Eso vicios le había prestado, ocupó su puesto en las Ahí tienes. Es mi sino. Nunca volveré es lo que voy a hacer.
Haras y tomó el camino del pueblo después de a tener un animal tan hermoso. Apenas tenía. Pero irás a presidio.
haber descargado las gavillas.
siete años. Pues iré al presidio. El lucero de la mañana brillaba con todo su esplendor opalino en el horizonte cuando Adrián, Panait Istrati separándose penosamente de su mejor amigo de la infanca el hermoso alazán de andar altanero, de vivos ojos y sangre fogosa que arrastraba con desdén la barraca de cuatro ruedas se puso a Vasconcelos en París seguir la carreta del tío Dimi como se sigue un coche mortuorio. Mas a los veinte pasos, lleno Sus declaraciones.
de desesperación volvió junto al caballo tendido en el césped, se arrojó sobre los ojos para siemFundará una gran revista y casa editorial pre cerrados, los besó alocadamente y bañó con Envio del autor sus lágrimas aquellos hocicos que tantas veces había acariciado.
Desde hace una semana se encuentra en Hemos saludado en el modesto hotel del Luego, andando de espaldas, dejó extenderse Barrio Latino donde se aloja provisoriael espacio entre el y la más noble conquista. Paris, el ilustre educador, político y escridel hombre innoble: la escena del espanto desator, José Vasconcelos, la primera figura mente (1, Plaza de la Sorbona) al maestro pareció.
del Nuevo Mundo, de la juventud. Nos recibe cordialmente El cortejo fúnebre atravesaba ahora una pe El autor de Indologia, que trae encima en su pequeña habitación de estudiante, llequeña selva de abrojos, arbustos y zarzas. Las aún el polvo de los caminos andados du na de baules, valijas, papeles, libros. Soranas, los ruiseñores, los mirlos, las cigarras apagaban ya sus himnos en la somnolencia matinal.
rante este año de su jira cultural, visitan bre la mesa, la máquina de escribir con un Pero aún no se habían callado del todo cuando el do triunfalmente Colombia, Ecuador, Pa artículo a medio terminar destinado a La paro; la codorniz, la oropéndola reanudaban el namá, Cuba, la América Central, piensa Prensa de Buenos Aires del cual es colainterrumpido concierto y se bañaban en el aire establecer por largo tiempo su residencia borador, fresco y puro de la mañana, llenándolo con sus en la capital francesa, que es también la alegres y variados gorjeos, con sus alabanzas al El ex ministro de Edụcación de México Creador.
capital de la inteligencia.
ha venido especialmente a Francia con Lo inismo en el cielo que en la tierra, la vida objeto de fundar aquí una gran revista reanudaba su marcha, elevaba sus cánticos sincepara Hispano Amérića que comenzará. a ros, invocaba a la felicidad, en tanto que el hom Llegaron en estos días bre sembraba la muerte y descendía más bajo que publicarse dentro de un mes. Será. habrá los animales.
Savinkov: Memorias de un terrorista 65. 75 necesidad de decirlo. la principal tribuPedro de Répide: La Rusia de ahora. 75 na de veinte naciones. Al margen de esta El camino del tío Dimi pasaba por delante de Elias Erenburg: Citroen. Crónica de nuestro tiempo 75 publicación, que será mensual, y depenla taberna de su hermano mayor, el opulento tío. Ricardo Güiraldes: Don Segundo Sombra 75 diendo de ella, funcionará una casa editoAngel. Cuando Dimi se detuvo alli; extenuado, Benjamin Jarnés: Zumalacárregui. El para tomar un vaso, su hermano llevaba ya un caudillo romántico 75 rial, cuya importancia y trascendencia sc. buen rato dedicado a sus menesteres. Recién la Lamartine: Las confidencias. vols. 50 rán, como la propia revista, únicas en vado, cuidadosamente peinados el pelo y la barba, Anónimo: Leyendas heroicas de los rusos 50 América. 25 andaba de un lado a otro en mangas de camisa, Gaskell: Norte y Sur. Novela) vols.
poniendo en orden su batería. Dimi penetró Miguel de Unamuno: Très novelas ejem. Es el primer periodista que recibe Vasplares y un prólogo. 75 en el establecimiento como un autómata. Angel, concelos desde su llegada a Europa. Las Heliófilo: Charlas al sol. serie, miope, abordó a su hermano canturreando, pero Charlas al sol. serie. 75 declaraciones sensacionales que nos hace, al punto retrocedió, asustado por el semblante Alberto Thibaudet: Amiel. 25 inéditas. y exclusivas para nosotros, son sombrío y las ensangrentadas ropas de Dimi. Qué has hecho, desgraciado?
Interesan a los maestros algo así como la primicia de lo que va a Adrián se precipitó contra el pecho del tío ser, de lo que es ya casi, su Revista conSantonja y Torres: El árbol de Navidad.
Angel sollozando: tinental. vol. pasta.
05. 00. Ha. matado. al caballo, tio! Wells: Sanderson de Oundle 25 El eminente autor de La Raza Cósmića, El campesino, sentado en una banqueta y mi Fernando Sainz: El método de proyecnos manifestó textualmente lo que sigue: rando al suelo. confirmó: tos en las escuelas rurales 25. Sí, he matado al caballo.
Lafcadio Hearn; Kwaidan. 50 La Revista La Antorcha se fundará Angel apartó al pequeño y se precipitó a la Kokoro. 75 en París, no obstante que debiera radicarpuerta para convencerse. Entonces vió vacío el Carlos Dickens: La vida y aventuras de Nicolás Nickleby. vols. 00 se en la Habana, en Buenos Aires, en Pa(1. Si en turco.
Solicitolos al Adr. del Rep. Am. namá o en México, primero porque en París 75 Este documento es propiedad de la Biblioteca electronica Scriptorium de la Universidad Nacional, Costa Rica