mo Safo, chispeante y nada cortada, por él concibió la diosa Afrodita. dice. Mira, se queja Safo a una doncella REPERTORIO AMERICANO Safo y Alceo. Cualquier buen que Faón no la quiso porque tenía cas Grecia, especialmente en Atenas, a los texto de Literatura. Griega dirá de la pa. lle perdonarà que haga pública la quehaceres domésticos, ni se confiaban Safo auténtica la admiración que le tri explicación personal que de esa alusión las niñas exclusivamente al cuidado de butó la antigüedad entera. Dirá cómo me ha dado? En el Vaticano, hay una las madres o de las nodrizas, sino que Alceo, lésbico también y contemporáneo antigua cabeza de Safo; el tiempo con existían allí, como entre los dorios. murrido, viajador en largo destierro por la inpresión que da es la de una ca. tual, las cuales se rodeaban de doncellas muchas partes del mundo, revoluciona beza tupida de caspa. Me acordé do a quienes comunicaban sus conocimienrio y de familia de revolucionarios, cuyo eso. dice ingenuamente el poeta. y tos. Safo llama a su casa, morada de hermano Antiménides fué soldado de amargado se lo espeté a la divina Safo. una servidora de las Musas, de la que Nabucodonosor en la guerra de éste Es raro don Salomón. Es amargo. Esa debía desterrarse el llanto. Allí doncellas gran monarca contra el faraón Neco y oda es sencillamente sucia. Yo estoy te principales aspiraban, bajo su dirección, contra los Estados de Siria, Fenicia y miendo el día en que se le enchichen y. a perfeccionarse en la música a adquiJudea por los años del 606 al 584 an amarguen las odies de dulzura de su rir distinguidos y elegantes modales. No tes de nuestra era; dirá, digo, como Al Himno a Costa Rica y nos espetè alguna sólo Safo tenía escuela do esta estirpe.
ceo saluda a Şafo, en uno de sus más. grosería.
Ella habla a menudo de sus rivales, y bellos poemas, de esta guisa: llamándola «coronada de violetas, pura, dulce y sonse burla de Andrómeda, una de muchas. Safo y Faón. Faón es el reputado riente Safor; y cómo en otra poesía deamante de la prostituída Safo de los codice Müller. como es bien sabido, mirapor su modo de vestir que los griegos, clara que lo diría algo más, pero que mediógrafos. El maravilloso relato de la hermosura de Faón y del amor quo ban como indicio de las naturales inclile invade vergüenza de decirselo; cónaciones y del carácter de las personas. avispada como la vaquera de la FinoMüller. están evidentemente tomados de la mitología de Adonis y reproducen que la ha cambiado por su rival. Mira josa. le replica. con virginal desdén. dice un erudito alemán (1. Alceo, si tu con exactitud los rasgos de ese mito.
qué mujer te ha enamorado. una aldeana Hesiodo, en su Teogonía, según la ver. Eado a los tobillos. a una dama rica, que ni siquiera sabe llevar el traje ajuspensamiento fuera noble y honesto y tu.
lengua no hubiera querido proferir frasión de Aristarco, habla de un Faetón, ses indignas, la vergüenza no te hubiera engendrado por Cefalo en Aurora, a quien pero sin educación, como éstas que adorofuscado la vista y habrías expresado de niño robó Afrodita y educo para sa. nan nuestra culta sociedad, le decía la cerdoto de sus templos. Es de todo punto poetisa: francamente tus deseos»
indudable. opina Müller. que la base de «Cuando hayas dejado de existir, yaSensualidad y sentimiento, todas estas tradiciones es la leyenda ci cerás sepultada, sin que nadie te recuerde, Ese es el lenguaje de la Safo verdadera. pria de Adonis, y puede inferirse que porque no has cortado rosas de la PieElla también es quien reprende a su los griegos dieron al favorito de Afro ria. Desconocida de todos, vagarás errante hermano por haber comprado a la he dita el nombre de Faetón o de Faón, en la mansión del Hades y por entre taira Rodopis y por haberla después. y que acabaron, merced, a mil torcidas. oscuras sombras. emancipado por amor. Esa severidad de interpretaciones, por hacer de este Faón Safo es indicio, opina Müller. de la rec el amante de Safo. Pero. verdad que cuando topa uno con titud de principios que servía de norma esas leyendas falsas que sobre Safo es Safo y otras mujeres. Por lo a su conducta. el mismo autor afircuanto saben nuestros escritorzuelos (y ma que los aversos que aluden a sus reque hace a las relaciones de Safo con aún alguno de mayor elevación, como laciones con Alceo, revelan de manera otras mujeres, precisa saber que la vida Juan Mas y Pi) dan ganas de hacerle a evidente y palmaria el inmaculado hoy la educación femenina de Lesbos 210 Safo la cruel pregunta de Salomón de nor de la doncella libre y bien educada. se limitaban, como en otros lugares de la Selva? adelante el maestro alemán explica Persiles lleredia, diciembre, 1930.
que «en la época de Safo conservaban aún los griegos no poco de la primitiva ingenuidad y del candor con que la Nausicaa de Homero expresa el deseo El traje hace al caballero de tener un marido como Ulises. y que en materia de amor no se había sepay lo caracteriza rado aún la sensualidad del sentimiento, y añade que «Encargáronse los poetas cómicos de La Sastrería Atenas de quitar al sentimiento del amor la aureola que le purifica y ennoLA COLOMBIANA blece, y aplicando a los más grandes genios de las otras comarcas helénicas, las calumnias con que los diversos pueblos de Francisco Gómez griegos solían motejarse, precipitáronlos en el lodo de una vulgaridad bestial. le hace el vestido Selva. Con razón don Salomón de en abonos semanales, mensuales o al contado Selva eleva a Safo ese cri àne que él llama Oda en su desconcertanto libro del Hay un inmenso surtido de Soldado Desconocido. De qué te sirvió haber cortado rosas. pregunta el soldacasimires ingleses do, torturado por la podredumbre que halla en la descarnada experiencia de Operarios competentes la guerra. Un punto en esa poesía, toda ella amarga con la amargura que debe para la confección de trajes haber tenido en la boca el idealista que se metió a guerrero, un punto me llamó Haga una visita y se convencerá desagradablemente la atención y despertó mi indignación y mi curiosidad.
Avenida Central, 25 varas al Este del Cometa Selva le pregunta a Safo si es verdad San José, Teléfono 3283 (1) Carlos Otfrido Muller, admirable entre los más admirables estudiosos de su raza. Este documento es propiedad de la Biblioteca electronica Scriptorium de la Universidad Nacional, Costa Rica