174 REPERTORIO AMERICANO versos a villana prosa. El poeta invoca mostrar su aptitud para estilizar esa ver en prosa de cazador. El poeta dice lo su propio canto; le reconoce personalidad, sión en formas nobles y complejas, inu mismo delicada monte, en verso apto para derecho propio; se siente obligado a él. sitadas entre nosotros. No es mero ingenio traducir esa delicada fruición de lo bu; Puesto que tú, canto mío, por agradeci literario, ni simple virtuosismo, poder cólico.
miento que no tengo que explicar, te aludir, por ejemplo, al fondo del mar pisientes clásico, debo exhortarte a que te Voz de escondido sinsonte diendo pongas freno, ya que todo clasicismo es y de caudales presuntos una limitación. Te invito, pues, a que sodesprecio para la onda aprisionan en dos puntos frenes el ímpetu que naturalmente te lleva y atención para la intensa un silencio de mañana.
vida que en tu seno piensa a más osadas y riesgosas empresas, fijándoto ahora en la tierra nuestra, en el mundos de niñez tranquila. Quien no haya «sentido» alguna vez este episodio del silencio aprisionado, senámbito rural donde tu forma impera. Lue AO más un lenguaje egregio, de una cillainente es que no tiene la sensibiligo podrás evadirte otra vez, como quería imagen bella y nueva (o, por lo menos, dad organizada para tales percepciones.
Federico. Beber «un manantial de altura»
no valetudinaria. lay en esos versos un Pero es uu hecho un hecho poético que.
adonde ya la gente decididamente no sentido de noble valoración en el que no sólo puede expresar, si se puede, en verpodrá seguirte.
es difícil percibir la nota trascendental, sos como esos de Florit. No es éste todo un explícito progra el acento de eternidad que es la marca Percibidas estas cosas inefables. el ma? Clacisismo. Regionalismo. Naturalis genuina del poeta.
problema del poeta es trasmitir la expémo. De antemano, el poeta nos da las Pero ya veremos con más tiempo la Tiencia de ellas. No me avengo a creer notas de su clave. ya lo único que nos estilización de cosas, amén de palabras en la posibilidad de una poesía puramento queda por decir a los comentaristas del y de imágenes, que añade a la delicadeza expresiva, esto es, desentendida del lectipo periodístico es que este clasicismo, inusitada de este decimario de Florit.
tor o del oyente. Arte es experiencia coeste naturalismo, éste regionalismo no son municada. Para poder comunicar la suya, cualidades simples, siinplemente entendi Trópico y fuga. Los que la más delicada y fugaz, el poeta tiene das, pues de serlo estaríamos aún en la censuran a la poesía moderna su di que condensar su tenuidad, agregarles zona del Cucalambé; sino que son decan ficultad. suelen ser gente instalada en cuerpo y volumen. bien tiene que protaciones muy finas, y en eso está la gracia. una tradición de lectura perezosa. En ceder por comparación, dando a entender La gracia nueva de Florit.
rigor, no acontece tanto que esa poesía lo impalpable por medio de lo concreto.
El elemento clásico reside, como ya sea inaccesible, como que tales censores De ahí la exageración, el animismo, la vimos, en lo formal gongórico. Florit toma se resisten al esfuerzo necesario para al imagen, recursos expresivos en que lorit la décima tan cubaneada, tan arrusticada, canzar su sentido. No leen con la sufi acusa un señorío sorprendente.
tan cargada de anécdota y le devuelve ciente paršimonia y codicia mental, ni, Poniéndolos en juego, ha logrado darsu prestigio antiguo, nutriéndola de suti por lo común, con el ánimo generoso, sino nos esa versión hialina, depurada, etérea les contenidos enotivos y visuales, quierizado de intenciones polémicas, ante las casi de nuestro paisaje, sin enajenarle su tándole toda la tierra adherida, poniéndola cuales, se fugan y ocultan las purezas peculiaridad. Las alusiones a lo criollo a quebrarse en luces al sol, como un cris inocentes del verso nuevo.
específico están tan bien administradas, tal de cuarzo. El sonsonete «rectangular»
Del nuevo y del viejo. Esa gente pe que impiden que el sabor de la tierra parece que cobra juegos rítmicos interiorezosa es del linaje de aquel que dijo en se volatilice en el proceso de depuración res, inusitados, merced a los disloques de su lecho de muerte que el Dante le re expresiva. fraseo ese famoso uso y abuso gongorino ventaba. Es la misma gente que enterró Multiplícase el desvío.
que las preceptivas llaman «metátesis. al Góngora magnífico de las. Soledades del fuego solar y baña el lenguaje ya no es el «pán, pan; vino, y le concedió el beneplácito a las letrillas.
verdes los campos de caña vinos de la décima natural del país, sino Es, en español, la gente que en inglés y telas de cafetal.
habla difícil, de «fuero poético. como nunca hubiera entendido a Keats, ni a Luego vuelve a sit cristal quería Góngora, en que más que las paShelley, ni a Blake poetas genuinos, poey en los güines se enmaraña.
labras (como en el modernismo barroco de tas difíciles.
ayer) lo arduo es el sentido de su relaPorque todo esto no niega que la poesía ¿Quién no siente la cubanidad esencial ción en la frase. La décima, espina o nueva sea en verdad ardua. Ciertainente de este paisaje de palabrås? Históricadardo directo en boca del guajiro, ahora que lo es, como que en ella se ultima, o mente, el mérito capital del decimario se ha trocado en «espiral saeta.
por lo menos se adelanta mucho, el pro de Florit me parece que reside en esa ceso mediante el cual la poesía ha ido feliz captación de esencias cubanas. Es Voz de pueblo cantor, por claros mares poco a poco realizando su específica in la primera reducción del trópico nuestro giros emprende su espiral saeta.
cumbencia, que es la de decir las cosas al limite de la «jivefabilidad. que no se pueden decir en prosa. Esto En las décimas de Jar. que compoLa trasmutación no es sólo, sin embarparece que, con haber sido ya muy dicho, nen la segunda parte del libro, Florit se aún no se ha repetido lo bastante. Para ve menos constreñido por la necesidad go, cuestión de palabras, sino de ideas.
expresar todo lo lógico y factual, es docir, de conservar el carácter, la fisonomía, y Esta es poesía intelectual porque lo es lo que está en el primer plano de la con por consiguiento su abstracción es todavía de imágenes. De imágenes que no han ciencia, se ha hecho la prosa. Para ex más enérgica. Pero esta misma universasido sacadas de ninguna gaveta, sino expresar lo demás, lo alógico, lo semicons lidad reduce el mérito del empeño. Aquí presamente pensada cada una gracias a que la sensibilidad intelectual del poeta ciente, lo subconsciente, lo recóndito, la tarea del poeta se queda reducida a en una palabra, lo «inefablo, para eso expresar en imágenes de suma gracia la ha sabido encontrar la recóndita identidad de sentido entre hechos aparenteestá la poesía. La poesía es un intento experiencia del mar.
de «efabilización de lo inefable.
mente negados a toda posible relación.
la vida tangente a la encantadora pupila, Florit, por ejemplo presente se sitúa Ya ese lenguaje alquitarado, ya esa ante nuestro paisaje. De él le llegan al y la mágica repercusión do esa vida en virginidad de imagen, dan testimonio suánimo revelaciones sutiles de color, de ėl espíritu. Siu raíces ya que lo tasen el ficiente de la calidad poética del libro.
olor, de sonido, de forma, que no son vuelo, la décima se va remontando a su Se engañaría quien lo reputase «mera privilegiada experiencia suya, sino que «manantial de altura. evadiéndose hasta técnica» o cosa de fácil ingenio, al alcance entran, frente al paisaje, en la experien alcanzar la zona misma de lo inefable de cualquier versificador avispado. El sen cia de todo hombro sensible. Un cazador puro. El sentido, de tan delgado, se pierde tido poético de la palabra, el dón de la impenitente me explicaba una vez quo ya. Pero aún entonces queda el cauce esimagen. son ya el poeta. sin necesidad el mayor aliciente de la caza no era tanto tremecido de su fuga una vibración misde eso que llamamos «voz interior. men la cinegesia en sí como los encantos de teriosa en la inteligencia y un dulce rumor saje. etc. mí no me extrañaría, pucs, la salida al campo. Lo decía torpemonte, do palabras bellas sin albedrío.
que, en efecto, el propósito capital de Florit al hacer este libro no fueso realmente su versión de la tierra, sino vorge Maña. ch Este documento es propiedad de la Biblioteca electronica Scriptorium de la Universidad Nacional, Costa Rica