están porvenir. No por nto y calcula treve luz! No ignora eyes, el mogarlos en REPERTORIO AMERICANO 219 El discípulo. Hemos dicho literario. Pero no se conformaba que Sancho el pueblo. Como Algunas meditaciones con el hombre apasionado de una él, el escudero Panza tiene hode la obra El sentido trágico del Quijote, idea, con el ingenio parcial que rror a la aventura; trabaja, como sigue la línea de menor resisla noria, en un sólo sentido, y por RAFAEL CARDONA tencia de su mundo aislado, de su ingenio se repite siempre como acervo ideológico, y resolvió un añejo. cantar. Posee en cam Acaba de aparecer en las ediciones del Convivio todos en una sola exbio el lúcido sentido de los valoSan José de Costa Rica. 1928 el Hidalgo de dei res: el tiempo, la pobreza, el hamMancha completos: el héroe bre y el sueño. Es límpido y de caridad, de andanza peregrigårrulo como un arroyo del na, el paladin de la libertad, el monte, y sus argucias son siemsoñador de la justicia, el religioso pre inofensivas. Goza de inspirael orador gracioso, prociones momentáneas, aciertos desfundo e inimitable. Tiene, como concertantes para hacer justicia la vida misma, todas las formas: y olfato agudo del el sacrificio y la gloria, la majessabe de números, pero es gran tad y el dolor. Su matemático prepolvado y contuso, que da tumbos sentimento con exactitud.
contra la ley escrita y la medioDon Quijote, que ha estudiado cridad del egoísmo, es el de un los Evangelios y los practica, endios ultrajado que desvaría, y que no le es menester que aprovecha este dessario para discurso alguno inteligible para amonestar y castigar.
su escudero y que mientras menos Don Quijote no conoce otra ley le entierda más se maravillará; ni otro amor que lo Sublime.
como Jesús sus discípulos. Pobres nervios los suyos, some le tidos a tal dinamia, a semejante que Sancho se vea precisado las seguirle, aún dando al aire susrigerado vivir, la idílica sencillez, piros de nostalgia y tornando los la cristiana conformidad, todo ese ojos hacia el nido lejano.
Sancho se siente capaz de hacer de costumbres que tan excelente ser gran señor. Su conos parece a las gentes razonables; digo está en el impulso del corazón pero ¿qué es todo eso frente a un y en la astucia que desconcierta, gran sueño? La paz de la tierra Canto como don Quijote posee la es, en su juicio como en el de Crisfe en su destino, y aunque eterno to, polilla que roe y orín que como sú amo, se verá eternamente Rafael Cardona corrompe; ha venido al mundo condenado a servir porque ignora a meter espada contra los gique la libertad es la renunciación gantes los tiranos y contra las espontánea de toda comodidad. Si vidades de casta y diferencias de pro bestias. los pueblos. Para ello se Sancho poseyera esta verdad seria el vecho?
sirve del Pueblo, Sancho mismo, y le émulo de don Quijote y llegaría a Si hay algún mal que realmente promete cortejos de gloria y, arcos. la sublimidad también.
aqueje al género humano es la cosde triunfo arrastrándolo tras sí.
Añadamos que Sancho es la Cordura. tumbre, y la costumbre es el mejor Cuando el héroe prescinde de su predicado de la materia. Es la fuerza dicha personal y la entrega en inmoDon Quijote y la acción. Don negativa por excelencia y la razón de lación a la risa ajena, se arroga en Quijote no acierta a comprender que el resultado de sus acciones es el dolidas numerosas injusticias que concambio el derecho de soñar libremente y de despreciarlo todo, excepo el selor, y que su mi cordia es casi viven en las sociedades de todos los ñuelo que le embarga. Don Quijote siempre un mal para el prójimo. De tiempos gozan de sus artificiales adivina la mofa y el escarnio, la coahí que cuando trata de enderezar beneficios merced a esa falsa evidencia dicia y la traición; tiene demasiados entuertos ponga fuego en el encono.
y autoridad que adquieren las cosas Toda su actividad ha de quedar recuando el tiempo ha puesto en ellas para no percibirlos. Pero si se detiene cluída a las buenas intenciones, y por una supuesta equidad. Es en su marcha volverá a la oscuridad ello es, también en este sentido, el cierto que si no existiese este acomodo edo habito lugareña y no será digno de la seejemplar completo del esfuerzo humañora de sus pensamientos, la Gloria.
no. Nuestros actos, una vez ejecutados; el tiempo perdería ese sofocente ritmo que mece las cosas en Una gloria que en sí misma es labrano nos pertenecen. Son de quienes vaivenes ds siglos; pero es justo y dora en su pueblo, amasadora de halos reciben y de quienes los transforrinas y guardiana de ovejas: una simple man. La intención es la que forma ritualidad, broten del cansancio de la hermoso cosa, la gloria.
juicio en el fondo de nuestro sér.
Ejemplo: la aventura de Quintanar.
costumbre estos renuevos de santa re La Iglesia, el Imperio, la PieDolor de un lado, inocencia del belión contra el hábito, organizando dra. Todas las almas buscan, inotro da quien damos la razón cuando así el camino de todo perfecciona conscientemente, una salida hacia la un héroe doctrinario sacude las enmiento.
libertad: pero aquéllas en que la razón trañas de la sociedad y da al traste ejerce un influjo preponderante y un con la comodidad ajena? Valiéranos El Quijote total. Hay el Quijote tacto sin luz, desean introducir la más vivir como cualquier hijo de vemístico, el Quijote politico, el Quijote cternidad en el minuto y la inmovicino, en el constante ordeño de la moral. Cervantes hubiera podido esco lidad en el cambio. No es extraño, costumbre, en el ejercicio de las acti ger cualquiera de los tres, o el Quijote pues, que quienes han perdido todo justicia y de ser sello de una ese tranquilo Este documento es propiedad de la Biblioteca electronica Scriptorium de la Universidad Nacional, Costa Rica