Repertorio Americano 83 Un estante de obras escogidas y cruzaba a nado, y en tinieblas, los ríos poblados de fan. bra. Era el Isleño. Habla, durante la siesta, llegado a tasmas, en cuyas ondas gime de poche el alma de los la estancia, para combinar la cita con Ana María. Colgó abogados. Tenía una imagen protectora que le profeti. de toa rama uo porongo ovalado y prendió dentro una zaba las desgracias y le preservaba de los peligros. Mu. vela, cuya llama arrojó viva luz por los intersticios prac.
chas personas le sorprendieron encendiendo velas al ex. ticados a punta de cuchillo en tan raro fanal. Parecía traño fetiche, sobre la tumba de un suicida.
aquello, a la distancia, una calavera. La chepca vacía de ICuántas veces, sentado a la vera del fogón casero los ojos y la cavidad bocal fosforecían. Seguro de ahu.
durante las largas veladas invernales, el abuelo relato la yentar con el macabro fantasma a los solitarios transeunvida del Isleño! IBien lo recordaba Ana Maríai Mien tes de la vecina carretera, habló, con voz temblorosa de tras la voz del anciano, temblorosa como la llama del celos: hogar, perfilaba al bandolero generoso y bueno, dilatá. Ada Marſa, sabe que la mujer del Isleño no puede banse de sorpresa las pupilas de los nifios, y las mujeres ser de otro, te dije una vez.
trémulas, vibraban de amor.
Ella, sollozando, le contó su desventura. Creyó en el amor de Carlos y fué engañada. El burlador estaba por II regresar a la ciudad. No me desampares gimió.
El Isleño le aplicó una bofetada.
Carlos, columpiándose en la hamaca atada por los er.
tremos a los naranjos, foma perezosamente, arrojando vos grufió, lleno de cólera pero prefiero dejarte como Hube de brindar con tu cuerpo a los voraces cuer.
grandes bocanadas de humo. Una brisa fresca orea su el otro. Del Isleño nadie se burla!
frente. Log metales del sol hierven en el gran cofre de los cielos. Las palmeras lejanas agitan levemente sus pena.
Desen vainó su daga, caya hoja refulgió a la luz de la luna, y en un gesto brutal cortó la doble trenza de la chos, sobre un fondo incandescente. Sus troncos semejan esbeltas columnas de plata y sus hojas resplandecen como querida. con aquel trofeo en la mano, ya serenado el espejos.
espíritu, arrojó a los vientos un grito casi musical, mon.
Aquella ardiente siesta de enero sumía el cuerpo en to en su corcel y se alejó bajo la serenidad de las es.
trellas.
senstal molicie. El reposo avivó la imaginación, y Carlos pensó en la capital, la ciudad lejana y amada, cuyos me ¡No me dejes. No me dejes! gemía la. abando.
Dada.
dores detalles aparecieron vivísimos en el recuerdo. Pa.
saba las vacaciones en la paterna estancia, distrayéndose J: NATALICIO GONZÁLEZ.
de sus ocios con Ana María, cuya ingenta pasión, sin remilgos ai coqueteos, le retenia wás de lo debido en el campo. Nunca 8086 encontrarse, en esas soledades, con aquella campesina de formas venastas, cuyas piernas per.
viosas, firmes y ágiles, recordaban las de Diana la caza.
dora.
De pronto divisó en las lejanías, uno como árbol an.
En la Administración del Repertorio Americano se venden las siguientes: dante. Podo distinguir, pasado un momento, un jinete Kahlil Gibrán: El loco. 1. 00 que galopaba bajo el fuego solar, en dirección a la casa. Paul Geraldy: Tú y Yo. 00 Trala el sombrero cubierto de ramas y la cabeza del bruto Homero: Niada (2 tms. pasta. 00 perdida bajo un montón barnizado de hojas verdes: pin.
Tolstoi: Los Evangelios (i tom, pasta. 00 Dante: La Divina Comedia (1 tomo pasta. 00 toresca coraza que defiende, al hijo de los campos, de las Plutarco: Vidas Paralelas (2 tomos pasta 00 flechas del sol.
Platón: Diálogos (3 tms, pasta. 00 El desconocido, encabritando el sudoroso corcel, se Fray Luis de León: Poesias originales. 25 detuvo en la tranquera. Ana María, con quien habló un Contreras: Antologia de poetas italianos. 75 Eurípides: Tragedias (un tomo, pasta. 00 instante, entró en el cuarto y regresó con una calabaza Tagore: Jardinero de amor. 25 llena de agua. El jinete bebió largamente, a grandes sor. Bolívar: Discurso en el Congreso de Angostura. 50 bos, y en seguida se alejó de la casa al lento trote del ca. Homero: Odisea (un tom. pasta) 00 ballo. Henríquez Ureña: Mi España. 00 Minutos después, en la hora del mate, Carlos indagó Alfonso Reyes: Los dos caminos. 50 MI. Magallanes Moure: Florilegio 00 el nombre del visitante, sin obtener respuesta de Ada Isaías Gamboa: Flores de Otoño y otros poenias. 25 Marta, cuya mano oprimía entre las suyas. sus pala.
bras, la cebadora, sonrojándose, bajó los ojos, y con la cabeza inclinada sobre el pecho como una flor doblegada al soplo de los vientos, trazó sobre la arena vagos signos con el pulgar del pie. Carlos rehusó un tercer mate, son.
REPERTORIO AMERICANO rió satisfecho, cerró perezosamente los ojos y quedó ador.
mecido. La próxima madrugada habla de regresar a la SEMANARIO de cultura hispánica.
ciudad.
De Filosofía y Letras, Artes, Ciencias y Educación, Misceláneas y Documentos.
Publicado por III GARCIA MONGE Apartado 533 Con las sombras del crepúsculo se esparció sobre los campos y los montes frescura deliciosa. La noche estaba SAN JOSÉ, COSTA RICA, plácida, sembrada de estrellas y luciérnagas. Cautelosa, ECONOMIA DE LA REVISTA Ana María se alejó de la casa, siguiendo un sendero ex.
traviado que la condujo hacia la selva. Envuelta en blanco BI tomo (24 entregas)
12. 00 El tomo (para el exterior. 50 oroam.
manto de algodón, parecía un leve fantasma de aquellos La página mengual de avisos (4 inlugares, el buen genio nocturno que, bajo la luz de la serciones. 20. 00 Bo el contrato semestral do avisos se da un de descaento. En el luna, fecanda las flores y madura los frutos. Recorrió Anual, un 10. largo espacio, hasta encontrarse con otra apdante som La entrega. 50 Este documento es propiedad de la Biblioteca electronica Scriptorium de la Universidad Nacional, Costa Rica