AnarchismIndividualism

322 LUGE Repertorio Americano sario repetirlo, con la tristeza, con que lo escucharía un adolescente. Petit garçon, si timide, tu avez pas tort! ua rumor de oraciones casi discre.
tas, casi diminutas. se elevará de la colina inspirada para acoger su alma que aún sonríe.
todos los jardines no tuvieron sino bro en el más íntimo y conmovedor una primavera! La guerra le uogió dandismo.
de bravura patriótica y entonces dio «Il souriait et il disait: sus horas a la causa de su Alsacia y aime les leptes tristesses, mon su Lorena. De tarde en tarde volvió a amie, passez n:oi ce léger travers, sus afectos de juventud. como un comme je vous pardonne les yeux, cisne, cantó la última esperanza de su votre taille qui néchirait et toutes ces narcisismo sobre el jardín del Oronte: gráces peut étre inoubliables. Je sais el otoño fué más cruel. Pero se fueron que la petite ligne du sourire des fem.
de este crepúsculo aquellas fiebres 81 mes trouble la pensée des sages et, tiles, aquellos entusiasmos estéticos, pour nous, la puance des nuages mé aquellas teorías elegantes y solitarias, mes. Daus vos pruuelles mon image que estremecían su prosa única de serait plus agitée qu au miroir de ces lirismo y de ironía, aquellos paisajes étangs rafrechis par la brise. desolados de París y aquellas visiones burlescas del mundo en donde se conLEÓN PACHECO.
fundían todas las conquistas del cere. Paris, invierno de 1913.
Nos lo decía alguna vez Jean Coc.
teau el wenos barresiauo de los es píritus. hecogido a Barrés como un muro de pelota. Irreverencia. Amor de la paradoja? No, más bien nismo. Pero de aquel barre.
sianismo que inspiró los Ocho dtas en casa de Renán. Ah. maestro ve nerado, dandy de elegancias imposi.
bles, si Ud, hubiera sido barresiano y además equilibrista con tristezas de clown, bubiera visto la admirable po. sición de Maurice Barrés para jugar una partida de pelota vasca. Mi amigo Jean Cocteau tiena ese sentido de la iropía que es desorden y que es claridad al, nismo tiempo, el amor de la metafísica como humorada de placeres deliciosos: sólo él era capaz de escri.
bir esas espléndidas páginas de Les Noces Massacrées. Jean Cocteau, Ud.
tiene razón. Se confundía lo negro con la malicia. Glosas ΤΑΙ Alguien ha sostenido que la obra de Maurice Barrés adolece de un de fecto que le quita cierta eternidad: el :descuido de las almas de mujer. Sí, sus mujeres no tienen la importancia que les dio Goethe, que les dió Racine, que les dió Shakespeare. Pero si este espíritu fué cruelmente femenino, si itus análisis tiepen todo el entusiasmo femenino de la vida, si su delicada y amable Bérénice es flor de tristeza, de desconsuelo por su excesiva femini.
dad. iX su Philipe, y su Simbo. la evocación de Amarillys. Recordáis el la prendizaje de diletantismo, de negación constructiva, durante las tibias veladas de Saint Germain? No temblasteis con un dulce y diminuto estremeci niepto de caricia? las tar.
vades de Venecia. no os dijeron tanto como un beso? vienen a nuestros se recuerdos del momento, en esta hora tardía de Paris, las jornadas sublimes. en compañía de aquella mujer que nos hizo amar. con postalgia Maurice Ba.
trés, Marie Bashkiserff. Su diletan.
setismo era, como en el fondo de todo espíritu femenino, un diletantismo de la sensibilidad.
BARRÉS LA ANARQUIA No, no ha existido. Barrés es uno. El culto del yox ise ensalza tan cómoda.
AL vez no hay pluma de escritor mente con la cobediencia a los muercontemporáneo que no le deba tos. Las disciplinas del jardín de UD a modo de estado de cuentas a Berenice iligan tan bien con las lan.
Mauricio Barrés en el adiós que otor. guideces voluptuosas de Toledo o Ve.
gue a su muerte. Porque no hay alma necia. Todo esto tiene un denomi.
de escritor contemporáneo que no se pador común. Uo denominador comin encuentre con la suya, por lo menos que se llama Anarquía.
en relación de tangencia, De mi puedo decir, lealmente, que BARRÉS EL JANSENISMO ésta se habrá producido en puntos de sensibilidad, nunca en los de doctrina. Qué diferencia hay, después de Todo el mundo sabe que las dos en. todo, entre la tentativa a aislar un sešas sucesivas de la ideologia barre. individuo en la sociedad, y la otra, a siana han sido el individualismo y el aislar una nación en el mundo? El nacionalismo. No sé si me he sentido pecado, aquí, es precisamente la isla, más lejos de él en lo primero que en es decir, la ausencia voluntaria de so10 segundo.
lidaridad, el separatisano, el robinso. Por qué tanta insistencia, entre pismo. Qué diferencia, por otro lado los enemigos, y aun entre los amigos en el fondo, por el mismo lado, de Barrés, en presentarle en postura entre disciplinas y voluptuosidades?
de contradicción, en la vida y en la Recordemos pada más sin necesidad obra. Para qué razones tan delgadas de dejar de Kraft Ebbing por Freudy oblicuas como las empleadas por el que «disciplinas» significa: azotes.
mismo para justificarse? No existiendo Anarquía, anarquía. Fundamental.
aquélla en realidad, holgaban éstas. mente, el enemigo es Roma. Son el clasicismo, la autoridad, la ciudad, el. hombre abstracto, la razón. PagaREPERTORIO AMERICANO pismo, es decir, superstición campe.
sina, contra catolicismo, es decir, es.
SEMANARIO de cultura hispánica. tructurada universalidad. Cómo De Filosofía y Letras, Artes, Cien definiríamos, en una sola palabra, a cias y Educación, Misceláneas y DocuMauricio Barrés. Como el último mento9.
vástago de la prole de Jansenio.
Publicado por: Jansenio, Barrés. El salto dos GARCIA MONGE. parece demasiado brusco? Pensemos partado 533 en Racine, término medio en el cani. 10. Son las manos de Racine, un poco ȘAN JOSÉ, Costa Rica, femeninas, las que trasplantaron al ECONOMIA DE LA REVISTA, jardín de Berenice ciertos árboles muy La entrega.
finos de la Vallée Chevreuse.
El tomo (24 antregas)
12. 00 El tomo (para el exterior) 50 orosa.
La página mensual do avisos BARRÉS EL FIN DE (4 inserciones. 20. 00 SIGLO.
En el contrato somostral do Avisos so da un de descoeato. Bo el agual, un 10.
LA tradición japsenista, de una parte; el «Fin de Siglo, de otra, pre. 50 Una curva se rompió en este afán de poeta. Fué poeta como nadie: pero su espiritu quiso la acción. La lira de Deroulede fué más dulce para sus oídos que el canto de Bérénice. Pobre jardín en el cual las flores como en Este documento es propiedad de la Biblioteca electronica Scriptorium de la Universidad Nacional, Costa Rica