Subversive

Repertorio Americano 221 respetable; Luis de Tapia; la Facultad, a como él llamaba cariñosamente a Gregorio Marañón; los pintores Vázquez Toledo si no ahí. dónde? se de sus amigos, José Hurtado de dien Díaz y Bartolozzi; los críticos de Be.
puso el domingo la primera piedoza, Gregorio Marañón, Ramón Péllas Artes, Francés y Alcántara; el in.
rez de Ayalas.
ponderable arreglador al teatro de El dra, sin bendiciones. sin reguilorios amigo Manso, señor Acebal; los jueces solemnes, sencillamente, como a Gal. el pasado domiogo, a las diez y honorarios de Toledo, Sres. Hoyos dós le hubiera placido, de la sociedad o hermandad que rinde amistad des.
minutos de la mañana, eu la espiri Sáioz y Aogel Vegue. Todos allí.
tualmente considerada Plaza Mayor No faltaba más que Benito. Pero pués de la muerte del amigo.
Es costumbre sepultar con la piedra de España, en el Zocodober. De allí. faltó? Evocó su espíritu Ramón Pérez angular de un monumento medallas, a la plaza del Ayuntamiento, y de de Ayala en conceptos que sublimes esta plaza, a la calle de Santa Isabel, parecieron a cuantos los escucharon, monedas, periódicos y un documento a descubrir la lápida, bellamente escul y la emoción que agitó las almas dijé.
firmado por los concurrentes. Qué se pida; la elegante leyenda. En la casa enterró el domingo en Toledo? Nada rase provocada por el soplo de aquel donde se ha puesto había una hospe. espíritu inmortal.
que pudiera ser tomado como pido de dería o casa de huéspedes, y alií se Los amigos de Galdós, preocupados urracas; fueron sepultados prejuicios alojó Galdós, y allí escribió Angel y comovidos por lo que habían oído y con ellos un refrán y un dicho que Guerra. Ni voceros, ni música, ni leer a Pérez de Ayala, desfilaron en el malévolo, egoísta y socarrón pre.
juzgar tienen por sillar o fundamento.
eolevitados caballeros; los amigos, y el silencio, y como si acordarao tácitagobernador y el alcalde de Toledo, mente no profanar en este día la gran Muy hondo se soterró el bellaco. más como amigos que a título de au: ciudad, fuéronse a las afueras, juuto muertos y a idos no hay amigos. No toridades. Tiró del cordón el sobrino a las ruinas del circo romano y del ha de haberlos? En Toledo estuvieron, de Don Benito; el Sr. José Hurtado Hospital Tavera, designaron a los señoya en presencia, ya ep telegráficas o de Mendoza, que tanto le recuerda, res Mercadal, González Blanco (Don epistolares. adhesiones, hasta medio así en lo físico cual en no pocas pi Andrés) y Marquipa (D. Rafael. centenar de amigos de Galdós, ente.
pequeñas condiciones morales, descu.
rradores de ese adagio y de la burlesca como secretarios; repartiéronse traba.
exclamación. Qué amigos tienes, brió la lápida; vitoreó a Galdós, a To: jos, recordaron obras de Galdós, evo.
Bepito. ledo y a España el gobernador, y el caron su figura y marcharon a los CiSe convocó por medio de la carta amado del maestro, apoyada la espalda apóstol predilecto, el San Juan bien garrales, descansando unos momentos circular que creo merece ser publicada, en el artístico del doctor Marañón. en la pared como un hidalgo que pela de allí, a la estación, no sin dar vista y que dice de esta manera: la pava, leyó upas bien pensadas y al parador de las Almas, que en la bien escritas cuartillas, que centupli. novela toledapa de Galdós figura. Madrid, de abril de 1923.
carou la ya pernamente emoción de Este fué el acto inaugural de. upa Señor don.
aquel grupo de amigos.
Asociación pueva en España: la de Querido amigo: Deseamos que algu.
El aire diáfano de Toledo, su claro Los Amigos de Galdós.
nos de los más señalados amigos de cielo, muy alto y muy azul; el sol bri. Tiene dos sigpificados educadores Galdos amigos de su espíritu, devotos llante, las flores que adorvaban algu. del pueblo español: el uno consiste en de su obra nos aproximemos en una nos balcones y ventanas de la calle; la mutua tolerancia; el otro, en la especie de fraternidad comunicativa, y.
que esta comunicacióu dé por fruto allos pájaros que revoleteaban y piaban adhesión póstuma y perfectamente guna obra común por donde se enaltez en lo alto, como chicuelos, y los chi. desinteresada a un ingenio preclaro, ca y reavive la memoria del maestro. quillos que, como pájaros, chillaban. a un escritor, a un artista. Ambas sigHemos hecho notar una lápida austepugnaban por ver y oir, no se estabao nificaciones son raras en España. Es ra; con una epigrafia memorial, en la casa toledana que Galdós habito a tiemquietos un momento, ignorantes de todavía más rara la primera que la po en que trató, íntimo y constante, que ellos hijos de los hombres, que seguoda. Aunque no sea más que por con los personajes novelescos de su alegran la vida. constituyen en toda vanidad, ya nacional, ya regional, ya propia creación; no por ideales menos vivos y corpóreos, se apercibía a perpefiesta galdosiava el primer personaje; local, ya de escuela o de partido, sole.
tuarlos, y con ellos, a la gran urbe mile.
la calle, más ancha de lo que suelen mos pronunciar con dejo admirativo naria, en ese poedia moderno que se ser las vías toledadas; rostros de be. el nombre de un egregio escritor, titula Angel Guerra.
llas toledanas en los miradores; alguna aunque desconozcamos sus libros. Es.
El próximo domingo, día 15, saldre.
vieja en Toledo y en Sevilla, las mu. tos amigos de Galdós quieren releer mos de Madrid para Toledo en el tren de las ocho en punto de la mañana. Ali, jeres viejas son siw páticas, se pareceu los libros del maestro y despertar en agrupados, nog dirigiremos a descubrir a la Sauta Aua del Greco y de Muri, los más rudos o descuidados las ganas la lápida: un simple acto de reverencia, 110, algún clérigo curioso y algún de leerlos. Quieren que viva el escrirecatada y entrañable, recordando que caballero alumno de la Academia, cu.
Galdos, tanto como en las posibilidades. rioso también, formaban un ambiente, tor, ya que es imposible conservar uiaravillosas de la palabra. escrita, DOS vivo al hombre.
adoctrino en la majestad del silencio un ilustre sepado, un escenario y unos Es achaque muy pacional el rebu.
oral.
espectadores dignos del anador de sar tributo cariñoso, admirativo, al. Luego nos reuniremos en una refec: Toledo, del autor de Angel Guerra, genio que no en todo y por completo ción de veraz amigaoza en el culto al maestro; colaboraremos en definir nues.
Allí José, el deudo fraternal se amolde a nuestras creencias e ideas tros propósitos venideros; y al estreamigo; allí Victoriano, el secretario, y aun a nuestros caprichos. Fué en charnos todos en concordia las manos, escudero y amigo también; allí Paco, vida religioso? Los heterodoxos le re.
quedará asentada nuestra comunidad de el fiel lazarillo; allí Matos y los Mejías, pudiarán. No fué en sus escritos or.
Los Amigos de Galdós. No dudamos que usted nos hoorará con su compañía paisanos de Canarias; allí novelistas todoxo purísimo? Le maldecirán casi y su consejo.
que a gala tienen el ser llamados dis. todos los fieles y todos los fariseos.
Como es preciso conocer de antemano cípulos: López Roberts, Pérez de ¿Fué republicano? Los monárquicos le el número aproximado de los que le Ayala, Répide, Iosua, Catá; críticos desdeñarán. Fué monárquico? Los mos de ir, le rogamos nos conteste tan pronto como le sea posible si podemos como los insignes Gómez de Barquero republicanos se apartarán, hostiles, de contar con usted.
y Manuel Bueno; el burlón sentimen. todo homenaje. Si escritor romántico, Con la consideración más distinguida tal, el subversivo respetuoso con lo le rechazarán clásicos, realistas y ma Este documento es propiedad de la Biblioteca electronica Scriptorium de la Universidad Nacional, Costa Rica