398 Repertorio Americano gen dc mi amigo. El ritmo: ceutro de la antecedentes para recibir como a huésped la sobriedad, junto a la vastísima cultura vida, alia del universo. El ritmo que 60 que nos es familiar al autor de Ortodoxia, creadora de Eorique José Varona; el mundo acondiciona a la idea y que la crea de nuevo. De sí mismo no podía hablar nuestro amigo: de apariencias serepas de la poesía de VaEl ritmo, que está en nuestros menores de su ritmo de las ideas abstractas, de su lencia; el tono meditativo de los versos de actos y en los más decisivos: en nuestro impulso humorístico, de su literatura, que González Martínez. Podremos señalar 11.
cosueño y en el cansado paseo de un día es buchas veces un libre juego, lleno de mitaciones en esta obra fecunda. No podre.
estival.
sorpresas. Esa afinidad con Cliestertou en mos nunca dejar de sentir su claridad, su Su ritino ascendente, un ritmo creador. vuestro ensayista es lo que explica mejor la delicada luz del espíritu, su sentido de reSentimos este impulso en las obras más di excelencia de sus traducciones. El liombre poso, su serenidad resplandeciente.
versas de Reyes: en El Suicidas y en El del impulso rítmico liabía de ser un perso Muchas veces he pensado en la conversaCazadora, libros de ensayos y divagaciones; naje de la mayor intimidad para el habitual ción con Santos Oliver, al releer los libros en La Visión de Anáhuacı, en los fuertes lector de Chesterton.
de Alfonso Reyes. Algunos de estos libros. Cartoncs de Madrid, en El Plano Oblí el impulso rítmico hasta donde puede de creación o de crítica, han sido producidos cuo. Cuando el crítico acuño en una frase conducir. Podenios prever todas sus posibi en medio del agobio terrible de la vida. Bu observación sobre el viejo romance, no lidades? En Reyes, escritor de temperamento veces, el hombre ha sentido sobre su cabeza hizo sino reflejar su inás íntima realidad clásico y de cultura lubanística, bien pode las alas de la tragedia. la cultura lo ha estética. Estética, solamente? Picuso que en juos asegurar que a ningún desorden de las salvado y ha dado a su más íntimo lirismo Reyes cl impulso rítmico tiene un esencial ideas, a vingana confusión romántica, a nin una moderación, una suavidad conmovedovalor bumauo. No en vano, cuando él me gun bullicio sentimental. En su obra, senti ras. Es el espíritu de su elegía de Itaca: hablaba de su libro, de ese libro sobre el remos junto a la música que asciende el Ni forma de la vida, ni pensamiento paga, impulso rítunico que quizá no llegue a escri. silencio pitagorico, la claridad, la suave luz ni luz, ni voz, oi toogo calor ni compañía, bir nunca, pero que tan bien seutimos sus de la pocbe serena, cuando súbitamente, rompiendo el alma mla amigos, me anuncio la sencilla dedicatoria: Donetran como pájaros los ruidos de la casa, il padre, coronel de lauceros cu 1886.
NOCHE SERENA 1Claro romor de agua bajo los platanares He nombrado al «Suicida. cuya segunda y captos de las aves en el amanocer!
ylob visión de las nobles figuras familiares lectura ha sido un mundo de sorpresas para OCHE serena de nuestra América, desquo ya no be de miraros donde estabais ayor mi. He aquí como un impulso rítmico, mu conocida noche para tautos, de ti, y Dipersos los hermanos, lqué harás, antigua casa, sical dejadme ya decir lírico ya uviendo pensando en la obra de mi amigo, quiero adonde cada objeto me saludaba ya?
una abstraccióu cou otra, una idea compleja hablar, y más que con mis propias palabras, Si hasta la misma tiorra después que el agua pasa, cou otra más compleja aún, una noche pro con las que, en uoa tarde inolvidable, oí de ansiosa mo pregunta si ya po pasará funda del alma con otra interminable no. uu grave crítico espafiol, de un crítico de la che. Pero las ideas tienen un extraño fulgor generacióu de Menéndez y Pelayo, inuerto La obra de Reyes, en medio de sus cons.
y una lovda y sorprendente djúsica. Cuando eu 1920: Miguel Santos Oliver, tantes sorpresas, no ha perdido el espíritu llegamos a la primera abstracción, comprenFrente a la vastísima colección cervántica de esta poesía. Cuaudo quiero explicarme la demos que mucho tiempo hemos de tardar que posee el Iustituto de Estudios Catalanes persistencia de esta nota al través de los moen detenernos. Al alına nos llegan las palaque hablaba el crítico mallorquín de la obra mentos más diversos, al través de los múltibras del escritor, en el ensayo de los des. de América, de las actuales literaturas aué.
ples irupulsos (el impulso rítınico, elimpulso aparecidos. Todos mis aulielos se van tras ricanas. Habíamos recordado la renovación huniorístico, el impulso de lo imprevisto. de los dos inil trescientos cincuenta y un lírica en España debida principalmente a la un recuerdo muy personal vieue a auxiliardesaparecidos de Nueva Yorki. La ventana obra de Rubén, Eutouces, aquel escritor we en nui interpretación. Es el de nuestro está abierta sobre la poélie profunda. El pouderado, aquel escritor que, como todo viaje a Burgos, en el verano de 1918. Era el cauto, el rituo será el hilo invisible que uos verdadero humanista, tau bondamente creía tercer dia de nuestra estancia en la ciudad guíe.
en la fucrza armoniosa de la cultura, me admirable. Para aliviarnos un poco de la ¿Por qué, ahora, de modo súbito y miste dejó ver su pesimisvio sobre ciertas teudeucnioción que nos aliogaba, salimos al campo.
rioso acuden a mi picnioria unos vombres cias en el actual espíritu español. Encontraba Cerca del castillo del Cid, upa pobre mujer que son de la más alta devoción para mi en ellas, en medio de su poder dinámico, que vivía en una cloza de tierra, ofreció a amigo? Este seguro dominio en las ideas uu desequilibrio que hacía menos londa su Reyes un clavel. Vi a mi amigo correr por abstractas we bace recordar a Gracián, de eficacia en la yida, una falta de concierto, el camino del Castillo, paralelo al de la ciuquico ha sido Reyes uno de los más peue. de seguridad maestra, que limitaba su valor dad. Me parecía que era la suya una carrera trantes comentaristas; ese impulso rítorico, en la pura esfera del arte. Unamuno, Pio lírica. Eu frente estaba la ciudad austera, la cse puro triuufo musical, me hace peusar en Baroja, de obra tau fuerte y variada como ciudad llena de profundo reposo, llena de la reciente frase de Foulclie Delbosc, cu su desconcertante, fueron los ejemplos más una visióu de eternidad. Se oían los cantos edicióu crítica del poeta de las Soledades: característicos que cito para confirmar sus alegres de unos cordeleros. En la impetuosa Alfonso Reyes cs el primer gongorista de opiviones. Freute a esta falta de equilibrio, carrera aquel aabiente pouía una nota de los tiempos presentes. Así la doctrina del de cultura baruoviosa, América ofrecía a serenidad. yo veía así, con una honda inipulso explica las más íntimas dilccciones España, por nucdio de algunos de sus más emoción, pasar ante mí la obra del escritor del escritor.
puros escritores, una lección de serenidad, y la vida de mi amigo.
Hace unos meses, Wells, en su visita a El idealismo de Rodó, tan luminoso eu el Santa María dol Rosario.
Diadrid, preguntabu cou asombro a Reyca arte, tnu eficaz, tan constructivo en la vida; Octubro, 1922.
cóuio podía vencer las enormes dificultades que ofrece la traducción de Chestertou, csa el próximo «CONVIVIO. DE LOS NIÑOS. figura singularísima cu las letras inglesas coutemporáucas. Reyes, con su moderación Cuentos vicios, por MARÍA DE NOGUERA. Sou cuentos habituni, Ic habló de la tradiciou couceptista populares recogidos eu Santa Cruz de Guanacaste. Puede ser un libro de cu las letras españolas. Nucstra leugua teuin lectura para sus hijos o alumnos. Precio probable del ejemplar: 25 1. 50.
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