52 Repertorio Americano En la oscuridad ma. No creo en él, ante todo, porque experiencia, entonces los que hoy, se El saludo de mi amigo salió a mi respecto de ciertas ideas hay que defen empeñan eu mantener la sacra majes. encuentro: derse por principio de independencia. tad de la gramática tendráu que can No la veo, pero reconocí su trote Cuando alguna idea alega para man. biar su ciencia por la lingüística, que nervioso. Con Ud. seremos tres aña.
tenerse en nuestra conciencia, el pri. sí supone una virtuosa penetración de dió aquí en el riucón predilecto.
vilegio del tiempo y el de las autori. los secretos y altos valores del idioma. Acérquese. Su sitio está libre, Ud.
dades de las generaciones muertas, es Me he permitido hacer estos apuutes conoce el camino. ICuán propicias son útil defenderse de ella y por lo menos sin otro ánimo que el de mostrarle así las sombras para edificar ilusiones!
ponderarla en nuestra mente. Creo el interés que me despiertan sus preo. tientas gané mi lugar. Me deje que cuando la ciencia lingüística se cupaciones de maestro, que fueron. caer eu la alfombra y probablemente adapte realmente a las: condiciones de también las mías.
la mano de mi amigo me alargó uvos la enseñanza elemental y se haga con Su, afmo.
almohadones.
abundante material de observación y ROMULO TOVAR.
Luego hizo la presentación. Amiga mía, le voy a presentar la voz del Hombre que perdió su Sombra. Recuerda Ud. la leyenda? Hace tiem.
po peregrina por el mundo en busca de su sombra y no la encuentra. No crec Ud. que este amigo mío es un De LAS FANTASÍAS DE JUAN SILVESTRX honbre lleno de soberbia? Las ciuda. uo amigo que posee una pequeña y humilde reproducción des están pobladas de sombras, pero del busto de la Joven Desconocida, atribuido a Francesco Lau. ningling se le parece a la suya. Para rada y conservado en el museo del Louvre. Caerán alguna vez olvidar su tragedia busca refugio en la estas páginas en sus manos?
oscuridad. Eu cambio Ud. y yo nos sumimos en la sombra para olvidar la HORA no podría asegurar si en las gentes sentimentales cuando mirani yavidad de nuestra carne.
realidad esa mujer we hiciera tal alejarse su juventud. Enseguida se dirigió al desconocido, confidencia o si se trata apenas de una La hora era propicia para eutrar y le dijo: ilusión de mis sentidos. He dado en furtivamente en la intimnidad de esta Wiá, pobre ser que te crees difcconfundir la realidad con los sueños. alına, y mi curiosidad fué un gato que rente a una sombra, aquí tienes a la ¿Pero es que alguien me puede trazar se deslizó con paso sedoso doutro de Joven Desconocida, atribuida a Fran.
el límite en que éstos terminan y aqué. ella.
cesco Laurapa.
lla comienza? una insinuación mía, contestó así: yo no sonreí a la broma. mi me La aventura amorosa que más ne da siempre iniedo sonreír en la oscu.
he impresionado? Sí, se la coutaré, ridad. Sobreiría el otro, el Hombre sin Las últimas ondas del día oe iban ¿por qué no. Pero es que es acaso Sombra?
por la ventana. Yo imaginaba que ésta Una aventura amorosa. Sea bienvenida la Joven Descopo.
era una gran herida por donde se le Su acento era todavía tibio y sen. cida de aquel artista del Renacimiento, escapaba la vida a la habitación en sual, mas yo presentía que pronto la berdita mil veces por haberse digdonde me ballaba. De las esquinas vejez pondría en el su fría serenidad nado abandonar su zócalo del Louvre surgían las sombras, se deslizaban a lo y que los oídos jóvenes lo escuchariau para venir a poner el encanto de su largo de las paredes, se apoderaban cotonces con indiferencia.
juventud a la vera del fastidio de estos del recinto. Es una historia breve dijo tan dos vagabundos. Que los versos que Parecíame reposar en uo vido de breve que se podría leer «de una mira. repetimos con devocióu, reposen su plumón negro. En un rincón un zan da, como se bebe de un sorbo el agua vuelo en tus hombros, criatura pri. cudo aserraba la quietud con su sierra cogida en el hueco de la manor. Es vilegiadal minúscula.
Remy de Gournout quien así habla Así me acogió el hombre que per.
La silueta femenina que hacía un de un billete de amor en sus «Cartas diera su sombra en quiéu sabe qué momento se destacaba sobre el fondo de un Sátiron. Sin embargo, me com.
vericuetos del camino.
de claridad de la ventana, había aca. placeré en ella como un iluminador bado por desaparecer en la oscuridad, medioeval en uva miniatura.
pero en mi retida persistía pítida y pre. Fué hace mucho tiempo, como La presencia de este desconocido me cisa la visión de aquella mujer, cuya en los cuentos de hadas comenzó. turbaba.
boca daba la impresión de una flor que Anochecía, cuando se me ocurrió ir a Jamás el misterio de lo que somos, se deshoja. Estaba sentada en la acti. buscar la compañía de un aipigo que pesó más sobre mi pensamiento.
tud que he observado toman a menudo amaba lo mismo que yo la oscuridad. Cuando hablaba, su voz era ardieute Acostumbraba acudir a su casa al caer SOLICITE AL la tarde. La casa estaba en las afueras de la población y en ese lugar solita.
Taller Electro Mecánico rio se podía gozar de la invasión de las sombras con ojos y oídos.
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Esa tarde, al entrar yo, volaba del balcón el último reflejo del crepúsculo JUAN LUIS CAMPOS para reparación de: y se encendía una estrella en el trozo Calle 58 sur, entre avenidas y 88 sur MOTORES de cielo enmarcado. por la veutada, DINAMOS Nos. 650 y 656 TRANSFORMADORES Una voz alada, desconocida para mí, COCINAS ELÉCTRICAS recitaba co el fondo de la pieza versos TELEFOXO No. 190 APARTADO No. 935 de Dario: y en general para todo trabajo chiquito y grande, quo será bien atendido. Prontitud y baratura. Ni es la torcaz benigna, ni es el cuervo SAN JOSE, COSTA RICA (prolervo: son formas del Enigmalapalomayel cuervor. LA MEJOR DR DE LA IGLESIA CATEDRAL 250 Vri. AL SOR Este documento es propiedad de la Biblioteca electronica Scriptorium de la Universidad Nacional, Costa Rica