44 Repertorio. Americano en III siglos de reflexión, y el consejo de pro.
el ritmo de la respiración, esas dad de las cosas celestes no se encued.
piciar constantemente a esta madre de danzas cruzadas que concibió el maes. tre más extendida entre el pueblo, y Musas.
tro coreógrafo.
expresó la opinión de que los errores Y, un día, el milagro se produce: al. Marchas gimnásticas de mancebos, del sufragio universal serían menos dejar caer el lápiz, brotan los planos bajo los ojos extáticos del novio; war. frecuentes si los electores estuvieran exactos; al dejar caer la pluma, corren chas gimnásticas de doncellas, entre más al corriente del orden que reina los versos bien medidos: quidquid las trenzas caudales de la novia; pétrea en el Universo tentabam scribere versus erat. inmovilidad de los padres. secos ár: Una joven que había tomado partiTodo arte consiste en la conquista boles con barbas de heno y cuencas cipación en la guerra, dijo entonces: de un objeto absoluto, lograda en me profundas de ojos, los brazos plegados. Algunas veces, cuando estábamos dio de las distracciones que por todas las arrugas hechas a cuchillo. Y, al descansando, durante las bellas noches partes nos asaltan, y contando sólo fin, ese paso solemne y grave de los de estío, parecidas a ésta, contemplá.
con los útiles del azar. Sé quién estu novios hacia el lecho nupcial, como si bamos el cielo estrellado, por el que diaba el teatro griego entre los desma. entraran en una tumba. Es la borra. cruzaban los aviones. Contábamos, yos del amor, y casi casi leía los libros chera triste de Eros, la más intensa. entre nuestros camaradas, a un sol.
en los brazos de una mujer. Ese im Hermosas bestias cazadas por la Na. dado de espíritu sencillo, y cuyos lí.
provisaba atención.
turaleza, los esposos se aproximan mites tratábamos de averiguar, bro.
Pero ¿qué no es improvisación? Oh temblando. Salta el corazón, entre meando sin malicia. Sin embargo, Pedro Henriquez, tú me increpabas pulsaciones de marimba. Y, de pronto, viejo mío, le dije un día, sería espan.
un dia: se oscurece la luz.
toso que un avión se encontrase con No corriges. we decías: uo co Stravinski y Diaguílev están en wan. una estrella. Ya puedes figurarte qué rriges, sino que improvisas otra vez. gas de camisa, al piano; en tanto, el choque! Se quitó el casco, se rasco la La documentacion, es necesaria lle. coreógrafo, Massin, agota y anota, cabeza y al fin. contestó. Es verdad; varla adentro, toda vitalizada; hecha vibra junto al velador, trepida por no había pensado en ello. sangre de puestras venas.
dentro, baila con el alma. Circulan el Como se pusiera en duda la veraci. Sherry» y el té. Los gajos de limón dad de esa anécdota, up novelista tomo a placap la sed.
la palabra: Silencio: estos hombres improvisan. Copocí en otra época a una joven, Se levanta una cortina: es Stra. Moviliza n, por unas horas, todas las que no era bachillera, pero que tenía vinski, otra vez: llega de Suiza, para potencias de su ser. Todo lo traen con. un rostro eucaptador y un corazón unas horas. Trae consigo el manus. sigo, porque no se aja con bibliote. muy tierno. Una noche de estío, muy crito de NUPCIAS. portento de mú cas. La memoria enciende sus frentes. sejante a esta, nos encontrábamos a sica en acordes, con tibios arrullos de y, al dar las ocho, todo debe estar orillas del mar y contemplábamos el marimba, y un sobresalto de resonan. concluido. Se besan el bigote, a la cielo estrellado. yo le expliqué que cias continuas que amedrentao y dejan rusa, y uno vuelve a Londres y otro a todos aquellos puntos brillantes eran ocioso el hilillo de la melodía.
Suiza.
mundos mucho más grandes que el Se levanta otra cortina: es DiaguíALFONSO Reyes globo que habitamos; que se conocía ley que vuelve de Londres, por unas Madrid, julio de 1923.
el diámetro de sus esferas enormes, horas. Trae en la mente, en el ánimo. El Mundo. México, su peso y su composición, y a qué distancia estaban de la tierra. Aquella joven repetía. Es increíble. ies increíble. Atreviéndome a más, le pom.
bré las constelaciones más elementales, si puedo valerme de esa expresión: la Osa Mayor, la Osa Menor, Casio.
pea, la Lira; y los planetas Marte, Júpiter, Venus; y las estrellas la Polar otra noche, después de un día cibo, sin embargo. No, os imagi y Sirio, tan querido para Renán.
calurosísimo, en una encantadora páis concebirla, etc. etc. Oh! decía la joven, eso es todavía propiedad situada en el centro mismo Semejantes discusiones no pueden más sorprendente, que se conozcan sus de la Isla de Francia, algunas perso nunca amargarse; son de tal naturaleza nombres. Pensaba que los sabios, pas se hallaban seotadas en una te que se elevan de la materia al espíritu, a través del espacio, habían interrorraza, desde la que se descubría un del tiempo a la eternidad, de lo cono. gado a los astros para preguntarles: amplio espacio del cielo.
cible a lo desconocible. Cómo os llanıáis. Me apresuré a En lo alto, las estrellas, una a una, Al llegar ahí, el hombre se detiene, tranquilizarla.
se iluminaban, y bien pronto la bó calla y se siente presa del estremeci. Convenimos todos en que el soldado veda, de un azul sombrío y constelado, miento del abismo, por lo que si se y aquella joven constituían excepcio.
se convertía, según la bella expresión tiene el deseo de hablar, se cae inde. nes, y en que la instrucción, el pro.
de un poeta, en algo semejante a aco. fectiblemente en los problemas de cua. greso, la difusión de los conocimien.
razas bruñidas y tachonadas con cla. tro dimensiones.
tos y de las luces no son ya palabras vos de plata. Es ya una gran satisfacción para la ¡Espectáculo sublime y propicio a humanidad, dice un sabio, haber po Fuimos a acostarnos nos dormi.
las divagaciones metafísicas! No falta dido resolver un gran número de esos mos tranquilos con ese reconfortante ron éstas, y cada 100 de los presentes problemas. examina los descubri. pensamiento.
se planteaba las preguntas de estilo: mientos hechos por la astronomía, MAURICE DONNAY ¿cómo y por qué existen todos esos as. desde las antiguas civilizaciones china París, agosto de 1923. Excelsior, México, D, tros? Hubiera sido tan sencillo que y caldea, hasta nuestros días, sin ol.
todo eso no existiera. No tan sencillo. vidar las Pláticas de de Fontenelle, como lo creéis, observaba un filósofo, sobre la pluralidad de los mundos, con Doctor EDUARDO MONTEALEGRE Cirujano Dentista Americano y se demuestra que la idea de la pada una mujer de la alta sociedad.
es imposible de concebir. Yo la con Un político deplora que la curiosi. Despacho: 2a Avenida y calle 48 Mirando al cielo LA vadas. Este documento es propiedad de la Biblioteca electronica Scriptorium de la Universidad Nacional, Costa Rica