88 21 Repertorio Americano Pío Baroja en el teatro Adiós a la bohemia que, sin cortar vuelo a ja idea, obli. las inglesas: El castellano de Coucy y de esto, no es la idea de las tres upida.
gau a una cómoda subdivisión, o la El abanico de Mlle. Mallarmé. En el des férreas, ni la represión por la re.
tirada de romance, cuya música, fa libro de Reyes, el artista no abandonatórica vulgar y falsamente natural, oi miliar en todos los oídos, está propicia nuoca el servicio del poeta.
la seguridad septida de antemano de. siempre. Por fin, la libertad, anun.
110 poder inventar pada nuevo, oi la ciada antes por el huir de la rima di.
FINAL falta de entusiasmo proselitista la que fícil repitiendo una palabra o cam.
me ha impedido a mí escribir para la biando en el esdrújulo el asonante por Advierto, querido Alfonso, que no escena.
el consonantemy reveladora de la per le he alabado en demasía. Conste, En priucipio lo que me ha estorbado dadera plepitud.
como le dije al principio, que no fué más para hacer una obra de teatro ha En cuanto a formas; el libro es muy por temor de que se me enojara. sido la idea del público. Las novelas vario. Del tesou con que están busca.
que yo he escrito las. he hecho sin das pueden dar muestra evidente las Digz CANEDO. pensar gran cosa en el público. Lo dos versiones del francés mejor que (España, Madrid. mismo nje pasa cuando suelo trabajar en el jardín de mi casa: trabajo por dejarlo lo más agradable que puedo, pero no busco la aprobación de cadie ni wc pongo a comparar este pequeño jardín con otros grandes y maravi.
llosos.
Comentarios propios a la obra Cierto, ya sé que al escribir un libro, con el tiempo algunas personas lo leerán y hasta quizá me den su opi.
nión; pero estas personas son para mi tan vagas, tan problemáticas, tan le.
janas, tienen tan poca realidad, que pequeña escena dramática titu. lado del teatro, sin conseguir entrar po me preocupan. Así, por ejemplo, lada Adiós a la bohemia. que dentro di tener una vida lozana. de mi peváltimo libro La leyenda de se va a estrenar en el Teatro Cervan. El teatro, como arte puro, igual que. Juan de Alzate. que yo creo que en: tes, no tiene nada esotérico, y no se la pintura, la escultura, la arquitectu. tre lo que yo he escrito es de lo mejor, presta, por su parvedad de materia, ra y quizá también la música, es un me habían hablado tres o cuatro percomo dirían los antiguos, a un comen arte cerrado, amurallado, completo, sopas, a lo más. Esto me da una impre.
tario.
que ha agotado su materia; un arte sión de libertad, de irresponsabilidad, mí, como a la mayoría de los es. que ha pasado del período de la cul me hace pensar que un libro es como critores de libro, se me ha venido a tura al de la civilización, como dirían una carta escrita a la familia. Al pen.
la imaginación muchas veces la idea Houston, Stewart, Chamberlain y el sar en una comedia o en un drama, de escribir para el teatro, naturalmen. moderno autor de la decadencia de los esas personas fantásticas que yo veo te atraído por la posibilidad del divero pueblos occidentales. El teatro, desde de ordinario en una perspectiva leja.
y del éxito.
hace mucho tiempo, ha dejado de in na, se me acercan tauto en la imagi.
No lo he hecho por varias razones. veptar para repetirse.
nación, que se apoderao de ella, y se Primeraniente, las tres upidades clási En estas artes la fórmula pomposa hacen tan reales, toman tal aire de cas me estorban para imaginar algo de Annuozio renovarse o mo Aristarcos, imponen tal número de con fuerza; luego, me estorba también rir es pura retórica. Qué ilusa reno. condiciones y de exigeucias, observan el tono de la retórica actual en el tea. vación la de este elocuente repetidor lo que hago, lo mideu lo pesan, lo tro. Yo, cuando he intentado escribir de los más viejos lugares comunes! comparan con esto y con lo otro, y para la escena, lo he hecho en un tono ¡Renovarse! Nos podríamos contentar me producen, a la larga, la johibición gris o en un todo conceptuoso y alti. con que el hombre se hubiese re.
y la perplejidad que me hace abandosonante. Los dos extremos de la ex Dovado algo desde la época del reno nar mis proyectos.
presión los sieuto mejor o peor; el hasta aquí. En la mayoría de las artes He aquí por qué no he hecho más término medio, no.
y en a del teatro la fórmula no puede que tentativas teatrales tan exiguas y, La retórica un poco casera, vulgar ser más que ésta: repetir o morir. tao pequeñas como esta de Adiós a y al mismo tiempo falsamente natural, Un gran espíritu innovador, un Des. la bohemia. que se va a estrenar eo la que la gente de teatro considera el toievski, en el teatro no se puede ima. Madrid, en el Teatro Cervantes.
lenguaje típico de las pasiones, la que ginar. Yo creo que actualmente en la se encuentra en la fraseología de Gal. literatura la única originalidad posible Pío BAROJA dós, de Dicenta, de Benavente y de está en los detalles. En esto está la Vera de Bidasoa, febrero 1923.
Martínez Sierra, yo no la puedo so. fuerza de Marcel Proust. En el teatro (EI SOR. Madrid. portar.
no puede haber detalles, todo tiene que Además de las seducciones del dine. ser brochazos y chafarrinón.
ro y del éxito, podía existir, al pensar en hacer algo para el teatro, la ilusión sentir un entusiasmo proselitista, y al de crear una cosa pueva, por pequefia mismo tiempo tener el conocimiento ABOGADO que fuera, o también la ilusión de ser de lai socalifias de los bastidores, coDespacha en la oficina del Licenciado don moralista y pedagogo al estilo de Du. sas ambas que yo no posco. pesar Francisco Aguilar Barquero.
mas, hijo.
El crear algo nuevo en el teatro me parece imposible. Todo lo que se ha dado cowo nuevo eu estos últimos ya salió el «CONVIVIO DE LOS NIÑOS. cincuenta afios, desde los poemas de Cuentos viejos, por MARÍA DE NOGUERA. Son Ibsen hasta las chapucerías espiritistas cuentos populares recogidos en Santa Cruz de Guanacaste. Puede ser un de Maeterlinck, han quedado como al libro de lectura para sus hijos o alumnos. Precio del ejemplar: 50.
Para moralizar en el teatro hay que JORGE AGUILAR.
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