4 LA HUMANIDAD PAGINA LITERARIAS Cisnes y cuervos El dolor de las cosas JA ¿El mundo? Yo no se! Fiebre, locura, mascarada de goces y pesares.
Todo revuelto la ramera impura, y la niña con el alma de azahares.
Yo no conozco razas, solo conozco hermanos: esos hombres de altivo y hermoso corazón, a la amistad comprenden al estrechar sus manos y ante el dolor ajeno palpitau de einoción.
Aquellos que desprecian los odios inhumanos, la sórdida avaricia, la estúpida abyección y fér vidos escuchan los ecos sobrehumanos y saben que hay jardine de en ensueño y de pasión ¿Fl mundo? Yo 110 se! La desventura, el tedio arrollador como los mares!
Abajo, el débil, la pendiente oscura. la Justicia muda en sus altares!
Guerra, traición, mentira, desenfreno: En los cálices gotas de veneno; las muchedumbres en grotesca danza!
Dos castas prevalecen sobre la tierra impura: la de los nobles cisnes de nítida blancura que vuelan armoriosos baja el azui docel; y aquella de los cuervos de fúnebre plumaje que desde el bosque acechan, con avidez salvaje el corazón del triste para cebarse en él.
De la razón el implacable a zote, y sobre el sueño azul de don Quijote la terrible verdad de Sancho Panzı.
J, BJARAMILLO MESA ALFREDO GOMEZ JAIME FEMENINAS para LA HUMANIDAD El hijo mas bello acerqué por que creí mi deber Pensamientos decirla algo sobre esa flor prisinera entre sus brazos, y to La precaución es la madre mándole las sedas de su dora de la seguridad. DUMAS El espíritu de observación, do cabello entre mis manos que pudiera llamarse el único muy pasamente, miré la diáfaEn la hora solemne iniste.
termómetro para adivinar la na alegría que corría por los riosa de los grandes dolores, to fuerza anímica del sér pensan ojos de la madre cuando me te, y cuya ausencia en los indi a trevía a decirla: es un angel. bres somos hermanos. Rogue dos somos unos, todos los hom viduos denuncia inexorabl y me interrumpió para de.
BARCIA mente una superficialidad do cirme: sí, es el retrato vivo del liente, ha hecho en mi vida el padre.
pobre acervo de mis conoci Tiempo despues una pobre mientos que poseo.
mujer sentada en un quicio me mana, se tornó triste y apenas Viajando a través de nues cía en sus brazos flacos y ama pude darle una caricia, un pan tras ciudades y campos, me he rillos un niñito que lloraba. y una sonrisa amarga, para de detenido a pensar sobre cosas Me acerqué porque ya sabía cir a la pobrecita madre: es un tan elementales, que no las he que no se puede pasar junto a angel enfermo este hijo. Si, conversado nunca con las per la madre que acaricia el hijos me interrumpió la dolorosa sonas de mi amistad, por mie sin decir nada, y mi presencia madre; es el retrato del padre do a que me tomen como al silenció esa boquita descarna. y, dibujó una sonrisa remo mas simple de todos los séres; da. De una sola mirada bajé al ta y doliente en sus labios pero, filosofando en silencio, abismo de la realidad: era un marchitos.
allá en la paz de mi cuarto y niño con hambre: sus manitas Y, pensando en mis observa frente a mis viejos libros, he dibujaban en el vacío signos ciones, he llegado a esta conclu sentido interés por decir: de misericordia y sus ojitos mi sión: Cuál es el hijo más bello. raban vagamente en torno co El hijo más bello es el que se Alguna vez vi a una mujer jo mo buscando un punto en don parece al padre!
ven y sencillamente bella arru de clavarse. Mi corazon de llando un niño dormido; me mujer humana, demasiado huCLIRA LUNA Biblioteca Nacional de Colombia