5 LA HUMANIDAD BALTY 19 na e PAGINA LITERARIA Ante las víctimas Gotas demoledoras BARAT Ellos son. como nunca blasfeman sus rencores.
No temen ni al camino, ni a la lluvia, ni al sol.
Vienen de la taberna; cambiaron los sudo es De toda una semana por el vaso de alcohol. SUA EMATEA Porque la guerra es crimen, vergüerza de la tierra, En nombre de la vida condenemos la guerra!
La venganza no es dulce. Los incaltos agravios, Son hiel para la vida, son hiel para los labios.
Se acercan; y en sus rostros arden llamas de hogueras.
Huyó todo lo dulce que tiene el corazón: Los ruegos ir fantiles. las lúbricas quimeras. Huyeron las noblezas; huyó la compasión. E: fán del dominio, es el desvío humano Que ha roto con los lazos del liombre y del hermano.
Ahora cantan o rien.¡Y esto es lo vil y triste.
y Ya no se acuerda nadie, de que el dolor existe. a todos los aguarda con su boca letal. La vanidad que nace del lajo y la riqueza Es la prueba más gr nde de la peor pobreza.
Ya no hablan los instintos, del material quebranto, con sus quejas amargas, con las noches de llanto, con la choza sin lumbre. y el acerbo hospital. para el rrgulloso de su sabiduría.
Juvenal, alza el látigo de tu inmensa ironía.
alza eli MAX. LAY FELIX DE LA MONTAÑA EL IDEAL en Asia y es el sepulcro. para otros siglos está en América, y es la cuna de un pueblo: más para todo de be existir como en óvil de las acciones como la normas de la vida, como la corona centellante del espíritu; porque para todus debe existir algo que invocar, algo las amargas ielide des en donde nos hundimos que creer, algo que esperar en las angustias del dolor.
todos los días. qué sería de nosotros sin ideal, sin en los esfreizos del trabajo, en las penalidades de la luese modelo de perfección a que njustamos la conciencia cha, en las tristes esperanzas de la vida.
y la vida? Yo he creído siempre en el ideal, yo lo he visto lucir sobre tod nuestras espesas sombras y sa.
CASTELAR bre todas nuestras graudes tristezas. Yo tengo sí, tengo absoluta confianz en derecho; y creo que la humanidad lleva el ideal como una luminosa estrella so bre su frente El cuidro, la estatua, el monumento, la El árbol y el caminante música, la oda, la obra filosófica, la acción moral, son como gradas para accercarnos a este ideal, firme en medio de las indecisiones de la vida y de la ondulción continua de los tiempos. ese ideal que brilla sobre to Al pasajero: Tú que pasas y levantas sobre mí tu ro los errores, como el sol sobre todas las nubes. Una brez. antes de que me hagas ña, óyeme bien ociedad sin ideal es una casa de locos o una madrigue Yo soy el calor de tu hogar en las frías noches del ra de tigres. Un siglo sin ideal ve pasar sus días como la sombra amiga que encuentras cuando tini procesión de sombras.
camina3 bajo el sol de agosto, y mis frutos son la fresLos espíritus sin ideal se desconciertan y desvane. eura apetecible que te sacia la sed en los caminos.
cen, como se desconcertaría el sisteina planetario sin Yo soy la armazón a mig de tu caso, la tabla de atrcin. Mas para tener ideal, para tener u: mundo tu mesa, la cama en que tu descansas, y la madera de que sea como el cielo del inteligencias, se necesita tu barco, 117: recerlo en el siglo que no cree, que no trabaja, que Soy el mange de tu az da, la uerta de tu mora.
11. ia, que 170 espera; un siglo estéril una hond de da, la madera de tu cuna y la enroltura de tu ataud.
hie que se pierde en la eternidad; es un vapor mefítico) Soy el pan de la bindad y la florile la belleza.
que se divipi en la nada. Generaciones de grandes tra: Tú que pasa, yeme bieu y. 110 we hagis daño taj dores son las genernciones creyentes s generacio les de mártires. El ideal cambia; pare unos siglos está doivobodoin EMILIO BOBADILLA.
que pashe invierno; soy Biblioteca Nacional de Colombia