EL YUNQUE ORGANO DE LA CLASE OBRERA Directores. VALENTIN PERILLA y JUAN FRANCISCO NATES ΑΝΟΙ Bogotá (República de Colombia. Mayo 17 de 1906 Núm. 17 CONDICIONES Saldrá una vez por semana.
Si sirve suscripciones, Anuncios (convencional. Número suelto, Dirección telegráfica: YUNQUE.
PAGOS ANTICIPADOS Consorero pogosto ug 0909 MOVIMIENTO FISCAL de la República en el año de 1905 nuestra humilde mesa de redacción ha llegado el cuadro sinóptico elaborado por el Director de la Contabilidad Nacional, Sr. Antonio Pérez Rincón, y que demuestra de modo claro el estado activo y pasivo del Tesoro público, durante el año indicado.
Lo hemos verificado con la atención que reclama un documento de tanta importancia y tan nuevo para una Nación acostumbrada ya no saber por dónde van tablas en el manejo del Erario público; de ese examen hemos obtenido el siguiente resumen sobre el movimiento rentístico: Activo Monto de lo recaudado y reconocido en las Oficinas de Hacienda. 699, 374 03 Diferencia que representa lo que no alcanzaron producir en conjunto las diferentes rentas.
810, 185 22 incorporadas en los libros de ordenación y de existencias no computadas.
En cuanto a la parte numérica, que es la que hemos consultado, el trabajo del Sr. Pérez Rincón satisface plenamente y su laboriosidad inteligencia quedan de hecho comprobadas. En cuatro meses de consagración ha elaborado con la posible pulcritud digna de todo encomio, la cuenta general del Presupuesto y del Tesoro correspondiente a los cuatro años anteriores, operación dispendiosa y benedictina, si se piensa en el desgreño en que las Administraciones pasadas mantuvieron el ramo fiscal.
Con referencia a la parte esencial del cuadro anotamos algunos desperfectos fiscales, muy disculpables por cierto si se piensa en las dificultades que implican las reformas politicas y económicas que el General Reyes ha intentado con loables propósitos.
La Administración actual y lo decimos sin esa adulación vil que fastidia y empalaga ha desplegado una actividad recomendable fin de que todos los responsables rindan sus cuentas en oportunidad legal, que la Corte de Cuentas no demore el examen de ellas, y que se hagan efectivas las responsabilidades de los Recaudadores, Administradores y Pagadores de los fondos públicos, sin omitir los apremios consiguientes.
Cuánto nos place que la Dirección de la Contabilidad Nacional esté en tan buenas manos; el nombramiento que el Gobierno ha hecho en el Sr. Pérez Rincón, significa para los trabajadores, un paso muy acertado en el camino de la redención fiscal.
Reciba el ejemplar servidor público el voto de aplauso felicita ción que EL YUNQUE le envía en nombre de la clase obrera.
es aceptable cuando se refiere a la producción de artículos que se pueden obte.
ner y que abastecen el total consumo. Los productos agrícolas, el trigo, el maíz, la papa por ejemplo, se pueden producir para el general consumo; conviene eliminar la competencia; y se acaba de palpar que la enorme introducción de harina americana no disminuyó el precio y sí bajó hasta casi arruinar el valor del trigo que había costado para cosecharlo, mucho más de lo que logró en precio consecuencia de la inundación del artículo americano. Esta protección no redundó ni en pro del consumidor ni del agricul.
tor del país. Vino convertirse en neto.
beneficio para los especuladores hábiles y de recursos que podían hacer la importación.
Respecto de las artes manuales, de la producción de los artefactos hechos mano, la protección industrial, como aquí se entiende, como ocurre a personas que no conocen la ciencia económica, es con.
traproducentem; si los zapateros, herreros, carpinteros, etc. etc. fuesen en número y capital suficiente para fabricar todo el calzado, cerraduras y obras más comu.
nes de hierro y todos los muebles y objetos que respectivamente se consumen en el país, la prohibición de traerlos del Exterior redundaria en adelanto de las artes nacionales y en competencia entre los artesanos para sobresalir en el consumo de su artículo, por mejor construído y por más cómodo precio.
Empero, carecemos de numeroso personal, de recursos, y es por esto por lo que hay que buscar la verdadera protección del Gobierno las industrias y artes in y dustriales, en la forma práctica y eficaz con carácter universal, sin distinciones que puedan estimarse como favor, no la colectividad sino al individuo.
Comenzar por el principio: la educación industrial sobre la base de conocimientos elementales rudimentarios si se quiere, que permiten al obrero hacer cuentas, leer los libros pertinentes su industria y meditar y observar el adelanto de su arte en donde las cosas van más avan.
zadas.
Para proteger la industria nacional, ensancharla, aumentar indefinidamente el personal hasta que baste su producción al consumo general.
Esto se obtiene creando escuelas de ar.
tes manuales industriales, en las cuales al cabo de un año si se quiere en dos, un individuo de mediana inteligencia adquiere los conocimientos de obrero, oficial maestro, con la base de estudios elementales indispensables y una educación moral y religiosa dada por un sacerdote nacional católico.
El costo de un plantel de esta especie en cada capital de Departamento es relativamente barato, los recursos fáciles de obtenerse y el gravamen que se impon.
ga insignificante.
Cada Municipio debe concurrir con el contingente de uno por mil de sus veci.
nos, y éstos, escogidos por el Cabildo, por motivos de inteligencia y posible aptitud de entre la clase proletaria, con la obligación de enseñar luego sus conocimientos Monto del presupuesto de rentas calculado por aproximación. 10. 509, 559 25 a Pasivo Ordenes de pago definitivas, giradas en el año citado. 049, 742 89 Legalizaciones por gastos anticipados. 403, 058 04 Saldos disponibles para reconocimientos ulteriores cargo del Tesoro. 697, 700 59 Cálculo del presupuesto de gastos. 14. 420, 501 52 La diferencia que hay entre el pasivo y el activo, sea entre lo recaudado por rentas y lo legalizado por gastos, proviene, en gran parte, Begún la anotación del Director de la Contabilidad Nacional de Cuentas que basta entonces no habían sido Protección a la industria nacional En donde no hay industriales no hay industria, y sin industria no hay producción. Se mide el grado de adelanto y de riqueza de un pueblo por lo que hace y por lo que produce; cuando todos los ar.
tesanos y productores no alcanzan siquiera proveer el 25 por 100 de los artículos que se consumen, ese país se encuentra en estado de pobreza, casi miseria y su industria es poco menos que nula.
De la carencia total de manufacturas, que necesitan labor mecánica, se puede obtener otra demostración objetiva de la miseria y del estado de atraso.
La protección del Gobierno a las in.
dustrias, aunque contraria a la ciencia. Biblioteca Nacional de Colombia