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Pág. SPARTACUS SPARTACUS Pág. militan en las organizaciones sino también a los hombres de espíritu libre. Así se explica la presencia de delegaciones de estudiantes ve.
nidas de todo el país.
Si bien es verdad que de la honda discusión no surgieron interpretaciones nuevas, creaciones geniales, que por otra parte nunca salen de ningún congreso en cambio, surgió la conciencia justa de su valor. Si, como es muy posible, se cometieron algunos pequeños errores, ahí está el pueblo y la realidad para corregirlos. Es prende las federaciones locales y comarcales de diversos oficios formando éstas las federaciones provinciales para converger todas en la regional.
Las diversas ramas o especialidades de un gremio formarán la federación o sindicato local complementado en la federación local de diversos gremios.
En los zonas agrícolas se formarán consejos comarcales que representarán a los gremios que dependan directamente de las faenas agrícolas debiendo los consejos comarcales mantener relaciones y depender de su respec.
tiva federación provincial.
Si en verdad no se aproba ban las federaciones industriales se dió un gran paso hacia ellas adaptándose al carnet único y la estampilla única. Con esto la las federaciones locales, provinciales y comarcales ten.
drán la seguridad de que las cotizaciones se hagan efectivas, cosa esta que dificultó muchisimo la marcha de la organización. En corsecuencia, la recibirá centavos por cotizante. Provinciales cobrarán centavos y las Federaciones locales centavos por cotizante.
El cuarto punto de la orden del dia referíase al órgano oficial de la diario.
Nadie podrá seriamente discutir su zecesidad para la propaganda y para todo. Pero el congreso se paró en la faz económica. Después de un largo debate las cosas quedaron como estaban. Nosotros creemos en la capacidad económica y técnica de la para many tener un diario serio, que dé la tan necesitada unidad espiritual y de organización lucha. No debieron los compañeros hacer hin.
capié fundamental en la faz económica. Seguramente el año próximo la tendrá su diario.
Iniciábase la orden del día con la Revisión de valores sindicales: a. Tienen razón de existir las federaciones regionales de oficio e industria, o deben ser locales, comarcales y provinciales de oficio. Es posible el unicato de trabajadores como fórmula eficaz de organización sindical. e. Cómo interpreta el sindicato único esa organización. Qué valores superiores concede a ese sistema frente al régimen federa Jista que impera en la Comunista. El sistema de organización de la Comunista no responde a las necesidades imperativas del momento. Fué de gran eficacia si se quiere hace medio siglo, pero ya no lo es. Los tiempos han progresado, creándose, a través de ellos, organizaciones más ágiles y perfectas, más en consonancia con la eficacia de la lucha de clases y con las posibilidades de una nueva civilización sindicalista: el sindicato único, el sindicato por industrias. Nos otros creemos que no ha de pasar mucho tiempo sin que el cambio se verifique. No por esto la morirá, pues sus ideales son eternos y bajo esa bandera podrán cobijarse todos los organismos posibles.
La discusión del tema fué larga y acalorada, aprobándose por 123 votos la siguiente moción. Mantener el sistema federalista que comconocemos, en efecto, cuáles son los conoeimientos constructivos de ese nuevo mundo, hiperbolicamente bello y luminoso. La literatura que ha pretendido enseñarlos, es dema slado vaga y hallase demasiado distante de la verdad que se toca y se palpa, como cuerDo que ocupa un lugar en el espacio. No nos enfademos por ello. El hombre que se enfada, colócase fuera de combate, de discu.
sión, y no vé otra cosa que piedras para arrojarlas al azar.
La literatura anarquista a la que todos he.
maos contribuido en más o menos proporción, nos enseña magistralmente a destruir, pero no a construir. Y, por fortuna, pasamos por un momento en que se hace tan necesaria la destrucción como la construcción. Quizá más ésta que aquélla, puesto que el derrumbe de cosas es universal. Pero no tenemos para la construcción del mundo de que todos nos hallamos enamorados, más que algunas ideas que a fuerza de haberlas repetido tanto, se han tornado marchitas. Ahi con ella no podemos construir nada, no podemos afirmarmos, seguir adelante, trabajar por la rege.
neración humana.
Rusia ha creado un sistema sovietista, mejor o peor pero ya es algo. Y, sin embar20. los delegados de la aguja al congreso, ti no hemos leido mal, presentaron una proposición en la que decían que estaban de acuerdo con la revolución rusa, mas no con Jel régimen sovietista por tratarse de un ré.
gimen gubernativo. El concepto es explíci.
to, aunque no dice nada o no menciona qué régimen es el que puede crearse. Hemos buscado en él hasta lo que sus autores pudieron omitir, pero no hemos hallado más que palabras Con la revolución rusa están de acuerdo, en cuanto significa fuerza destructiva, pero no lo están con el sistema sovietista porque supone un gobierno. Y, no obstante, en ese sistema hállase la construcción sociológica de la Rusia revolucionaria.
mala esa construcción? Para los delegados de la aguja y para el congreso en general, tal vez sí. Esto da a entender que los con gresales tienen una idea constructiva mejor.
Pero. cuál es esa idea? No la hemos en contrado Los congresales o los delegados de la aguja no la han exppuesto, como si carecieran de ella. Su criterio anarquista no va más allá de las destrucciones generales o universales. Como idea de un revolucionarismo que llamaremos de estética, está bien; no precisamente si se tiene la preten.
sión de crear un mundo nuevo, un nuevo sis.
tema de cosas, hermoso, como una imagen de fraternidad.
El mundo nuevo al que aspiramos exige una construcción y es esta idea la que quisiéramos haber visto expuesta por los congresales. Es la idea que exige un nuevo método de lucha y de actividad, la que si los delegados la tenian o la tienen, han hecho mal en omitir.
El nuevo método que es el que se necesita, hallase ausente de la mentalidad revolucionaria, el que enseñe a conquistar el mundo so.
nado y a construirlo, aun más allá del régimen sovietista, alzándose de las ruinas de las destrucciones universales. Ya hablaremos nosotros de él en otra ocasión.
José Torralvo.
para la LAZARTE Sobre el congreso de la Comunista (Continuará)
EL NUEVO METODO No sabemos que el congreso de las socie o del mayor número de los delegados. Esto dades autónomas y de las adheridas a la es un mérito. La negación completa de tofederación del V, se haya ocupado del mue. do cuánto existe actualmente en forma de vo método revolucionario a seguir. Ha dis organización social y de gobierno, es una cutido, empero, muchas cuestiones de relati cualidad viril y valiente. Pero vayamos desva importancia, pero sujetas todas ellas a pacio. Una teoria de negación no se concibe, la táctica y moldes viejos. No reprochamos ni es saludable, sin otra teoria de construcal congreso tal omisión. Ha cumplido con ción. Construir es obligación del que desuna tarea al alcance de su entendimiento y truyệ, nada más.
Sabemos que la convicción anarquista desUna nota expresiva, sin embargo, ha so tructiva, supone la idea de un mundo mejor, bresalido por sobre todas las tratadas: la adornado de los atributos eternos de libertad, convicción de las ideas anarquistas de todos de justicia, etc. Pero no sabemos más. DesLa resolución del Congreso respecto a la finalidad ideológica de la atenta el orincipio de independencia politica de la clase trabajadora y afecta la libertad individual de cada uno de los asociados.
Asi afirmábamos en 1915, cuando se rechazó por parte de la minoria del Congreso de Fusión lo resuelto por el conjunto de los delegados, y nuestra opinión fue compartida entonnes por los compañeros Barcos, Casulla, Ghiraldo y otros; y asi opinamos ahora a raiz del primer congreso extraordinario de la Federactón Obrera Comunista.
responde en general a nuestra táctica revolucionaria un éxito politico ha sido para los obreros anarquistas impositivos la moción triunfante, Pero el éxito obtenido no nos hace feliz, porque no deseamos ni queremos una organización obrera, raquítica y acaudillada; que remos la organización obrera amplia, general y libre, porque entendemos que no somos nosotros los privilegiados de la era revolucionaria, sino que deben ser todos los obreros en general, y la revolución debe favorecer a todos los que no explotan el trabajo ajeno.
El triunfo de hoy, es el triunfo de la inconsciencia hecho puño, el triunfo del hombre inferior que obedece al instinto y no al cerebro, de la bestia encanallada, y no del hombre conscientemente sociable, refinadamente Nosotros que rechazamos la política parlamentaria en los gremios y fuera de los gremios, no podemos aceptar una política nues.
tra en el seno de una organización obrera que