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La vid a intelectual en Nu estra Am rica Movimiento intelectual a ti no m e rica no Α Τ ¿RESUCITA ZARATHUSTRA?
REFLEXIONES SOBRE LA ORIGINALIDAD LUCIO MANSILLA Rubén Darío ante la muerte por Jorge Guasch Leguizamón por Enrique José Varona Decir que es no y ¿qué es la originalidad una cualidad esencial en la obra de arte, es expresar una verdad trivial; por que no va a afirmarse, ciertamente, que la servil imitación o el plagio descarado sean cualidades que merezcan encomio. Puestos a elegir entre una revecepción original, individual, que un punto de vista personal de las cosas y obras que sean una mera imitación o un simple reflejo de otras concepciones, no es dudosa la elección.
Pero si tan sencillo es teóricamente decir que es una obra original y qué una que carece de originalidad; no ocurre lo mismo cuando, saliendo de la esfera de lo teórico, queremos probar, por ejemplo, que la obra es más o menos o tan original como la obra no ocurre ésto porque sea difi.
cil definir lo que por originalidad ha de entenderse, pues cualquier diccio.
nario nos da la acepción en que todos empleamos este vocablo; sino porque los fenómenos estéticos son tan complejos y a tan múltiples causas obedece su producción, que no siempre nos es posible discernir en una obra, lo que fruto de la originalidad del artis.
ta. de aquello que es tan sólo un reflejo otras obras.
Pero, ante todo, comencemos por definir con la mayor sencillez y clari dad posible la originalidad.
con esa definición sólo tenemos que pedirsela al Diccionario, al Diccionario de la Academia, para el cual lo original es lo que en letras y artes no denota estudio de imitación y se distingue de lo vulgar y conocido por cierto carácter de novedad, fruto de la creación espontánea.
Ahora bien: comencemos por afirmar que no hay creación artistica, ni de ninguna clase, por original que sea, la que no haya una parte de imitación.
Veamos el fundamento de este aserto.
Cuando un artista crea su obra. ya se trate de un egipcio del reinado de Ramsés II, ya de un griego del siglo de Pericles, ya de un contemporáneo se encuentra con que otros le han precedido y han creado elementos de que podrá aprovecharse, a menos que tenga el loco empeño de prescindir en absoluto, de las realizadas por los que le precedieron en el tiempo. Encontrará una técnica, obras consagradas. sugestiones en los broso de sus contempora neos; en una palabra, una suma de enseñanzas y sugestiones.
Caine, ha escrito muy hermosas pá ginas sobre la influencia que el medio físico y social ejerce en la producción de la obra de arte; pero es a toTengo en las manos La palabra de Ironia benévola, desde luego, hija Zarathustra. El libro del señor Al. del desengaño que nos coloca en un berto Lamar Schweyer es un sintoma. punto de partida muy diverso del de Lo he leído con atención y cuidado. Nietzsche. Este, como lo hace notar La atención resultaba natural, porque con razón el señor Lamar, es radicales interesante. El cuidado parecia ex mente optimista: confia en una trasmutraño, teniendo en cuenta mi experien tación de valores que ha de dar por cia; pero no logro todavía desenten resultado el entronizamiento, después derme de lo que ocurre en mi derredor. de su victoria, del superhombre. En esa La nueva generación, de la cual es verdadera edad de hierro, la plebe, el autor un buen ejemplar, pretende el demos, vivirá domeñado por señores venir hacha en mano, y derruir briorecios y heroicos, pero benignos, que le samente cuanto queda de la civiliza negarán ni el pan ni el techo. El ción que se ha resquebrajado con la pueblo crecerá y se multiplicará debamonstruosa guerra mundial. Bien. Ha jo: y los magnates vivirán en las cumbíamos acumulado tanta broza, que no bres, dando la ley, tan dura como me parece mal la tala. Por desgracia. recta.
otros dirán por fortuna, los raigones Quizás no haya yo percibido bien son tan fuertes, que mucho me temo que más de uno vaya resurgiendo. Muy a la vista tenemos muestra de ello. La Cuba moderna va recuperando con los años las viejas facciones y las vie jas mañas. Pero volvamos a Zarathustra.
Los jóvenes iconoclastas han tomado por guía a Nietzsche. Es un pequeño salto atrás; pero pequeño. Admiro grandemente a este pensador insig.
ne, uno de los más vigorosos sembradores de ideas poéticas en su tiempo. He vivido mucho y am y ampliamente en comercio con su multiforme producción; y hasta, desde lejos, he procurado ahuyentar a los cuervos que graznaban sobre su tun Pero.
no me ha seducido. Quizás resultaba demasiada para mi la talla de su superhombre; luego soy pacifista, pacifista impenitente, aunque derrotado.
No creo en las bienandanzas de la ALBERTO LAMAR SCHWEYER guerra, ni me deslumbra la virtud del guerrero. Harta guerra nos dan nues el cuadro; pero no me parece del todo tras pasiones y la naturaleza erizada nuevo; en alguna parte he visto esos y hostil que sobre nosotros gravita. mismos perfiles y contornos. De to.
esta queja contestarán, y contestan, dos modos no sería ese magnífico esnuestros aguerridos mancebos que no ofreciera yo a la hemos venido a la manidad, consuelo de su larga hiblea, ni a regalarnos los oídos con para cuita. No estoy por la tiranía; conozla zampona virgiliana; sino a ceñirnos co. por haberlo probado, lo áspero de el cilicio, es decir, la coraza y a comer su freno sanguinolento. No estoy por la con férreos dientes el pan de munición aristocracia, que engendra el orgullo del prest.
corto de vista en los que mandan y el En verdad, por mi parte, ignoro a servilismo hipócrita o el rencor reconque hemos venido; pero advierto que centrado en los que obedecen. No creo hay algo en nosotros, como un resorte que la democracia convierta en polvo siempre presto a distenderse, que nos de oro el barro de que está amasado lleva a buscar lo mejor; aunque todo el hombre; pero reconoce sin ambajes se resuelva al cabo en bella fantasmo que todo es barro, y no da a los puños goría. El señor Lamar y sus el derecho que niega al cerebro. La no transigen con espejismos. Están por democracia abre, o debe abrir, el camla realidad, por recia y áspera que sea. po a las aspiraciones: y aquí se enEl superhombre va adelante, nuevo cierran todo mi derecho y todo tu de Herakles, desquijarrando leones y des recho. No empecemos por echarle una viando ríos de su cauce. Vaya enhora peña sobre el hombro, si queremos que buena. Nosotros lo seguimos con ojos el postrado se levante y ande. No humide afectuosa admiración, mezclada de llemos al que tenemos por colaborador un resquicio de ironía.
en la obra de elevarnos.
para dar das luces evidente que el fenómeno estético harto complejo para acomodarse dentro de las rígidas lineas del sistema de Taine.
La originalidad del artista es más aparente que real, si hemos de creer a Taine; pues en la obra más perso nal hay una especie de colaboración anónima de todos los contemporáneos Bajo esta voz brillante la de los artistas creadores. que viene vibrando hasta nosotros, distinguimos un murmullo y, como un vasto zumbido sordo: la gran voz infinita y múltiple del pueblo que cantaba al unísono en torno de ellos.
Cuán difícil será entonces, discernir en cada caso, si se aceptan las ideas de Taine, lo que es exclusivo fruto de la originalidad del artista de lo que es tan sólo el producto del medio! que la influencia del medio es in negable y real. aunque no tenga la acción todopoderosa que Taine le atribuye es algo que aceptaremos fá.
cilmente con sólo preguntarnos. qué hubiese sido del genio de Beethoven si éste hubiese nacido y y vivido entre los pieles rojas?
del de Miguel Angel entre los charrúas. del de Leonardo o Goethe entre los hotentotes?
Sin que ello implique disminuir el mérito de estos genios, ino es forzoso reconocer que mucho le deben al ambiente en que vivieron? 20, por reacción a las exageraciones de Taine, debemos sostener que el genio es algo excepcional, que es un semidios o un monstruo que todo se lo debe a sí mismo y nada al ambiente?
Lo dicho precedentemente basta, me parece, para hacernos palpar las dificultades que se presentan cuando queremos indagar el grado de originalidad que hay en una obra dada. Y, conviene agregar, de dos extremos igualmente peligrosos debemos huir: de dar patente de originalidad a toda costa o de obcecarnos en no verla en ninguna parte.
Suelen caer en el primera de estos errores, ciertos espíritus bien intencionados, pero sin la necesaria erudición. Admiran una obra y, sin preocuparse de lo que en ella pueda haber de imitación, proclaman su originalidad absoluta.
Incurren en el segundo error, harta frecuencia, por desgracia. las personas eruditas para quienes suele ser mayor el placer de encontrar la dosis de imitación que hay en una obra, que el de abandonarse a sus seducciones. Porque para muchos eruditos son la expresión de una verdad inconclusa las palabras de Salomón: nihil novi sub sole. lado el que a pobre hutierra a gustar miel (Continuación)
ligión en los limites de la razón pura le aparto del ministerio. En sus pri(1793. Kant capeó esta única mare meros escritos ha abandonado ese dog.
jada comprometiéndose como fiel su matismo; la acentuada influencia de jeto de su Real Majestad a no enseñar Newton, le inclinó a la filosofia mateni escribir sobre la religión. pesar mática y naturalista, evolucionando del de su extraordinaria sutileza critica, partido de la fe al partido de la cienno tenia temperamento de polemista, cia, como se decía por entonces. En ni contextura fisica de combatiente. asuntos religiosos, Kant se mantuvo en ¿Para qué turbaría su tranquilidad?
la corriente racionalista inspirada por ¿Dónde habría podido readaptarse el Leibnitz y Wolff profesor de Koenigsberg si le tocara en Sobre su verdadera posición filosósuerte ser destituido o desterrado, como fica, si tenía alguna en esa época, cabe tantos de sus contemporáneos que produdar. Desde que le nombraron Domiscuaban su filosofia con política y cente Privado (1. 755) hasta que consi.
religion? No conviene olvidar cier guió su cátedra de Profesor (1770. tos hechos expresivos. Su antecepublicó dos trabajos expresivos de al sor Wolff no había sido destituido y guna tendencia. El primero el proscrito, en 1723, acusado de irreli Estudio sobre la evidencia de los pringión y de inmoralidad que conducían cipios de la teologia natural y de la al ateismo y al fatalismo. su conmoral (1764) bastante hiriente para tinuador Fichte no fue después obliga la metafísica de lo suprasensible aundo, en 1799, a dejar la cátedra y a que influido por el dogmatismo racio.
huir a los estados sajones bajo la imnalista y destinado a conseguir un prey putación de análogos delitos? Antes y mio de la academia de Berlín, que fue después, los tiempos eran de lucha.
discernido a Mendelssohn; el segundo, La falta de pasiones humanas, de publicado anónimamente. Los sueños humanidad vivida, fué el secreto de de un visionario aclarados por los la producción genial de Kant; su obra sueños de la metafisica (1766) en un no resultara magna en su género si trabajo más bien volteriano y zumbón hubiese padecido veleidades diplomati.
en que se burla de toda la metafísica.
cas internacionales como Leibnitz, o ¿Era más sincero en su escrito prudenexaltaciones políticas nacionalistas cole de aspirante a laureado o en sus mo Fichte.
páginas anónimas de libre polemis.
ta? Aunque es imposible probar nada Fácil es advertir que Kant se propuen materia de sinceridad, nos inclinaso resolver el problema que más pre mos a pensar lo segundo; es más huocupaba a los universitarios de su tiem mano. En ambos casos Kant aparece po y que en sus cursos de profesor ha emancipado del dogmatismo teológibía tratado bajo diversos aspectos, coco, aunque al perder las creencias relimentando en lógica a Baumeister y giosas de su pietismo inicial conserva Meier, y en metafísica y moral a Baumlo mejor de él, su culto ferviente por garten. Estaban en tela de juicio la nala moralidad.
turaleza, los principios y el valor del conocimiento. Qué parte correspondía Todavía es dogmático, sin embargo, a los sentidos y a la razón? Los bandos en 1770, cuando consigue su cátedra extremos se agrupaban pro o contra Lode Lógica y Metafísica. No más alecke. El problema venía planteado desde gres herejías anónimas! Una cátedra, la antigüedad y la idea de someter a un en sus tiempos, no era compatible con examen crítico el conocimiento humano travesuras de sabor libertino. un habia acompañado a las disputas secu neto liberalismo le habría anticipado lares entre dogmáticos y escépticos, in peores disgustos que los motivados neístas y empiristas, racionalistas y sen veintitrés años más tarde por su crítisacionistas. Antes de Kant habían vuel ca de la religión. Sin embargo, en la to a plantear la cuestión Descartes con lucha entre la Razón y la Fe, entablada la duda metódica de su Discurso, Locbajo varios disfraces filosóficos desde ke con su Ensayo sobre el Entendimien el Renacimiento, Kant está por la to Humano, Leibnitz con sus Nuevos Razón, evidentemente; pero su dogmaEnsayos sobre el Entendimiento Huma tismo no es el de la izquierda emno, Berkeley con su Tratado sobre los pirista que ve superado Locke por Condillac, cuya primera obra es tamprincipios del Conocimiento Humano y Hume con sus Investigaciones sobre bién un Ensayo sobre el origen de los el Entendimiento Humano; menciona conocimientos humanos (1746. a mos los astros y omitimos al centenar co seguida por el formidable Tratado de satélites universitarios que escribie de las Sensaciones (1754) que escandaron sobre lo mismo. Kant, como era lizó a todos los tartufos universitafrecuente entre sus colegas, se ocupó rios. Leeria Kant, poco después, el tradel tema en su tesis para la Docencia Del Espíritu (1758. de Helvecio, Privada (Nueva explicación de los que a los pocos meses de su aparición primeros principios del conocimiento era célebre y admirado en toda Eumetafisico, 1755) y en su disertación ropa? En 1770 Kant continúa en paz para el profesorado de Lógica Me con la derecha racionalista capitaneatafísica (De la forma y de los princi da por Wolff y que dominaba en la pios del mundo sensible y del mundo enseñanza oficial alemana.
inteligible, 1770. apenas si en la seDe todos modos, en la segunda migunda, habiendo leído a Hume desde tad del Siglo XVIII los filósofos. 1762 sospecharse al formida eran considerados enemigos de las reble critico de once años después.
ligiones positivas reinantes, perseguidos.
La situación del debate era clara. por las Iglesias aún poderosas y calumContra las ideas innatas de Descartes niados por los teólogos, que se consise había pronunciado Locke en deraban depositarios de verdades revebre del empirismo: Leibnitz argumentó ladas, tradicionales definitivas. En contra los empiristas, agregando el tre el empirismo y el racionalismo la aristotélico quod non fuit prius in clección del segundo era casi forzosa sensu sensu profesores universitarios su explícito nisi intellectus ipse. que representaba una fórmula ¿quién se habría expuesto a que le taintermedia, una conciliación. Hasta charan de materialista, ateo, inmo1762, en que leyó a Hume, Kant no ral, sensualista, y todas las demás in había roto con la escuela leibnitziana jurias corrientes contra los empiris.
de Wolff, en que se formara. Hume tas? El caso de Kant era común al con su escepticismo, le indujo a apar. centenar de colegas suyos que no eran tarse de ella, en rebelión contra el dog. obscurantistas pero temblaban ante matismo; pero en vez de adherir al el peligro de que se les considerase li.
escepticismo, que era tan mal visto cobertinos. Eran los términos que ya mo el empirismo circulaban morales. Kant se consagró a buscar por sus consecuencias El segundo sueño dogmático, del una solución que no fuera una cosa ni que le despertó Hume, fué el racionala otra. Leibnitz le allanó el camino lista, más o menos wolfiano, vagamente inneismo y el empitocado de filosofía de las luces. El es.
rismo en una fórmula que permitía la cepticismo le indujo a criticar la Razón coexistencia de las ideas a priori y de como fuente del conocimiento metafí.
la sico, sin aceptar por eso otros pun.
ini experiencia. Feliz hallazgo: nisi ipse. Partiendo de Los fundamentales de la doctrina de misa Kant renovó con arte extraordina Hume. Era, en realidad, escéptico al tio el problema y caracterizó su su pro publicar su primera Crítica? Es difí.
pio método como una crítica del cono cil resolver el punto, aunque su concimiento, encaminada a probar la in. temporáneo Hamann le llamara un utilidad de toda metafísica dogmática Hume prusiano tuviera parecida fundada en la razón, es opinión Jacobi; diremos, más bien, que decir, racionalista. La Critica de la razonó como un escéptico, aunque tuvo Razón Pura iba contra los teólogos después la preocupación de no pare y contra los empiristas, pasando sobre cerlo.
el cadáver de Wolff, muerto en 1754. Evitaba, sin embargo, toda complici No aprovecharemos la oportunidad dad con Hume?
para hacer un milésimo resumen de las ideas de Kant; más cómodo seria, Se habla siempre del antidogma en todo caso, copiar alguno de los extismo de Kant y se repite que Hume celentes que figuran en las enciclopele desperto del sueño dogmático. en dias, manuales y aun almanaques filoseñándole a desconfiar del alcance sóficos. nadie engañaríamos con del del valor de glosarlos.
las especulaciones metafísicas. Es po Lo importante es señalar que Kant sible comprender hoy el sentido de desenvuelve con lógica admisible el esas frases hechas sin tener presente nisi intellectus ipse de Leibnitz, con el que tenían en 1780? Dogmáticos y tra el empirismo; y que una vez intemetafísicos eran los teólogos, los racio. gradas las fuentes del conocimiento, nalistas y los empiristas, que represenpor la alianza de la razón y la expe.
taban la confianza en la revelación, riencia, le aplica con asombroso ingeen la razón o en la experiencia, como nio la crítica reclamada por Hume pafuente del conocimiento.
ra determinar su valor y sus princi.
De cual sueño dogmático despertó pios.
primero?
Es sabido que Kant fué edu. Fue despreocupada esa crítica? Si cado en un ambiente pietista; nadie debía ser una lógica, como lo fué, conignora el valor fideista y moral de esta fesamos que comenzó bien y concluyó rama del luteranismo, muy difundida mal, presionado su entendimiento por en aquella época entre los teólogos profundas preocupaciones extralógicas.
universitarios. la edad de diez y Ni el puro racionalismo ni el empisiete años Kant ingresó a la Univer rismo puro le parecieron suficientes sidad de Koenigsberg para estudiar para fundamentar la moral y la reliteología y hacerse pastor. El estudio gión que consideraba necesarias, ocunuestro las conquistas con LAS NUEVAS RELACIONES INTERNACIONALES por Aníbal Ponce por Miguel Valencia De elevada estatura y de empaque Es la obra de un causeur. El desLO QUE PIENSA EL ILUSTRE rodeo de ganado vacuno que remoli.
soberbio, fué Mansilla uno de los re. orden de sus libros es el desorden de Acababa de entrar Dario en la ante na parte de los Cantos de Vida y Es nea; creíamos acercarnos al fenómeno TCHITCHERIN presentantes más hermosos de la vieja sala de la muerte cuando le conoci.
las conversaciones. Trozos de una aniperanza. Oh, título empapado en iro.
sociabilidad porteña. Bien sentada sobre y nos alejábamos, creíamos alejarnos y Son de la mayor importancia prácEra en los comienzos del año satánico nía. Veladas significaciones hemos de mación extraordinaria, alternarán con los hombros, su cabeza se erguía con otros de una vaciedad desconsoladora. visiblemente en su seno algunos obje.
nos acercábamos, creíamos descubrir de 1914. Herido estaba más que nunca, ver surgir de esas profundidades. tica para las naciones de la América arrogante altivez. Ancha la frente, bajo El mismo nos lo advierte en estas líneas como su Benjamín Itaspes, por las falLatina las siguientes ideas del ilustre Mi contribución personal no será de tos y nada veiamos; creíamos juguetes el crespo cabello peinado hacia atrás; que recuerdan a ciertos versos de La sas amistades. los explotadores de su Tchitcherin, en cuanto tiende a poner gran valia, pero los sucesos que con de la óptica, la imagen de algo que se negros los ojos de mirar provocativo.
talento y la infamia enmascarada de Fontaine: Yo no me ocupo sino de un freno al derecho de intervención serva mi recuerdo de una amistad que movia velozmente de un lado a otro, recta la nariz, gruesos los labios, blan bagatelas y de quimeras y de nonadas, innumerables rufianes de la literatura que pretenden tener las grandes potenfué corta, mas llena de solicitud y be.
de arriba a abajo, que iba y venia, que ca la barba copiosa. Muy puleras las parcelando la ciencia por carambola, de repente se detenía, partiendo de suhabianle dejado un profundo desencan lleza, he de contarlos más tarde, sinciás capitalistas contra las naciones más manos señoriles, eran sus ademanes anto. En otra alma menos pura, más cer. cera y respetuosamente. Por hoy remedébiles. El único peligro exterior para porque es bueno que haya de todo en plios y elegantes. Vistiendo con el darbito luego; ibamos a llegar y no lle.
las conversaciones. Pero cabe sospe gábamos porque el terreno se doblaba cana de las bajas realidades, habríase moraré el Darío que vi ante la muerte.
los países latino americanos es el imdysmo teatral de un Barbey Aurevi char que muchos quilates debió tener alojado un rencoroso desengaño: la su Era en el año maligno que desató perialismo capitalista yanqui y frente lly, gustaba desafiar el juicio público en médanos abruptos. Subíamos, bajá. ya se aliviaba con lamentarse como un su oro para que pudiera fulgurar entre las furias de la guerra. Dario se hallaba a él sólo puede salvarlos un criterio con el aplomo de quien sabe que llama bamos, galopábamos, trotábamos con conversadores tan brillantes como Ni la imaginación sobreexcitada, creyendo niño que descubre confusamente la pri un humano y divino desamparo, político internacional análogo al de: la atención colás Avellaneda, de ática frase armomera injusticia. el que habia creído Sólo la Intrusa, cuya venida presintió eminente estadista ruso frente a los esNadie, en efecto, podía pasar por llegar en breve a una distancia que conocer todas las crueldades y las lo.
niosa; Guillermo Rawson, con su tono tados imperialistas europeos.
él desde mucho antes que comenzara su lado sin sentir el influjo de aquella mesurado y persuasivo; Pedro Goyena.
despejara la incógnita de nuestra cu. curas de las gentes! He sido pagado a rondarlo, le hacía una angustiosa Ginebra, abril La Liga de las riosidad, nada, la nube se apartasilueta singular, lo mismo cuando ado pero transformándolo todo al conjuro de su con ingratitud, con traición y calum Naciones dió a la publicidad la nota compañia poblada de terrores milenaba del camino como huyendo de nos.
tescente regresara de su primer visita nia. y he sonreído tristemente. dijo voz armoniosa; Eduardo Wilde, derrarios. Esa alma, que vivió atenta a las del comisario de Relaciones Exteriores al viejo mundo con sobrero de copa otros, sin cesar sus variadas y capricho más de una vez. Pero sólo fué en los voces misteriosas, en comunicación pedel soviet, señor Tchitcherin, en la que mando a manos llenas el tesoro de su puntiaguda, paletó incroyable y pantasas evoluciones, burlando el ojo ex lindes de la eternidad donde ese ser renne con lo sobrenatural, oyó el vuelo se rechazan los principales detalles del ironía filosófica.
lón collant, que cuando, años más tarperto de los más prácticos, dando lugar infantil, que pasó por el mundo loco de las alas invisibles mucho antes de tratado de garantia mutua, sugiriendo Placenos evocarlo en una reunión a conjeturas sin cuento, a apuestas y de, usara la larga melena sansimoniana de ensueño y ciego de armonía. abrió mundana, cuando entre un grupo de disputas infinitas.
que ellas le dieran el aletazo final. en cambio la formación de una entidad y el gran chambergo alzado sobre la era doliente el ver la lucha que sostenia por instantes los ojos para mirar con mundial que no aplique el recurso de amigos dilectos, iba tejiendo sobre el frente a la manera de un Félix de Mon Después de la naturaleza, el hombre.
asombro las ruindades de la vida; fue canevás de mil temas surgidos al azar, la fuerza ni sanciones.
ese cuerpo impuro, amoroso con deliLa vida del indio, su lenguaje, su temar; lo mismo cuando paseaba sus entonces cuando sintió el primer dolor rio de la tierra, enraizado en ella como Aun cuando se nota la hostilidad los caprichosos arabescos de su inquieta religión, sus necesidades, sus usos y de hombre, el verdadero. Un aletazo de alones de coronel por la calle de la convencional del soviet hacia la Liga, un primitivo, contra esa psique inmafantasía: ya es una paradoja que salta costumbres, aparecen iluminados con Florida envuelto en amplia capa escarcordura transformó de repente a ese como un malabarista en el filo de una culada, que hasta en los momentos más los miembros de ésta juzgan que, no una intensidad como nunca la tuvieron. niño loco en un hombre lastimoso. Po deleitosos de la carne pecadora se data, como de púrpura clásica, que obstante, ello. importa un avance deficuerda, ya una descripción que se des. Cree uno hallarse en medio de esos tolcuando en su ancianidad vigorosa lucia dría decirse que dejó de ser poeta para po.
pliega fascinante, ya una frase de esprit dos, entre cabezas hirsutas, ceños fos.
nía a escuchar el paso de los ángeles, nitivo para la realización del tratado.
por el Bois de Boulogne, con su des.
morir; mas fueron fugaces los momenTchitcherin opone objeciones tanto sutil y ligera como el humo de un haenfado habitual, la levita gris de corte cos, cuerpos membrudos. Así Epumer, bano. Pero un buen día juzgó insufilos en que se disipó esa locura de enal tratado general propuesto por lord conocido. En una ocasión nos dijo, con irreprochable. para que todo en el cuya mirada esquiva pasa rozando el ciente el éxito del corrillo intimo y Robert Cecil como al sistema de trapalabras unciosas, el Manco de Galisueño, y por cierto tengo que hasta la ala de su rico sombrero de paja gua lesconcertara, mientras el monóculo y hora suprema fué de ilusión el yel.
ensanchando el círculo de sus amigos, yaquil, mientras su mano callosa tantados por separado propuesto por el cia: tuvo Dario los pecados de la forla flor en el ojal traían el recuerdo de coronel francés Requin.
mo de nuestro andante caballero.
empezó a conversar con el gran púma: la lujuria y la glotonería; pero tea la daga de doble filo; Mariano algún lord de rancia nobleza, la galera Mucho se ha hablado de la penosa jamás uno sólo del espíritu: ni el renblico.
Rozas, hospitalario y cortés; CaiomuEL PROYECTO DE LORD ROBERT atrevidamente inclinada a la derecha, odisea que fué la peregrinación terresni cor, ni la envidia, el orgullo. En ta, horriblemente sombrío como esca tre de Darío. Y, sin embargo, cuando le daba algo de bajo, extraño y cana CECIL verdad poseín como Jano dos caras, la pado del aulas un criminólogo: Bai.
llesco.
yo lo encontré, a punto va de hundirse que miraba al misterio y la que se com Declara en su nota el comisario de gorrita, grave y noble como un patriarEn medio de la chatura de una aldea en lo insondable, parecía como si ape placía en los deleites del demonio. Relaciones Exteriores ruso que el prica; Chanilao, baqueano expertisimo que con veleidades de gran ciudad. conas terminara de descubrir el sufri por eso, cuando desapareció la materia mero de esos proyectos equivale a poseñala los rumbos con la fijeza de un mo un buen burgués que se aristocrati miento: estaba aturdido, espantado, an pecadora, nos quedó un alma extraordicuadrante; y entre tanta dureza de ner el poder en manos de un grupo de te las miserias de la existencia; lloraba subyuga este espíritu proteico naria de blancura y, como purificada, Estados que forman el consejo de la za, bronce, la palidez enfermiza de Macías, con la desesperación del niño que se como más sonora, la armonía que nos que supo armonizar con arte insuperaLiga, lo que constituiría una dictadura el rostro simpático de Miguelito, la ble la rigidez militar y la distinción despierta y se halla solo entre tineiblas. trajo de la selva sagrada.
internacional, tanto más cuanto que en dulzura resignada de Carmen.
los conflictos internacionales es impo.
pedía auxilio cual si naufragara en su exquisita, el temple varonil y el refiAl lado de esa obra magistral, toda sible determinar cuál es el Estado agrepropia conciencia iluminada de súbito.
namiento epicureo. Poseido de una sed su producción ulterior resulta subaltersor.
El dolor, su dolor primigenio de hominsaciable de sensaciones nuevas, recona. Con las Causeries del jueves creó, Trio todos los jardines, se aproximó a bre, acababa de hacerlo nacer en un Por ejemplo, dice la nota, cuando en verdad, entre nosotros, un género mundo maligno que ni siquiera sospetodas las fuentes, bebió en todas las hasta entonces desconocido, consiguenlos torpederos japoneses atacaron Port copas. De ahí, con el escaso lastre mochaba. todo el duelo anterior de Arthur, el hecho, desde el punto de do prolongar más allá de sus dias eu vista técnico, era a todas luces un acto sus cantos no lo extrajo acaso de su ral de la conducta, sus aturdidas aneco de su charla: el eco nada más, des.
danzas por la vida; de ahí su amor propio corazón. ese grito desde que falta el ademán que da vida, de agresión; pero políticamente hapor las correrías azorosas y lejanas, garrador de Lo fatal. No hemos blando, no era sino una consecuencia la mirada que insinúa, la entonación oido caer las de su melancolia?
que unas veces le lleva campo adentro ANIBAL PONCE gotas de la política agresiva seguida en aquel que subraya. Pero hay mucha hojaras.
con sólo un puñado de hombres, para ¡Si serían lágrimas infantiles que el entonces por el gobierno zarista contra Tenia ya en su haber, dos cortas inca despreciable en los cinco volúmenes.
domar a la chusma con su audacia, y tomó por gotas de amargura. Los el Japón, país que asestó el primer cursiones por el teatro: Una tía y Atar.
Todo lo que gana en familiaridad, lo cuidados pequeños, las cosas inmediaotras, como un argonauta del trabajo, golpe a fin de impedir consecuencias tas. las necesidades de la hora consti.
Gull o Una venganza africana, fechadas pierde en valor artístico. La forma mis.
peores.
lo empuja a percutir, en busca de oro, ambas en 1864. Comedia de costumma en que redactaba, era un ostáculo luyeron tal vez su único martirio; pero.
los flancos riscosos de la montaña de a la labor consciente y prolija. al.
bres, la primera; hecatombe romántica, tras un Linfancia prodigiosa!
Amambay.
EL PLAN DEL CORONEL REQUIN guien que lo interrogara, declaró que la última. Nacidas de dos apuestas no Mansilla conocía desde las tolderias anhelo mezquino, de oro, de poderío En cuanto al plan del coronel Retienen más mérito que el de haberlas el secreto de su naturalidad consistía de besos, irrealizable siempre para ranquelinas hasta los salones del barrio quín, dice Tchitcherin que el gobierno ganado. Literariamente son tan malas en dictar. Si tengo tiempo retoco, San Germán y desde el tumulto de las él, poniase a desear la luna, o una es.
del soviet también lo conceptúa inacepsi no asi va a la estampa Aunque como cualquiera de las que triunfan trella, y la alcanzaba. Lo demás, lo RUBEN DARIO convenciones políticas hasta el tedio de table, por basarse en una serie de alianotras veces dice que quien no sabe bohoy y en estos días en que tanto se apremiante, lo que aquí abajo, no siemlos campamentos militares. Poseedor dhe zas por separado, y que aun cuando rrar no sabe escribir; la composición escribe sobre la paleontologia del teapre solía dárselo Dios por añadidura.
cinco idiomas entre los cuales se conEn una de las veces que fui a acom reconoce que tales acuerdos son inevi.
es para él cosa absolutamente secundatro nacional, tal vez se conviertan para taba el latín, escasas ramas le fueron como en el Evangelio, y entonces el pañarlo en su desamparo (me había tables en la actualidad, se opone a que ria. Echarse a buscar a cuál de los algunos, en excelsas y geniales.
por completo extrañas. Lector formidallamado con la desesperada urgencia demonio del alcohol suplía espléndidaestilos se asemeja el suyo, sería algo sean reconocidos internacionalmente y Concluída la guerra del Paraguay y mente la parquedad divina con un pa del que pide socorro) lo encontré tenble, pasaba con igual agilidad de un conceptuados como válidos para impetan ridículo como buscar parecidos a convertido a poco andar en jefe mili sajero paraíso artificial.
dido en el lecho, con los ojos entordir las guerras.
tratado de estrategia a un comentario su dicción personalisima.
tar de las fronteras cordobesas, nuestro He querido consignar un apunte psi nados y un lívido Cristo agonizaba sode Platón, de las profundidades de SpiSe opone también el soviet a identiConversaciones son también las Me.
de noza al mariposeo ex autor teatral consiguió firmar con Legouvé y del bre su corazón. Musitaba palabras de cológico, sugerido por un estado de ficar el asunto de la reducción de los los indios vecinos, un tratado amistoso.
morias. frases agudas los Estudios frío ascetismo de Kempis a la sonrisa alma de Dario, que ninguno de sus amiarmamentos con la creación de una enpesadilla, que trasparentaban una te morales.
Pero habiendo surgido ciertas dificulperfiles punzantes los Re.
gos presenció, porque ya todos lo ha rrible angustia interior. De repente me tidad internacional para impedir las pagana de Anatole France.
tratos y recuerdos. Pero si no llega su lades relativas a su ejecución inmediabían abandonado. Pronto nos dejaría Sobre el fondo romántico de su tem miró para demandarme luz: Que no guerras.
él también para franquear las puertas ta, el flamante coronel resolvió pene espíritu a desentrañar los móviles reme dejen llegar las tinieblas, porque peramento, las lecturas se iban acumuPropone, en cambio, que se celebre conditos, sorprende, en cambio, con fatrar hasta el corazón mismo de las toldel misterio! En todo caso queda aquí en ellas están todas las fuerzas del inlando sin plan, sin método, sin orienuna conferencia especial para la limicilidad prodigiosa hasta la más insigniderías, para imponerse a las tribus con el motivo para un estudio sobre el fierno. me dijo con desesperación. taciones. Una página cualquiera de las tación de los armamentos, que actúe ficante de sus manifestaciones exterio un golpe de arrojo. con cuatro ofihombre, que es, a mi modo de ver, tan suyas, ilustra más sobre su espíritu que sin embargo, ese día no estaba poseido res. Sus retratos tienen, por lo mismo, por sus propios medios, para fijar el ciales, once soldados y dos frailes, se interesante como el del poeta, y más, por el demonio del alcohol. Luego, con una minuciosa biografía. Algunas hasta máximo de la potencialidad de los ejérla minuciosidad de las historias clini hundió en pleno desierto.
voz cadenciosa, llena de lucidez y de mucho más, que el análisis del Pobre tiene el carácter de verdaderas confesiocitos y de las flotas navales y aéreas, Lelián. Sólo entonces hemos de ver De regreso, traia para su gobierno cas.
tristeza, habló del horror del más allá, tomando como base la extensión terrines, transparentando, con nitidez sor¿Queréis conocer el físico de Rozas?
la conquista de quince mil leguas, y de sus pecados imperdonables, del anlas analogias profunda, desconcertantes.
prendente, el tumultuoso desfile de sus torial, la población Helo ahi: Mi tio apareció: era un el importe de para la literatura de su patria la revegustioso tránsito, del temor a las anaque existen entre el Hombre Verlaine y pensamientos. El lector los ve llegar en las rentas nacionales de cada país, sienhombre alto, rubio, blanco, semi páli.
lación de un mundo nuevo.
el Hombre Darío; y así tal vez no se ha gazas del Bajísimo en la última hora, an tropel desordenado, suspenderse por do posible incluir esas medidas la Una excursión a los indios ranquedo, combinación de sangre y de bilis, llará en la semejanza lírica de los dos que pudieran impedirle entrar en el creación de zonas fronterizas, tal como momentos en torno de una idea madre un cuasi adiposo napoleónico, de gran les. es de los pocos libros argentinos panidas sino una extraña similitud psi. seno del Señor. Temblaba de miedo ese que polariza la actividad del espíritu lo sugiere el proyecto de la Liga de talla; de frente perpendicular, amplia. animados de vida perdurable. En vez pecaminoso, y sólo lo cal.
quica, tan misteriosa como su idéntica y cuando ya empieza a esbozarse el te las Naciones.
rasa como una plancha de mármol, fría de imaginarla a través de referencias o ma perseguido, basta una sola palabra, maba la visión del Crucificado, al que puerilidad, como su absoluta igualdad lecturas, Mansilla quiso ir hasta la rea.
un sonido simpático, un estado afectivo lo mismo que sus concepciones; de cepecaminosa, como lo socrático de CREACION DE UNA ENTIDAD oprimia contra su pecho como si quijas no muy guarnecidas, poco arquealidad misma, para tomar en ella sus esas dos máscaras.
siera incrustarlo en la carne maldita.
INTERNACIONAL semejante, para que desaparezca el equiapuntes, y tanta es la sinceridad librio y continúe otro vez la agitada das, de movilidad difícil; de mirada que Regadas andan, como desperdicios de Pero el egipán estaba en acecho; la fuerte. templada por lo azul de una breta del relato que el lector entusiastesoro, muchas anécdotas sobre Darío. beatifica faz de Dario se iluminó con En cuanto a la organización mundial carrera por un camino lleno de verialudida, Tchitcherin declara que desea pupila casi perdida por lo tenue del a los mado se incorpora muy pronto a un fulgor luciferino; los ojos, ligeracuetos y recodos. Dijerase que en su en bocas irrespetuosas, unas; en labios matiz, dentro de unas órbitas escondiexpedicionarios. Las exclamaciones discutir cualquier plan destinado a remente entornados hasta ese momento, cálidos de cariño, otras. Conveniente cerebro la difusión de la vida mental que das en concavidades insondables: de solver los antagonismos internacionasaludaron la partida llegan también seria recogerlas a fin de salvarlas del y de los que fluía una suave luz teolóordinaria no puede transformarse en hasta el les y a defender a las naciones débiles nariz grande, afilada y correcta, tirany frente al velo gris que en la gica se abrieron de par en par, y eran olvido y la desfiguración, y también la convergencia de la reflexión sostedo mas al hora del crepúsculo envuelve a la llagriego que al romano; de contra las fuertes.
los ojos del sátiro loco, medio chivo.
para penetrar con nida, como si a las células piramidales ¿por qué no?
labios delgados, casi cerrados, como nura, monótona como un mar en calel auxilio de ella en el laberinto de En cambio, no acepta ningún plan que goza en mirar redondeces de nieve de su corteza gris les fuera imposible dando la medida de su reserva, de la esa tenebrosa subconsciencia y descuque encare la posibilidad de que cual.
y labios rojos. se puso a rememorar ma, siente a su vez la emoción del misdisminuir la multiplicidad de sus confirmeza de sus resoluciones; sin pelo brir la fuente de sus torturantes neuterio y algo del temor religioso con que quier entidad internacional aplique memujeres encendidas de lujuria, rubias tactos.
de barba, perfectamente afeitado, de se emprende la marcha a lo desconoci.
didas restrictivas contra determinado y morenas, mujeres de todos los climas rosis, la que debe guardar el secreto Se explican así, en el politico, las modo que el juego de sus músculos era do. Ante sus ojos se despliega muy país.
y de todas las razas, hijas de su fan.
de los Nocturnos y el sortilegio de bueinconstancias, los abandonos, los desperceptible. Agregad a esto una Termina diciendo la nota que es justasia las más, supongo yo, y que nunca pronto el espectáculo inenarrable de fallecimientos. Liberal primero, elemendeseable el establecimiento de una se volvieron de carne y hueso labra o en una frase. la aclaración una naturaleza ignorada. Vagamente apostura fácil, recto el busto, abiertas to y 10 dócil del catolicismo, después; enelas espaldas, sin esfuerzo estudiado, una perseguida, el secreto sospechado, la inpresentida por el autor de La causihorrible fauno. la vez que acariciaba organización internacionals pero solamigo de Mitre, al principio, su entucierta corpulencia del que toma su emva. revelada a grandes trazos por el timidad que obsesiona. Que obseciona, imaginarias carnes, vírgenes unas, de mente si se basa en el deseo de resolver siasta admirador, más tarde; brazo depanfletario de Facundo quedaba a bonpoint, un traje que consistía en un sí; zno recordáis que Tackeray se mo bacantes otras, esas manos de abadesa, amistosamente todas las controversias recho de Juárez Celman después de Mansilla el paisaje de proporciones reschaquetón de paño azul, en un chaleco ría por saber cuál era el color de los que fueron su único orgullo, se desliinternacionales, sin recurrir a la aplihaber sido su clamoroso opositor.
calzoncillos de Washington?
cación de penalidades o medidas coerzaban en voluptuosa caricia sobre los tringidas, la mancha impresionista vi colorado, en unos pantalones azules ¿Comprendéis ahora la sinceridad protambién; añadid unos cuellos altos.
citivas.
Una mentalidad asi organizada no brante de luz y colorido.
flancos de Cristo. La lujuria huyó funda de esta frase? Un hombre que podía sino deslizarse sobre las cosas.
Mirad cómo describe la nube que puntiagudos, nítidos y unas manos perdespavorida ante la idea de la muerte. De La Prensa. piensa seis meses seguidos del mismo levanta en el horizonte una tropilla de fectas como forma, y todo limpio hasta La narración de viajes, el retrato exacque volvió a enseñorearse de él. Buscó modo, en cuestiones temporales, está guanacos: La nube de arena que había la pulcritud. y todavía sentid y ved, to, la charla fina, la frase chispeante. refugio en el Salvador, y creo haberle seguro de equivocarse entre una sonrisa que no llega a ser llamado mi atención antes de empezar eran los limites dentro de los cuales visto llorar. Mentalmente debió depor el señor. Pero si no puedo, si log Se explican así, en el literato, la mulel diálogo con Mora, se movía y avan tierna siendo afectuosa, un timbre de debió trabajar su espíritu. Las veces cir en ese momento de infernal peligro: cánones me impiden santificarle otra titud de los paréntesis, la prodigalidad voz simpática hasta la seducción, zaba sobre nosotros, se alejaba, giraba que intentó salvarlos, se cuentan a ra Padre mío, aparta de mi este cáliz! unión, y tampoco me deja la Iglesia de los guiones, la profusión de las litendréis la vera efigie del hombre que hacia el poniente, luego hacia el nacienzón de un fracaso por cada tentativa: Aferrado al suelo estaba Dario, como vestirle un sayal de Cartujo, desde lueneas de punto, el laberinto de las dismás poder tuvo en América.
te, se achicaba, se agrandaba, volvía a Rozas, En vísperas. Un pais sin ciuda un árbol, y a medida que la fronda se go que el único fin lógico seria la nruergresiones, el fluctuar incesante, el nerLeed y releed diez veces esas lineas danos te de mi extraño Itaspe, si yo tuviera elevaba al cielo, la raigambre se hundia achicarse y agrandarse, se levantaba, vioso hesitar de un tema a otro. No es descendia, volvía a levantarse y a des y admitiréis sin titubear que si podrán Afortunadamente para su gloria, tres más profundamente en la tierra. El mie el valor de verlo morir. Cómo lo voy el abandono humoristico ni la sinuocender; a veces tenia una forma, a ve ganarle en la firmeza de los rasgos o pilares la sostienen: Una excursión a do que le tuvo a la tumba desde sus a matar, si su gran am amor por la vida sidad elegante, ni ese ondular del penen el vigor del modelado, nadie, abces otra, ya era una masa esférica, ya los indios Ranqueles, Causeries del jue primeros años, convirtióse en horripi. está en oposición a su inmenso miedo samiento que como un hilo de agua solutamente nadie, lo aventaja en exacuna espiral, ora se condensaba, ora se ves. Retratos y Recuerdos. Puede con lante pavor en los últimos meses de la a la muerte! Esa obsesión de lo descodesaparece de súbito, corre cierto tre esparcia, se dilataba, se difundía, ora titud fotográfica. No se le escapa ni ellos desafiar al tiempo y a medida que vida, y a ese espanto le debemos el que nocido debiera conducirlo al suicidio. cho oculto, para sorprendernos más volvía a condensarse haciéndose más un solo detalle, ni un solo matiz. los años pasen, el Mansilla político, nos dejara inconcluso El Oro de MaSería una solución, pero no he de ser tarde con el irizar de su chorro crisfuerza de acumular pequeños trazos, llorca discutible y no exento de reproches, se visible, manteniendo el equilibrio sobre yo quien le ponga un arma en la matalino. Es el errar a la ventura, la marla columna de aire hasta una inmensa sus figuras se individualizan hasta lo irá esfumando para siempre frente al No sé cómo terminar mi novela no. He ahí el por qué El oro de Macha al acaso, la excursión en que uno inconfundible. Muchas minucias sabe otro Mansilla: ameno en la narración, me decía en Barcelona. He pensado en altura, ya reflejaba unos colores, ya llorca no se concluyó.
ignora dónde irá a parar. Generalida mos así: que Alberdi carecía de valor insuperable en el retrato, maestro en curar a Benjamin Itaspes de todas sus Benjamin es el mismo Rubén: un otros, ya parecía el polvo de cien jides, confidencias, anécdotas, recuerdos personal: que Carril fumaba cigarrillos el arte de causer. Así le vieron pasar psicopatias (qué milagro no hacen la músico célebre en lugar de un gran netes, ya el de potros alzados, unas de lecturas y de viajes, llevadlos al veces polvo levantado por las ráfagas negros; que Seguí se comía las uñas.
higiene y el aire del mar) y en darle los salones de su tiempo y así entrará poeta. La novela es un completo docupapel tal cual nacieron y tendréis una Más de un curioso hallará en una pa también a la historia literaria.
la paz de un nuevo hogar bendecido del viento errante, otras el polvo de un (continia en la pág. idea de la prosa de Mansilla.
Esto no es el ideal de la nueva generación, según afirma el autor de este libro franco y bravío. Malas horas lo temo, puede encontrar esa juven.
tud en su viaje tempestuoso. Ay! El egoismo trascendental no dará más de sí que el egoismo a secas.
Vedado, 1924.
puede en nom.
temperamento y nadie pretende que los reflexivos merezcan menos admiración que los combatientes.
La apología de circunstancias la harán, por millares, los periodistas y los alemanes, obligados a ser kantianos hoy, por razones de efemérides o de patriotismo, con tanta convicción como serán otra cosa en un próximo centenario de Hegel, de Schopenhauer o de Nietzche.
para los Kant media rriendo otro tanto con el escepticismo.
Kant se propuso entonces probar, haciendo una esgrima lógica sin prece.
dentes, que no era forzoso tomar partido por cualquiera de esos tres puntos de vista, pues ninguno podia ofrecer la certidumbre de estar en lo cierto, según la crítica Sus sentimientos profundamente morales, conservados del pietismo, le de fendían de caer en el empirismo, que era considerado inútil para cimentar la moral y la religión que conviene a la humanidad. Hacia dónde mover sus pasos? Nunca se repetirá demasiado que fueron preocupaciones de orden moral las que determinaron el pensamiento de Kant en la edad madura, a punto de ahogar su lógica de escéptico en su ética de dogmático. Des.
negar en nombre de los derechos de la razón toda posibilidad de una metafísica fundada en la razón misma, Kant acometió la honesta ende rehabilitar en en nombre de los derechos de la fe todos los dogmas metafísicos necesarios para la moral y la religión. Con ello Kant creyó realizar el milagro de la prudencia ecléc.
tica, salvando los reductos del dogmatismo social. Si con la Crítica de la Razón Pura habia dado un golpe en iel clavo, con la Crítica de la Razón Práctica dió otro en la herradura.
rude cuerpo Pragmatista, el criticismo de Kant no es una pues conciliaba el pués de no con motivo de esa prepresa de creer, pues el profesar ciertas pero escéptica reconstruir la metafisica sobre los sillares del propio criticismo, que era un método y una disciplina más bien que un sistema?
La obra de Kant, coronada por la Critica de la Razón Práctica, se caracteriza por su actitud análoga a la de los pragmatistas frente al valor de las doctrinas, las ideas y las creencias.
y En atención a su utilidad, para la disciplina social, Kant declara necesarios, según la razón práctica, ciertos dogmas metafísicos sin los cuales no podrían existir la moral y la religión. Después de haber sido rigurosamente crítico frente a los filósofos, Kant se resolvió a ser heroicamente dogmático ante los creyentes. La salvación de la moral no merecía el embotellamiento de la lógica?
En lo alto de las facultades humanas encuentra Kant la voluntad y la razón; mientras ésta nos arroja a la duda, aquella nos inclina hacia la fe, obrando como tutor natural de nuestras creencias morales y religiosas. Todo lo que no se puede demostrar por la razón, debe aceptarse por la la voluntad el hombre tiene el deber de ciertas creencias necesarias; los tres mitos clásicos no los presenta como dogmas teóricos, sino coindispensables mo postulados la para posibilidad de una conducta moral.
Kant opone sin escrúpulos la fe a la razón, cuando habla de esa especie de guia subjetiva que orienta nuestras creencias hacia principios de utilidad en el terreno práctico: la convicción no es una certidumbre lógica, sino una certidumbre moral. La crítica explica que la razón pueda presentarse bajo ese aspecto práctico? Es inverosímil.
Kant no lo pretende siquiera, pero parte de ello como de un supuesto necesario: existe una ley moral que emana de la razón impone Prescindiendo del ateismo latente de trás del panteísmo moral de Kant, yo Dios es la voluntad que tiende ha cia el y cuya religión abstracta es un puro culto de la moralidad, consi deramos que nunca un escritor filosófico ha tomado una posición más neta contra toda filosofia que Kant en la Critica de la Razón Práctica. Un libro entero podría escribirse para demos trarlo y dar así un maestro ilustre a ese pragmatismo norteamericano que ha venido a predicar la necesidad de creer en lo que nos conviene.
Harto sabemos que el criterio reinante en los medios filosóficos profesionales difiere del expuesto y que estas opiniones podrían merecer el usual dicterio de ignorancia o incomprensión. Kant es ya un ser mitológico en las Escuelas y opinar sobre los dioses ha sido equiparado a blasfemar.
merece ese culto. Con su dog.
matismo práctico sirvió al filosofismo universitario, que no es almácigo de genios creadores sino huerta de nias didácticas: le entregó el más sabio instrumento inventado por la hipocresia de los filósofos para restaurar en el terreno de la moral todo lo que se destrona en el de la lógica, señalando el camino que sin dejar de conducir a Dios, permite conversar en el trayecto con el Diablo.
Estas reflexiones muestran cuán áspera es es la tarea de escribir sobre Kant de su centenario, para quien no es kantiano y tiene algún sentido de la dignidad intelectual. Sería más cómodo repetir ciertas tonterías honro sas para la memoria de los hombres célebres y que ya han sido estereotipadas por su posteridad; la historia no debe ser una fábula para niños, una mitología colegas o o una no vela para compatriotas. Hemos ha Blado de Kant como de un hombre y no como de un dios: hemos considerado su obra como el raciocinio de una mente humana y no como la revelación de un ser sobrenatural.
Su arte escolástico, causa de su glo.
ria ya secular, lo fué también de cier.
tos excesos de técnica profesional que masiadas cuadriculaciones, excesivas restaron vuelo a su pensamiento de logomaquias. múltiples paralogismos, cuyo análisis exigiría un libro menos atropellado que la famosa Metacrítica con que le catapultó su discipulo Herder en 1799. Cuán distinto es Kant de Lessing o de Goethe, genios humanos y universales. cuán exigua su influencia sobre sus propios contemporáneos, como removedor de ideas promotor de acción, ante la de filósofos de obra menos profesional, Fichte Hegel, Schopenhauer o Nietzche!
No haya equívoco en esas palabras: su genio de profesor fué tan extraordi.
nario como el de Sócrates que bebió la cicuta o como el de Bruno que murió en la hoguera; pero fué, exclusivamente, un genio de profesor madurado en medio siglo de paciencia. Cada hombre de genio lo es de acuerdo con su para Para el En stima: Kane fué un genio escolástico que conservo pietismo inicial a través de una larga carrera universitaria de profesor racionalista, rematándola con la compilación de de un tasto tratado Ecléctico 2013 compuesto de tres partes llamadas Críticas.
doctrina filosófica, sino una magna aplicación integral del método enunciado por Hume para estudiar los problemas del conocimiento. Sin adherir escepticismo, Kant desenvolvió fren te a los empíricos y racionalistas la posición ecléctica y conciliatoria de Leibnitz, atribuyendo a los sentidos la materia y a la inteligencia la forma de todo conocimiento.
Opuso Kant un rigido dogmatismo moral al escepticismo lógico, defendiendo en nombre de la conveniencia práctica la necesidad de ciertas hipótesis metafísicas que él mismo había considerado ilegitimas ante la ro razón.
no fué idealista en el único sentido filosófico de esta palabra, aplicable antes a Berkeley y después a Schey Hegel; su idealismo moral es el compatible con todos los sistemas metafísicos.
Kant ha sido en teoria el más severo adversario de toda nueva metafísica losofia que significase un progreso de la fi y en la práctica resultó el más obsecuente aliado de la dicional. Siendo absolutamente ateo.
metafisica tra se preocupó de disimularlo explicando en términos religiosos su riguroso panteismo moral, para no herir de frente las creencias reinantes en común a casi todos los filósofos.
medio; incurrió asi en la hipocresia Aunque el eclecticismo pragmatista de Kant carece de valor filosofico actual, su obra constituye uno de los más grandes monumentos legados por la razón humana a la admiración de los historiadores de la filosofía.
pura Kant lling las espíritu humano Kant, a nuestro juicio, podría ser estudiado como un precursor del prag.
matismo filosófico, insuperado por los que así se llaman en nuestros días.
Con ésto decimos, también, que Kant es el más formidable adversario de la filosofía que ha existido en la humanidad; lo decimos sin ignorar la repulsión que tal aserto puede causar entre los profesionales. Demostrando de toda metafísica la imposibilidad fundada en la razón humana, Kant ha decretado la extinción de toda filo sofía propiamente dicha, dado que fue ra de la metafísica solo tiene derecho a existir la ciencia en en el mundo de lo fenomenal la fe en en el mundo de lo no conoscible menal porque Keno llamamos nudió diversos sendidos al mismo término. Si ese fué su intento, como creemos, todo propósito de investigar los problemas metafísicos importaría en lo sucesivo desacatar la sentencia de Kant que los de claró implanteables e insolubles, frutas prohibidas. Hicieron otra cosa Fichte, Schelling y Hegel al intentar al hombre el el deber.
cubien y Kans SU