ANO IV Buenos Aires, o de Julio de 1925 Núm 39 NUESTRA TRIBUNA QUINCENARIO FEMENINO DE IDEAS, ARTE, CRITICA LITERATURA Redacción y Administración: Correo Suc. 26. Bs. As.
SUSCRIPCION: SEMESTRE 20 AÑO 40 Valores y Giros a JUANA ROUCO EL POR QUE DE UN CONGRESO ANARQUISTA FEMENINO cano.
Ced Estoy convencidísima que los congresos no elaborarán el proceso revolucionario. Pero estoy convencida también que ellos son útiles, periódicamente, para cambiar ideas y mancomunar esfuerzos comunes contra la reacción del capitalismo mundial cada día más sanguinario. De la misma manera que los organismos sindicales realizan sus asambleas ordinarias y extraordinarias para discutir sobre las posibles conquistas de mejoras morales y materiales, así también en el orden nacional e internacional son necesarios los congresos cuando se trata de orientar una acción determinada o cambiar ideas sobre problemas de emergencia que afectan directamente a las masas proletarias. qué acción debe orientar el mundo femenino en estos momentos de desequilibrio general, lo mismo en la clase obrera que en la clase capitalista? No es necesaria la respuesta para quienes siguen de cerca la labor reaccionaria y guerrista de los gobiernos de la vieja Europa y sobre todo los del continente americano. Reputo innecesarias las actitudes alarmistas, como considero también una falta de inquietud y una anestesia revolucionaria a toda prueba la actitud que está observando el proletariado americano frente a los acontecimientos de orden militarista que diariamente se están sucediendo.
Sin hacer largas disquicisiones, para demostrar el peligro de una inminente y próxima guerra americana, no hay más que señalar el interesado laudo avbitral que termina de dar a la publicidad el gobierno de los EE. UU. relacionado con el sonado asunto de Tacna y Arica pendiente entre los gobiernos de Chile y el Perú.
Si otros acontecimientos ulteriores no empañan el horizonte de la paz americana, el famoso plebiscito de Tacna y Arica será la chispa de una guerra inevitable. Tacna y Arica! He ahí la chispa de la guerra que se viene, de la guerra criminal e infamante que están inflando los perros sibaritas de la diplomacia secreta de los gobiernos americanos. Colombia, Bolivia y el Ecuador, también tienen asuntos pendientes con el Perú por demarcaciones de fronteras. Si el Perú sale vencido en el plebiscito que así será, no hay duda querrá usurpar a las tres últimas republiquetas el valor de las dos fecundas provincias que Chile le arrebata con la ayuda interesada del Tío Sam. este es otro peligro de guerra que se une a Tacna y Arica. Otro peligro no menos evidente, quizás el más positivo, es el afán sin límites que tienen los gobiernos de América de pertrecharse de material bélico de guerra y modernizar los buques de guerra, de acuerdo a los adelantos científicos realizados en esta materia.
Necesario es, pues, prevenirse a posteriores acontecimientos que los primeros en lamentar serían quienes hoy permanecen inactivos teniendo el sagrado deber de agitar al pueblo indicándole el peligro.
Como prevención de emergencia y para orientar una acción antimilitarista en todas las repúblicas de América, creo que sería eficaz la realización de un congreso femenino de carácter antimilitarista, pudiendo participar activamente, no obstante, todas las agrupaciones y organismos revolucionarios del continente ameriEs necesario conquistar el sentimiento y la energía de la mujer proletaria para la usa antimilitarista, y a esta labor inmediata y necesaria deben prestar su valiosa contribución todas las mujeres medianamente ilustradas del continente americano. Tenemos, además, que combatir persistentemente esa tendencia propagada en distintos congresos realizados por las damas de la burguesía americana, que quiere hacer de la mujer obrera un estro. pajo de comité.
La pronta organización de un Congreso Antimilitarista Panamericano se hace imprescindible si es que se desea hacer algo práctico por la paz de los pueblos, amenazada por el parasitismo burgués.
Lo que no debe repetirse en momentos de una posible guerra, son esas declaraciones altisonantes de terrorismo para después quedarse pasivos defendiendo el honor ultrajado de la patria. Esto debe servir al pueblo de experiencia aleccionadora. Que no suceda como en la última hecatombe europea que se realizaron infinidad de congresos antiguerreros donde se proclamaba la huelga general y revolucionaria contra la guerra para después quedar todo en agua de borrajas.
Nada de ampulosidades y de declaraciones ficticias. Orientar y mancomunar esfuerzos contra el peligro militarista. Allí debe residir la importancia del Congreso Antimilitarista Panamericano.
Bajo esta égida debe agitarse al pueblo todo de América para que sepa, sobre una misma declaración de guerra gubernativa, encender la tea de la última guerra reivindicativa. La guerra del derecho, la guerra de la paz, la guerra del amor!
Como NUESTRA TRIBUNA no aparecerá más, queda librada la iniciativa de este Congreso a las publicaciones que creen útil y necesaria su realización.
Vaya, pues, mi cordial y anarquista saludo a todos los que hagan efectiva esta iniciativa y a los que han contribuído también a la difusión y sostenimiento de esta hojita que hoy desaparece del escenario de la propaganda.
Juana Rouco.
Por la libertad, combatid la autoridad olvidar que nos esperan muchas cosas sublimes, entre ellas el Arte y la Ciencia.
Concepción Ordás. Dominico.
María Alvarez Por aquí, en estos suburbios de Dominico, donde los capitalistas tratan de matar muchas vidas jóvenes, éstos se levantan, al mismo tiempo, pletóricos de rebeldías para luchar contra todas las leyes que quieren tener bajo su poder al pueblo que todo lo produce, y que en pago de ello la miseria, làs privaciones y el frío se enseñorea sobre él. Pero por más que nos llamen utopistas; por más que nos llamen gente loca, Iremos de reafirmar en todos los momentos y en todas partes esta concepción amplia y clara: la libertad para todos sin parlamentos de ninguna especie.
La mayoría de la humanidad hasta ayer permanecía en un estado de incomprensión de los más sencillos problemas sociales, sumido en el dolor y la miseria. Hoy vemos, en cambio, que a pesar de todas las cárceles, el destierro, las condenas monstruosas, y hasta la misma muerte, se levanta la juventud de ambos sexos dispuesta a luchar por el amor y el bien de la humanidad, sin temer a las cnnsecuecias que pudieren venir. La juventud que lucha verá quizás mañana la irradiación fulgurante de la aurora roja, símbolo de libertad para todos sin distinción de clases ni de razas.
La autoridad está llamada a desaparecer. Es el fundamento principal de la barbarie, la ignominia y el crimen.
Observemos diariamente a la gente que trabaja en esas fábricas insanas y veremos caras tétricas, pálidas y melancólicas. Por qué sucede ésto? Senci.
llamente: por haber autoridad y nosotros nos subordinamos a ella. Ella, la rutoridad, es la encarnación de la muerte prematura. Sin ella viviríamos en cordialidad, en armonía.
Miremos por cualquier parte; tendamos nuestra vista alrededor, y lo único que vemos es. dictadura, felonía, fraude, insidia.
Ya es tiempo que perdamos toda confianza en el gobierno, en la iglesia, en el partido, porque vemos lo que surge de todas estas instituciones. Por eso, llenos de fe y entusiasmo, debemos todos los explotados del mundo combatir el sistema constituído para conquistar la libertad.
No olvidemos que la autoridad, que es el gobierno, de cualquier forma que se manifieste, es cínica y deplorable.
No ignoremos, tampoco, que todas las consecuencias que contemporáneamente soportamos, a fuerza de quebrantos y privaciones, dimanan de la autoridad. para socavar todas estas injusticias, todas estas lamentaciones de la humani.
dad, es necesario sumarse en las filas anarquistas y combatir, con todas nuestras energías, el principio de autoridad, ya sea ejercida por marxistas, republicanos o por cualquier otra clase de generadores del poder.
Nada hay más superior en materia sociológica que el ideal anarquista, tan calumniado a través de la historia.
Hoy el ideal anarquista está más nítido que nunca. Lo que se necesita es tener comprensión del mismo, para esto hace falta poseer mucho espíritu de aná.
lisis, profundizar las cosas.
Estudiar mucho; obrar con conciencia en todas nuestras manifestaciones, esto es poseer conciencia anarquista.
Quien obra contrariamente a las ideas deja de ser anarquista. Desde luego, no hay que dejar de comprender que esto es deplorable. Lo que hace falta es despojarse de todo vicio autoritario. Miremos siempre hacia adelante, pues, que es luchar por la idea.
Dentro la nueva vida de libertad, no Revisando el canje, leo en El Hombre. de Montevideo, la muerte prematura de esta joven compañera anarquista, que ha sido hondamente sentida por el proletariado anarquista uruguayo al cual ella dedicara los mejores momentos de su vida para elevar su acervo cultural.
No tuve el grato placer de conccer a la estimada compañera desaparecida para poseer así el perdurable momento de alegría de habernos estrechado en un efusivo abrazo idealista, deseo tan sentido, que se justifica por el escaso número de compañeras anarquistas que militamos en la propaganda. Sólo recuerdo que solicité por medio de una esquela su colaboración para Nuestra Tribuna que nunca recibi. Supe que til.
timamente le era imposible escribir por su estado delicado de salud. esto me basto.