Communism

ANO NECOCHEA, Febrero 15 de de 1823 Núm. 13 No hay emancipación de la mujer. La emancipación que nosotras mujeres librs, propiciamos, es social, natamente social, NUESTRA TRIBUNA La inferioridad metal de la mujer es una men fra to lógica, repetida y propaga da por todas las correga ciones religiosas dicas Redacción y Administración: JUANA ROUCO QUINCENARIO FEMENINO DE IDEASCARTE, CRITICA IY LITERATURA SUSCRIPCIÓN Semestro 20 Número suelto 10 La cosecha LA FAMILIA ALLEMA Ced Qué grandioso panorama ofreEDITORIAL ce en esta época la campiña.
Grandes extensiones de tierra sembradas de trigo, lo que visto de lejos, semeja una exhuberante cabellera rubia a merced del viento, y al moverse las espigas mecidas por la fresca brisa, forman ondulaciones suaves y caprichosas.
La familia, se nos antoja decir, actualmente, no es más que una fuente de interés, donde prima el cálculo ¡Qué espigas más hermosas!
de los herederos y nunca el amor leal, puro y desinteresado. Qué granos tan crecidos!
La cosecha será esplendida.
Más que una fuente de intereses perjudiciales para la humanidad, la familia, en esta sociedad capitalista, es ¡No hay miedo, pues, al hamla engendradora del egoismo humano, dada la concepción equívoca que de ella se han formado una considerable bre!
cantidad de trabajadores, influenciados por una educación eminentemente burguesa y religiosa.
Esta es la exclamación que a En este mundo capitalista no existe la familia. La familia es una concepción abstrata, egoista, y por erflor de labios brota, cuando esde, una mentira religiosa y una impostura política. La verdadera concepción de la familia humana ha sido ba státicas contemplamos la vasta tardeada por una moral corrupta y religiosa, de tartufismo y mercantilism. a eso, a una fuente de intereses superfície cubierta de hermosas odiosos, de egoismos irreductibles, de parentescos de buena partida, a esa ligadura amalgamada por cálculos matey doradas espigas.
El laborioso labriego puede máticos y por una refinada hipocresía, a esa incubadora que lanza a rodar por ei mundo una cadena familiar de seres entrelazados por el parentesco, a ese engendro, apologistas de la familia buryuesa capitalista, estrecha, egois.
estar satisfecho; la naturaleza ha ta, illamáis la santa y buena familia? Para nosotras no existe esa familia bastardeada, estrecha, ficticia, egista.
sabido premiar con creces sus Nuestra frmilia es más grande que esa pequeñita mo e de herederos: es la inmensa humanidad universal que se desvelos y sufrimientos debate en una cruenta lucha sin cuartel para desa sirse de todos los mitos que la maniatan a una familia de ex Los hijos del trabajo no deben plotación y de egoismos sin límites.
temer al crudo invierno, pu habrá pan abundante para todo el año.
Tú eres una obrera, una hermanita, una futura neredeni, quizás, de los bienes de tus progenitores; pertene Pero. para quién será ese ces a una familia: levanta tu vista gacha. vés? ese Doctor es hijo d: esos dos ancianos agobiados por la vejez trigo?
su hijo el Doctor, pillo en materia de despojo y de posesión ilegal, anticip la testamentería de los bienes de sus ¿Para quién el blanco pan que progenitores, su herencia. Ahora sus padres son una carga, un fastidio, un desprecio, para él, para el Doctor, que con su harina se hará?
se dá a una vida de orgía y de restín. Vistes, mi buena hermanita. Esa es una virtud, un inolvidable cuadro. Para aquél que lo sembró para tí, de la familia burguesa.
gó con su sudor?
Ahora anda, anda por el tortuoso sendero de la vida, con esta realidad a cuesta.
No, no será ciertamente para quellos que en las mañanas del ludo invierno, insensibles al Tú, famélica, pálida y triste costurerita, futura heredera de la tísis; perteneces a una familia: levanta tus frio y la escarcha, habrian las entrañas de la madre tierra paojos tristes y viscosos. vés? ese enjambre de hermanos y hermanas todos herederos. están en interminable litígio para hacer la testamentería de su herencia. La herencia es ese caserón viejo, que quizás mañana lo arrase un vendaval.
ra depositar en su seno el grano que mas tarde se convertiría Ún ave negra. en autos y otras historias, se comerá la herencia. ellos reñirán como perros.
en esplendida mata de trigo; no He aquí otro caso de la familia. Ese es el espejo de su desenvolvimiento fatal en esta sociedad sibarita será tampoco para los que enAhora, abre tus ojos tristes y desparrama estos renglones de lección entre las hermanitas de tu clase. Anda!
gavillaron y trillaron las doradas y espigas convertiendolas en hermosos granos repletos de blanca Tú, muchachita, que aspiras a una vida de figuración, a un delirio de grandezas; perteneces a una harina.
familia abre tus ojos vivaces a la realidad de la vida. Įves? ese cadáver ha sido violado. Quién era? Tu anciano vec iSerá para los zánganos de la no que falleció anoche.
colmena social, para aquellos que nada hicieron ni nada suSu hijo. que tu conoces le arrancó en el cajón cuatro dientes y dos muelas de oro.
frieron, los que, mientras He aquí las virtudes de la familia!
los obreros arabán y sembraban la Ahora, con tus ojos vivaces, comenta, en círculo de amigas, la virtud de ese heredero familiar. Abre tus tierra, ellos dormian en confor ojos y anda, que la vida está abierta ante tí como un abanico!
tables habitaciones; y mientras los hijos del trabajo, escardaban y cuidaban los sembrados al Tú, novia y hermana, mujer y madre, que muchas a toda prisa, sin que nada despierte tu curiosidad y llame igual que una madre cariñosa tu atenció: detente y mira: vés? ese hijo reclama su herencia con anticipación, esa hija también. Trabajaron cultiva la inteligencia de sus pe. ambos? Nunca. Entonces. Vés. esa es la familia de la que hacen su apología los invertidos de educación y de queñuelos estirpando de raiz los pensamiento. Esta es la familia.
prejuicios y malas inclinaciones Ahora, vete con los tuyos y háblale de la virtuosa y santa familia.
que son al hombre lo que los yuyos y las malas yerbas a los sembrados, ellos, los satisfechos, se reunen para tratar el mejor. Y? Venid todas, toditas: la familia es un cúmulo de mentiras propaladas por todos los sostenedores del modo de quedarse con toda la privilegio y del error. Nada más bello, nada más grande, puro, poético, amoroso, que nuestra gran familia humana cosecha, ya sea exigiendo máuniversal, basada en la solidaridad recíproca y en el apoyo mútuo.
yor alquiler o bajando el precio ¿Conocéis vosotras una familia más ideal y poética que ésta?
de los cereales en la época en ¿Poseéis una aspiración más sublime?
que el agricultor, apremiado por la familia de cálculos matemáticos y de virtuosos herederos anticipados, oponemos nuestra familia univerla necesidad, tiene que vender Sal y comunista, consolidada en el amor de todos nuestros congéneres.
los; y luego, cuando estan todos. Eso es destruir la familia.
acaparados entre unos cuantos tiburones, el precio de los cereaNo. Eso es tender a crearla, puesto que actualmente no existe. La familia actual es inexorable como la ley, les sube, lo que tiene por resulestrecha como una manga. Nuestra familia no se reduce a una determinada cantidad de miembros; ella es comtado que, aquellos que tanto puesta por todos los partidarios del amor a la especie humana. la inversa de la familia actual, nuestra familia no sufrieron en la siembra, como se compondrá de padres, madres, hermanos, hermanas, primos, primas y demás parentesco que riſien diariamente por en la recoleción. tendrán futilezas de orden privado o por insignificantes cosas familiares. vosotros, a vosotras, a todos los que os alarmáis que pagar el pan caro y no del me cuando nos ois exclamar que no tenemos familia, os decimos que detestamos vuestra familia actual, basada en la jor, ese es para los burgueses intriga, la falsedad, el interés, el adulterio: Jvuestra familia es el infierno terrenall El amor, el desinterés, la armoque tienen el estómago delicado. nía, la lealtad, son la base de nuestra familia. Para instaurar esta familia humana y destruir la familia capitalista, ha pesar do ser la coluchamos nosotras con tesón y con ahinco.
DRE año, el Rompámos, pués, los sentimientos libres de prejuicios, el círculo de hierro de la familia, que como una dopróximo invierno, como tantos sa, aprisiona nuestros anhelos libertarios!
otros, en los hogares proletarios, habrá miseria, hambre y dolor.
Los mismos rostros pálidos y demacrados, por el sufrimiento y la mala alimentación. El producto de la cosecha no alcanzará para comprar a los pequeñue.
los ropas y calzado para resguardarse de las lluvias y el frio; y como en años anteriores, andarán rotos y descalzos.
Esperanzas y anhelos, todo quedará reducido a la nada bajo la acción de la cruel y brutal realidad.
El producto de todo un año de trabajo irá a colmar las arcas ya repletas de los amos terratenientes, comerciantes y demas sanguijuelas de la especie humana. ellos si beneficiará el fecundo trabajo del labriego; en sus mesas habri apetitosos y suculentos nunjures y el tierno y blanco pan.
Para los obreros de. piedra. bien. Hermanitos, labriegos de rostros curtidos y manos callosas. Continuaréis sembrando y cultivando la tierra en los fmos dias del invierno, y haciendo la recolección en el verano para que vuestros amos hagan agradables viajes a Europa y eduquen a sus hijos para que, llegado el monento, se conviertan en opresores de los vuestros? para que mientras vosotros extenuados, por el cansancio y la fatigo que las rudas faenas agrícolas os producen, ellos vayan y vegan a recrearse y solazarse en aristocráticos balnearios. Continuaréis trabajando como bestias de carga, viviendo miserablemente, sin más aspiraciones que el puchero de cada dia para que otros vivan esplendidamente y coman opiparamente. Oh! no, no! Si tal hacéis habia para dudar de vuestra hombria y amor a vuestras compañeras hijos. Por qué habréis de entregar el producto de vuestro trabajo a quién nada hizo ni para nada intervino en las faenas agrícolas. Qué la tierra es de ellos?
No, la tierra es del que la fecunda con su trabajo y la riega con su sudor.
No es, no puede ser de quien nunca arrancó un yuyo ni abrió un surco; mejor dicho, la tierra es de todos, puesto que la misma es tan necesaria a la vida del hombre como el aire, como la luz solar.
Pero lo que no es ni puede ser para el amo, es lo que la tierra produce; eso debe pertenecer al que lo siembra y lo recoje.
Negaos, pues, a mantener parásitos.
Arrancad la venda que cubre vuestros ojos y veréis que no es justo ni humano lo que actualmente sucede; y que si el mal persiste es por vuestra pasividad, ignorancia y cobardia.
Fidela Cuñado Asi que Necochea.
secha abundante, este añ 105 LEA Nuestra Tribuna