Communism

IZQUIERDA 22 IZQUIERDA 23 Gabriela Mistral escribe al autor de Como educa el estado a tu hijo cuando a otro de especial mención de de ha obreros pueblo y olvidan ros que tienen Publicamos esta carta de Gabriela Mistral, fechada en Francia (Fontainebleau. donde actualmente se encuentra, y dirigida a nuestro compañero de tareas Julio Barcos con motivo de la aparición de su último libro. Recomendamos su lectura especialmente a todas aquellas maestras que se avergüenzan de venir del toda solidaridad con su carne y viven en la indiferencia más absoluta con respecto a los problemas cuela.
También en tanta relación con la es.
se la recomendamos a todos aquellos eseri nacionalismo destilando una literatura xenófoba tores que empiezan entre nosotros a chupar el veneno del eserven de la infección que está corroyendo a Italia. que se Francia y a Alemania. Y, por último, al informado y atento ministro de instrueción pública, a fin de que la Argentina, con esa intrepidez tan suya. tenga, en efecto. la honra de probar y de ensayar los tipos nuevos, lo mismo de gobiernos que de escuelas.
bio nombre para fatal noticia: Murió heroicamente. una citación admirable.
Acto primero. Año 1924. No se es en wano padre de un héroe. Progreso en el empien y consideraciones. La viuda del soldado sa ha casado con un rico de la guerra y de en cuando visita sus primeros suegros para confundirlos con su lujo. Ha empezado el culto del muerto. El retrato ha sido trocado por de mayor tamaño. El. padre lee lee a su viejo amigo un trozo de un libro distribuido en las escuelas, donde se hace de la forma heroica que cayó el el hijo. El mismo sujeto influyenta y enriquecido con la guerra acompafiado de un comandante, vuelve a ver al padre. Hay que salvar a Francia del comunismo y le propone al iſtica. Dinufado!
del héroe la jefatura po.
Acto segundo. El retrato del héroe mucho más grande. En plena politica. Se ha repar.
tido con profusión un volante donde se reprocha al padre la carrera política alcanzada explotando la memoria de un mártir y que era enemigo de la guerra. Hay que contestar y no se duda en mutilar una carta del héroe y cambiarle totalmente de sig.
nificado, La única que protesta y comprenprima: Padrino, os tinueis esta horrible cosa. Sabéis como él ha sufrido El no aprobaría lo que estáis haciendo. Al final del acto, un desconocido interrumpe al padre su discus Muerto!
re entre sus Perros de armas reposa para la eternidad.
es. Entre! EL desconocido: Soy yo.
El padre: Quién? El desconocido: Soy yo.
tu hijo. El padre: Mi hijo! El desconocido: Si, yo, padre. El padre: Tú, después de diez años!
Acto tercero. El hijo pregunta por su esposa. Se retarda la explicación. La politica va bien, el triunfo asegurado para el partido de los caídos en la guerra. Pero la llegada del hijo lo echa todo a perder. Sin embargo, no es gente de arredrarse. Para el hijo las a cosas se van explicando. Exige que su prima le diga la verdad y sabe por ella que su mujer se ha vuelto a casar. Se encuentran y todo se justifica. El egoismo mata todos los sentimientos. Ya no tiene más mujer. Mientras le ocultarán a todos para no interrumpir el triunfo politico.
Acto cuarto. Escritorio del padre del héroe en Paris. El padre en trance de ser nombrado ministro. El hijo le reclama a su padre la revelación de su vuelta. Quiere su nombre. Pero ni aún esto obtendrá. El padre le hace ver los inconvenientes. Des. pués de su aureola, el ridículo. Debe amar su muerte gloriosa. Los enemigos políticos aprovecharían su su vuelta para escarnecer a todos ellos.
Nadie creería que lejos de ber muerto hubiera estado herido, prisio.
nero y casi loco, diez años en un hospital y de Alemania. Es una posición falsa. En cam otro facilitaria la solución. Son inútiles sus sus protestas. El El padre del héroe es nombrado ministro. Los compinches políticos están reunidos. Con el nombramiento viene un obsequio de los electores: un enorme cuadro con el retrato del héroe. Abajo los sombreros ante el héroe. Di único que.
se descuida es el hijo, quien pide disculpa. Excusadme, la emoción. Saluda at retrato inclimándose. Lo he conocido tanto!
Esta pieza que hemos intentado sintetizar y que hubiera fivmado Mirbeau, se titula Le Marchand de Gloire y son sus autores Marcelo Pagnol y Pablo Nivoix. Fué representada en Paris con gran éxito hace algo más de dos años, trasponiendo luego las fronteras. Es la tragicomedia guerra y pinta maravillosamente el aprovechamiento del dolor y la muerte de los caídos. Creemos que Teatro Libre debiera traducirla e incorporarla a su repertorio, seguro de hacerlo con una pieza valiente que constituye la mejor acusación contra los traficantes de la gloria de los caídos en la gran guerra.
Giordano Bruno Tasca.
de es la no, os suplico no con: que repite su con énfasis: Bajo esta ¿Quién de la la post 10 años.
Me ha llegado su libro en momento de mucha pesadumbre. La Asociación de Profesores de Chile, la única agrupación de hombres que yo sentia viva en Chile.
cuyo coraje me haela esperar en una volteadura de la escuela primaria y cuyos pequeños errores yo miraba sin enfado, por agradecimiento de la entraña cargada de bien que les sentía, o se ha acabado o se acabará pronto. Cae por un escándalo que se ha levantado en torno de ellos obrado por el muy vil dicen que dicen. con lo cual en nuestra América se mata por gente que no los ha oido sino que ha la reputación de un hombre o de un grupo. Una Vd. este pena cotidiana que siento observando en Europa duelo casi personal a la éxito creciente de un nacionalismo rabioso que prepara otra guerra para de aquí a 15 10 Teen los niños se hallen infectados de este paganismo Los libros que la soberbia local y el odio hacia el que tiene su casa ahi cerca, al otro lado del smo brutal y estúpido que que es como quien dice. Acaba de proponerse a la Cámara francesa una ley que movilizará viejos, mujeres y niños en tiempo de guerra y que. declara que los intelectuales deberán ajustar su criterio al de la nación léase del Estado, y adoptarlo en su trabajo (artículo de diario, libro, etc. Lea Vd. en la Revista Europa la noble respuesta de Romain Rolland sobre esta movilización de las conciencias. Se mira la mitad de la América nuestra en cacicazgo, en no se qué resurrección de la tribu, y el corazón se OTO ha confortado un poco. Un poco, porque, aunque vd. diga que el fondo optimista a mí me parece más bien desesperado. Los enemigos que Vd.
señala son muy fuertes y hay todavía más enemigos de los que Vd. exhibe. De todos modos conforta ver un valor civil completo que se pone en medio de la plaza a pedir salud, desinfección, lealtad y hora meridiana para la educación popular, sacrificando con ello amistades, paz, sociego y hasta reputación. Porque al voceador da males le va muy mal en este mundo, amigo Barcos.
Ordeno un poco esta carta, en bien suyo y mio.
on se aprieta.
Su me ha LA ARGENTINA Se conoce que vivimos pared por medio en la semejanza de nuestras miserias.
Su formidable crítica conviene a la enseñanza nuestra absolutamente. Acaso sirve lo mismo para el resto de la América. Por ser común el mal, debería hablarse de el sin quemadura de amor propio. Hay verdaderas taras de raza en esta dolencia de la educación sudamericana. El español era, y sigue siendo, magnifico tipo de hombre, pero estaba tarado de estas llagas: el sentido aristocrático de la cultura, la pereza y la vanidad metidas dentro de su aristos, un desdén fabuloso, un desdén insensato hasta la estupidez, del trabajo manual, cierto apego a la letra que apaga el espíritu, a pesar de sus misticos que odiaron la letra; y la consabida falta de