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CLAVE Tribuna Marxista Tribuna Marxista CLAVE las mujeres y a los jóvenes en contra de la guerra; desarrollamos una constante, persistente e infatigable preparación de la revolu.
ción, en las fábricas, en los molinos, en las aldeas, en los cuarteles, en el frente y en la flota.
Ese es inuestro programa. Proletarios del mundo. No hay más camino que la unión bajo la bandera de la Cuarta Internacional!
la grotesca pretensión de oponernos a esa militarización con vacuas protestas pacifistas. Todos los grandes problemas se, decidirán en la próxima época con las armas en la mano. Los trabajadores no deben asustarse de las armas; por el contrario, deben aprender a usarlas. Los revolucionarios no se separan del pueblo durante la guerra más que durante la paz. Un bolchevique lucha por convertirse, no sólo en el mejor sindicalista, sino también en el mejor soldado.
Nosotros no queremos permitir que la burguesía arroje a última hora en el campo de batalla a soldados impreparados o mal preparados. Reclamamos que el estado provea inmediatamente a los trabajadores y a los desocupados con la posibilidad de aprender a manejar un rifle, a arrojar una granada, a manejar la ametralladora, el cañón, el avión, el submarino y los demás instrumentos de gaerra. Se necesitan escuelas militares especiales, estrechamente conectadas con los sindicatos, de modo que los trabajadores puedan convertirse en hábiles especialistas del arte militar, capaces de desempeñar los puestos de mando. Esta no es nuestra guerra. Al mismo tiempo, no olvidemos ni por un momento que esta guerra no es la nuestra. En contradicción con la segunda y la tercera internacionales, la Cuarta Internacional edifica su política, no sobre la suerte militar de los estados capitalistas, sino sobre la transformación de la guerra imperialista en una guerra de los trabajadores contra los capitalistas, sobre el derrocamiento de las clases dominantes de todos los países, sobre la revolución mundial. Las alternativas en las líneas de batalla del frente, la destrucción de las capitales nacionales, la ocupación de territorios, la caída de estados aislados representar desde ese punto de vista, sólo episodios trágicos en el camino de la reconstrucción de la sociedad moderna.
Independientemente del curso de la guerra, nosotros desempeñamos nuestra tarea básica: explicamos a los trabajadores lo irreconciliable que son su intereses con los intereses del capitalismo sediento de sangre; movilizamos a los trabajadores en contra del imperialismo; propagamos la unidad de los trabajadores en todos los países, beligerantes y neutrales; apelamos a la fraternización de trabajadores y soldados en cada país, y de soldados con soldados en los campos opuestos del frente de batalla; movilizamos a Inc 342 343