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Tribuna Marxista CLAVE CLAVE Tribuna Marxista CRONIC OPONGAMONOS LA MATANZA Cuando se trata de principios no podemos hacer concesiones, aun hacia una figura tan importante como Diego Rivera. No podemos adivinar si la inevitable catástrofe enseñará al camarada Rivera el camino de regreso a la Cuarta Internacional o si será absorbido definitivamente por la corriente de intelectuales que están rompiendo con el marxismo en favor de una mezcla de anarquismo, liberalismo, individualismo, etc. No hay necesidad de decir, que esperamos que se realize la primera alternativa. Un compañero muy joven, en su afán en favor del partido de Rivera, nos argumento del siguiente modo: La Cuarta Internacional llamó al Partido Obrero y Campesino Francés de Pivert un partido pequeño burgués, y acaban de entrar en él. Ahora llama igualmente así a nuestro Partido Obrero y Campesino Mexicano y terminará por entrar en él también.
Estamos seguros que este argumento será claramente ridículo a Diego Rivera a primera vista. Para los marxistas revolucionarios entrar en organizaciones oportunistas y centristas para luchar por sus principios dentro ellas es una cosa. Pero que gentes que se llaman a sí mismos marxistas revolucionarios creen un partido oportunista es harina de otro costal. El primer caso es el cumplimiento del deber revolucionario. El segundo caso es traición.
León Cortés, presidente de la demócrata y pequeña Costa Rica, está experimentando las delicias del imperialismo también demócrata de la Casa Blanca, y lo que es peor, está haciéndolas gustar a los trabajadores nicaragüenses ahuyentados hasta Costa Rica por los encantos de la democracia que interpreta Somoza en Managua León Cortés le ha parecido fácil echar a pelear a yanquis con japoneses en su tierra. Junto a los bananales de la United Fruit han comenzado a surgir los algodonales bases aéreas del Mikado. Desgraciadamente para la habilidad de Cortés, muy cerca de San José está Panamá, y Washington bastante más cerca que Tokio, y la respuesta no se ha hecho esperar: mientras Somoza parece haber recibido carta blanca de Roosevelt para provocar a Costa Rica y presionarla hasta convertirla en una agencia poli cíaca nicaragüense, Cortés se ve momentáneamente desamparado y a merced de un enemigo que proporcionalmente es el más temible para él, Somoza. Sus amigos japoneses nada pueden en estos instantes Hasta hace algunos años y aún no muchos meses, Costa Rica era un refugio más o menos seguro en contra de las persecuciones del sádico Somoza; de entonces a hoy, la situación ha cambiado y promete cambiar más, hasta volverse quizás intolerable para los emigrados políticos nicaragüenses de Costa Rica, que suman varios millares. Para congraicarse con Somoza, que lo injuria y amenaza diariamente por medio del radio y de los periódicos domesticados de Managua, Cortés está dispuesto a todo, porque para él Somoza en estos momentos es la Casa Blanca, es el capataz oficial. está tratando de rescatar sus culpas regalando a Somoza con kilos de carne nicaragüense, la preferida de ese catador en el platillo que es don Anastasio Matasiete. El Diario de Costa Rica informa, con fecha 23 de abril último, que Cortés ha enviado a sus esbirros a la legión de Parrita (importantísima zona bananera, poblada en un 75 por nicaragüenses perseguidos: varios miles) para que sea levantado en Carlos CORTEZ Los redactores de Clave invitan cordialmente al compañero Rivera a utilizar la página de nuestra Tribuna Libre para responder a esta carta. Estamos seguros que la discusión se realizará en el más franco ambiente de camaradería y dará como resultado un avance en el esclarecimiento teórico de nuestros lectores.
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