CommunismCommunist PartyMarxismSocialismSocialist Party

CUADERNOS INTERNACIONALES CUADERNOS INTERNACIONALES LA SITUACION POLITICA DE FRANCIA que todavía dormitan intocados en sus lechos milenarios. Pues si bien es cierto que sombríos vaticinios se lanzaron siempre sobre las exiguas reservas petroleras del planeta, el turbio líquido ha seguido manando de las viejas fuentes y día a día se descubren nuevas zonas y de riqueza mineral. En los mismos EE. UU. y en la Texas tan explotada, recientes pozos han comenzado a producir. En Edmonton, Canadá, acaban de descubrirse reservas verdaderamente fabulosas.
Las existencias de Latino América parecen ser enormes, sobre todo a lo largo de la Cordillera de los Andes, en cuya extremidad polar argentinos y chilenos han descubierto el codiciado mineral. En la misma situación se encuentran muchas otras regiones del globo, entre las que hay que incluir las zonas costeras de los mares, cuyo subsuelo apenas si ha sido tocado. Ciertamente, el petróleo no es eterno, pero solamente el Cercano Oriente podría producir para satisfacer las necesidades mundiales durante un periodo de más de 100 años. Además, la ciencia ha descubierto los sustitutos de la nafta y otros derivados del petróleo, de los que ya se benefician Alemania, España, Francia, Inglaterra y muchos otros países.
Sin embargo, los detentadores del privilegio y el poder no tienen en cuenta todas estas realidades y desconocen los puntos de vista racionales, científicos y humanos. Una vez más se pretende manejar los pueblos como simples peones en el eloquecedor tablero de la guerra. Por tungsteno. Por bauxita. Por hierro. Por estaño. Por petróleo. Por los nuevos dioses que los pueblos son arrastrados a defender, los dioses inorgánicos del imperialismo.
Por ANDRE PRUNIER DI Escrito este artículo en el más álgido momento de la tensión anglo persa, orece en líneas generales documentación válida a pesar de las ulteriores derivaciones políticas del conflicto y del viaje del Premier persa para intervenir en el Consejo de Seguridad.
Trazad un hexágono regular o celdilla de abeja sobre una hoja de papel. Divididla en seis triángulos que se unan en la parte superior e inscribir por orden, girando alrededor del centro, as iniciales partido comunista. Io. partido socialista. R. Movimiento Republicano Popular. GR. Reunión de Izquierdas. Independientes y campesinos) y, en fin, Reunión del pueblo francés) y tendréis una imagen bastante exacta de la nueva Cámara francesa, contando cada sector con un número aproximado de cien diputados.
Bien entendido, en el hemiciclo parlamentario los representante continuarán sesionando en semi dírculo, según una geografía convencional que estipula, por ejemplo, que el partido laico y conservador, esté a la izquierda del partido social cristiano. De esta manera, el Presidente reúne a su derecha los 300 y algunos representantes de la Francia católica, ya su izquierda la misma cantidad de representantes de la Francia laica.
En la Cámara de 1946, los marxistas, comunistas y socialistas, llenaban ellos solos la mitad izquierda y el resto lo integraban socialcristianos y algunos pequeños sectores GR. campesinos e indeper.
dientes. En el Parlamento actual, los marxistas forman sólo un tercio de la asamblea, reuniendo partes iguales los dos partidos por haber perdido los comunistas 70 puestos y haber ganado los socialistas unos cuantos.
El secreto de este cambio es doble. Reside en el temor de las soluciones extremas, que se manifiesta principalmente en las provincias. París y sus alrededores, más dinámicos, votaron comunista para cerrar el paso al gauPro. o gaullista, para impedir el avance comunista. El sentido común de los provincianos los encaminó particularmente hacia un retorno a los partidos adicionales de la Tercera República. Además, el voto por seetores afines. practicado por primera vez en Francia, favoreció netamente a los moderados de todas las categorías.
El fenómeno más evidente de la vida política de Francia después de la liberación es este suave deslizarse hacia la derecha de la opinión nacional, más acentuadamente de la representación nacional y de una manera decidida del gobierno nacional. Esta realidad es casi inherente a todas las legislaturas fundadas sobre un deseo de novedad, a medida que se agotan las ilusiones o se sacian los apetitos. medida, también, que los electos se aislan de la presión popular por el juego de las instituciones y de los compromisos. Las ilusiones perdidas vienen a ser, en este caso, las que las masas habían fundado sobre la victoria, la solidez de los acuerdos ruso americanos en Yalta y Teherán, las nacionalizaciones, la reconstrucción, el sufragio femenino, etc. 158. 159