Violence

CUADERNOS INTERNACIONALES CUADERNOS INTERNACIONALES Hemos dicho que Dora es la duda. Eso le permite descubrir algo más que Kaliayev después que éste hubo liquidado su deuda. Pero ahora ya no es una duda. Ahora todo está perfectamente claro: Kaliayev pagó el precio del Gran Duque, pero, el precio de Kaliayev quién lo pagará. Si la única solución es la muerte, no marchamos por el buen camino, El camino verdadero es aquel que conduce a la vida, al sol. No se puede vivir con frío eternamente.
Lo ha comprendido demasiado tarde. Ahora tiene que pagar también ella.
Exige su derecho a la próxima oportunidad Annenkov la comprende y acepta. Es un orgullo que pagamos con nuestra vida. Nadie puede ir más lejos. Es un orgullo al que tenemos derecho.
Pero Dora ha visto claro, Ha previsto ya las consecuencias. El sacrificio de Kaliayev le ha permitido llegar hasta lo más profundo del problema. Estamos seguros de que nadie irá más lejos? veces, cuando escucho a Stepan, siento miedo. Quizás vendrán otros que justificándose en nosotros matarán y no pagarán con su vida.
Annenkov presiente que Dora tiene razón, que posiblemente ellos están pagando de antemano por otros. Debe sentir una honda repugnancia mientras exclama. Eso seria cobardía.
Albert Camus, con Los Justos ha colocado a las actuales generaciones frente a uno de sus más importantes problemas morales. No pretende resolverlo se trataría de una pretensión excesiva. Se limita a exponerlo de forma que cbligue it usar, porque como presumió Dora, quien ganó la partida fué Stepan.
violencia contra la violencia que Los Justos no pueden traspasar sin dejar de serlo. Kaliayev lo conoce y sabe hacerlo sentir a los demás miem.
bros del grupo. Sólo Stepan se resiste. Para él las cicatrices de su cuerpo tienen demasiada importancia para que logre olvidarlas. La violencia que han ejercido en su carne, sin que él lo sepa concretamente, le ha violenado el espíritu, lo ha inutilizado para ser justo. Los demás levantan sus voces sobre él.
Annenkov, el que dirige las operaciones, le interrumpe. No puedo dejarte decir que todo está permitido. Centenares de nues.
tros hermanos han muerto para que se sepa que todo no está permitido. Dora, con su lógica femenina, añade. Incluso en la destrucción hay un onden, existen limites.
Stepan no los acepta. Su odio no se detiene ante nada. Ni siquiera los niños que puedan ser sacrificados en el camino de ese mundo que persigue, significan para él un obstáculo. Pero. conoce verdaderamente lo que persigue. Sabe exactamente dónde conducen sus palabrast. No tengo bastante corazón para comprender esas pequefieces. Cuando nos decidamos a olvidar a los niños, ese día seremos los dueños del mundo y la revolución triunfará No, no lo sabe. Pero Dora ha comprendido el significado de sus afir maciones y replica. Ese día, la revolución será odiada por toda la humanidad.
Stepan argumenta. No le importa el odio de la humanidad con tal de que la revolución triunfe. La revolución terminará con la esclavitud de la humanidad, a pesar de ella si es preciso. Al argumentar así ha puesto de manifiesto su verdadera debilidad. Ha prescindido, se ha olvidado del problema de la violencia. Ellos Los Justos. 110 pueden olvidarlo: no tienen derecho porque en cierto modo también lo encarnan He ahí el problema y he aquí la duda. si toda la humanidad rechaza la revolución? pregunta DoraY si todo el pueblo, para quien tú luchas, se niega a que se de muerte a sus niños. Será también necesario golpear?
Kaliayev. sin embargo, no duda. El ya se ha contestado a esas preguntas porque está decidido a pagar. No cree, como Stepan, que en el empleo de la violencia sea posible pagar su precio de antemano. Sólo se paga una vez y para siempre. He aceptado para derrocar el despotismo. Pero detrás de lo que tú dices, Stepan, veo anunciarse un despotismo que, si llega a establecerse alguna vez, hará de mi un asesino, mientras que yo intento ser un justiciero. más tarde añade. Tú sabes que existe un honor en la revolución. Es aquel por el cual aceptamos morir.
Se dirigen fatalmente hacia el hecho, inconteniblemente. Están todos reunidos alli para luchar contra la violencia Les une un lazo demasiado fuerte. Han avanzado juntos mucho trecho para que ahora puedan separarse sin desmoronarse enteramente. Están todos allí para obrar, para ejecutar. La oportunidad es para Kaliayev. Los Justos esta vez van a tener por mano su mano. La muestra para que vean que no tiembla, que mientras no haya un niño que se le interfiera, no temblará. Porque Kaliayev ha decidido golpear, ha aceptado la necesidad de golpear. Desea hacerlo una sola vez y pagar inmediatmente.
Cuando todo ha terminado ya, concreta su pensamiento. Si he sabido estar a la altura de la protesta humana contra la violencia, que la muerte corone mi obra para la pureza de la idea. Este es el precio.
DI 78. 79