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CUADERNOS INTERNACIONALES LA POBLACION LOS ALIMENTOS EN EL MUNDO por EMILIO MUSE tienen evidentemente plaza en regimenes como el de la Alemania nazi, también tienen su lugar, menos perceptiblemente, en la estructura de toda comunidad en que se acepta la coerción como elemento de las instituciones sociales. La elección es, desde luego, casi del todo fortuita. El criminal es en gran parte formado por sus oportunidades, sus relaciones y el accidente de topar con la ley en los comienzos de su carrera. Si sus desórdenes de conducta conciernen a la propiedad, no es probable que pueda manifestarlos de manera stolerada. Si afectan principalmente a relaciones personales, bien podrá ser capaz de ello.
Una vez hecha la elección inicial, quien halla modo de lograr que su antisociabilidad encaje en la sociedad, puede hacerlo de dos modos. Si es capaz de someterse a disciplina, muchas ocupaciones hay en la sociedad moderna. casi todas inherentes a la rama ejecutiva dei Foder. que le conteriran un limitado permiso para la antle cion de tormento o de arbitraria autoridad, y tales ocupaciones son de un tipo indispensable para el presente orden de vida. el impulso anormal puede ser cebado privadamente hasta llegar al momento en que et individuo. como legislador o dirigente de opinión, puede imprimirlo en el patrón de su cultura. El aparato del Poder es de por si, en gran medida, un mecanismo mediante el cual cabe hacerle.
Bien puede uno insistir en que el más grave probrema de la criminologia moderna es el planteado por delincuente indispensable y consentido. La existencia de una individual y nacional delincuencia de esta indole, y el poder que los psicópatas ejercen sobre las actitudes nacionales, es hoy una amenaza mucho más grave que la criminalidad corriente para la seguridad individual. En algunos casos.
como el del apogeo del bandidaje en Chicago, o en la Alemania nazi, hay un percepudie intercambio entre los dos. En las social democracias, la atención pública se fija en la segunda. pero la mayor amenaza para la supervivencia está en la primera. Así pues, cuando, como ocurre ahora, se apela deliberadamente a la psiquiatria para afrontar la criminalidad individual, se la pone en el trance inevitable de afrontar, cada vez más ampliamente, formas no criminales de delincuencia, de las cuales han venido a depender las sociedades de tipo centralizado, pues se puede mantener que la demanda y el abastecimiento de delincuentes son productos de tales sociedades. El criminal convicto, menos tiene, a este respecto, de eliminable producto derivado de nuestra cultura que de divergente surplus de una de sus manufacturas. Tradujo del inglés para García Pradas)
DI Durante todo el siglo XIX, ha dicho Charles Gide, la doctrina de Malthus servirá para cubrir de obstáculos cualquier plan de organización socialista y hasta a simples reformas tendientes a mejorar la condición de los pobres, porque se dirá que ellas no pueden tener otro refecto que multiplicar los coparticipantes al mismo tiempo que los productos a repartir, y en consecuencia no serviria de nada. 1) La burguesía, en efecto, ha sabido aprovechar con gran habilidad los trabajos de sus instrumentos intelectuales como los de investigadores independientes para justificar su sistema de explotación. Charles Darwin, algo más tarde, habia de ser utilizado también, definitivamente comprobado a partir de la obra de Kropotkin. 2)
En los últimos años se ha venido replanteando el viejo problema de la población con el evidente propósito de ofrecer algunas explicaciones más o menos satisfactorias al mundo famélico y defraudado de postguerra. La presión, visible e invisible de las enormes multitudes que creyeron luchar por una vida mejor, y el amenazante crecimiento demográfico del continente asiático son, quiza, los factores principales que han impulsado al sistema capitalista a popularizar este complejo asunto. Actualmente se calcula que la humanidad cuenta unos 300 millones de componentes. En el caso de que la población mundial continuara aumentando en la misma proporción prevaleciente entre 1900 y 1940, para el año 240 la Tierra tendría más de 21. 000 millones de habitantes. Cada año, pues, se suman de 20 a 25 millones de personas. Diariamente se incorporan de 55 a 75 mil bocas que hay que alimentar.
El cuadro, como es natural, no deja de ser alarmante, y aprovechando estas cifras producidas por los técnicos, algunos espíritus sombríos han renovado los amargos presagios que nos legara el sacerdote inglés. Desde que en 1798 Robert Malthus publicara anónimamente su teoría famosa, los estudiosos de diferentes disciplinas coincidieron en reconocer la exactitud de su planteo en lo que se relacionaba a la naturaleza multiplicativa de la población. Pero la teoría malthusiana tiene una doble cara, peligrosa y audaz, porque ella se basa en una sorprendente insuficiencia de conocimientos, de estudios especializados y de estadísticas correctas. Para Malthus, la po(1) Jones: Ld. Raym. 1013 (2) Comfort emplea la palabra culture en el sentido de tipo cultural, de civilización o sociedad determinada. Traductor. 3) May: The Social Control of Sex Expression. Allen y Unwin 1930. 4) Se refiere a la británica Los privilegios que en otras se toleran ose aguantan a la fuerza, difícilmente hallarán par en la historia.
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