EL DEMOCRATA. COSTA RICA. AMÉRICA CENTRAL.
prorecto atribuye los tribunales correc de la prensa. deseo que no resulte lo rado. de los más contemporáncos aun: cionales el conocimiento de los delitos de mismo con los funcionarios del Gobierno. Thiers, Jules Favre en 1863, en el momeninjuria, ultraje y ofensa, y reserva la Muy bien! muy bien! en la izquierda. to en que el imperio trataba de afiojar el Corte Superior el de los delitos de difama. No puedo comprender por qué extra freno y en el que ellos sostenían la jurisción contra los funcionarios. En seguida íio abuso de las palabras se dice que una dicción del Jurado con aplauso de todos habló de Fresneau, que combatió tanto ley contra los difamadores, contra los que los hombres ilustres?
el proyecto de Barthe como el contra tienen por oficio injuriar a los demás, es «Pues bien! sinembargo de eso, me he proyecto de Trarieux.
una ley contra la libertad de la prensa. decidido no dar un voto silencioso. esLa intervención más notable ué la de (Muy bien en la izquierda. pero que me perdoneis. de Marcére, quien declaró con mucha. llamais eso libertad de la prensa! Challemel Lacour, con notable lenfranqueza y no menos energia, que se se delito de opinión!
guajo, declaró que no contradice esos paraba de algunos de sus amigos del cen Lenoel. Ya no hay delitos de opi maestros; pero al mismo tiempo hace ver tro izquierdo, en la cuestión que se debatia. nión. que en la prensa se ha producido una verM. de Marcere demostró la penosa si El Presidente del Consejo. Lo único dadera revolución. Nada del pasado puetuación del funcionario, expuesto a los a que queremos es proteger el honor de los de darnos una idea de la prensa que tenetaques de todos los partidos hostiles al Go funcionarios contra los ataques injustos, y mos hor.
bierno. El honorable Senador cree tam a menudo interesados, dirigidos contra «Esta revolución se relaciona con caubién que la protección del jurado es insu ellos. Por mi parte, conozco muchos sas variadas que sería interesante aclarar.
ficiente; y que la ley propuesta es justa, li hombres que están al frente de vastas em Su origen se remonta a un tiempo ya disberal y necesaria y por lo tanto le daría su presas y podrían prestar su país, en pues tante esa revolución principió el día en que voto. Esta declaración mereció muchos tos públicos, brillantes servicios, pero que el sufragio universal constituyó súbitamenaplausos.
se niegan ello por no verse atacados, de te la base de nuestra sociedad politica.
Después Baragnon, Senador de la nigrados vilipendiados en su considera«Ella continuo aun bajo el imperio, duderecha, abogó por la causa de la libertad ción, en su honor y hasta en su familia! rante el cual a pesar de todas las trabas de la prensa y rechazó todo lo que se había (En la izquierda: Eso es cierto! Muy que puso éste hasta el fin, no dejó de apropuesto en contra: el proyecto Barthe bien. Vanzar secretamente. No estalló ni fué conel contra proyecto Trarieux. Hay, señores, artículos de periódicos sagrada sino por la ley de 29 de Julio de Bernard es muy hostil al proyecto, que no me atrerería leer en esta tribuna. 1881; y desde este día, se ha desarrollado que, en su opinión, arrebata al país una de ¡Y llamais eso libertad de la prensa! No, con espantosa rapidez.
šus mas preciosas libertades (reclamacio mil veces no. Muy bien! en la izquierda. «El primer rasgo de esa evolución es nes en la isquierda. ataca considerable«La ley que os proponemos es una ley que hoy todo el mundo puede fundar un mente la ley de 1881, por lo cual es preci de policia, y también de libertad. No tienė periódico, mediante ciertas formalidades so dejar subsistente el jurado. El orador por objeto poner traba la libertad del es cuyo valor conoceis.
cree que la fiscalización de la prensa es ne critor, sino asegurar la tranquilidad de las «Para ello no se necesita dinero, ni ocesaria, y que si se cometen abusos el repersonas honradas y reducir a la nada pinion política, ni pasado, ni porvenir, y la medio no lo da el proyecto. éste no con los difamadores que ofenden la conciencia única garantia que se requiere es el cumviene dijo ni nuestras costumbres ni a pública. Muy bien! muy bien! grandes plimiento de las formalidades legales. nuestras opiniones liberales. aplausos en la izquierda. Mientras dure ese periódico, hablará.
La intervención de Bernard produDespués de esa declaración, el texto sobre quien y como quiera, sobre los parjo en el Senado una improvisación corta, de la comisión se aprobó por 167 votos con ticulares y los funcionarios, sobre las sopero llena de inspiración de Tirard.
tra 102, y el Senado decidió que pasara ciedades privadas instituciones políticas, El Presidente del Consejo respondió segundo debate.
sobre los negociantes y estadistas. Podrá en estos términos. Un despacho posterior ha anunciado contestar y multiplicar sus ataques sin. Señores: Permitidme contestar unas pocas palabras, pues no puedo permane ramente aprobado por 118 votos contra que el proyecto de ley había sido definiti medida, ni freno; llerarlos hasta el último cer impasible en mi banco cuando oigo que 107. exceso sin correr más riesgo que el de alguna causa ante la Corte Suprema ante se nos acusa de atacar la libertad de la la policia correccional.
prensa y de querer restablecer la ley dra«Y cuando el demandante se presenic coniana de 1852. Muy bien! muy bien! en UN DISCURSO DE CHALLEMEL LACOUR.
la izquierda. Hablad. ante la Corte, todo habrá desaparecido, peEn el segundo debate, intervino riódico, periodistas, gerente: pero queda«Es posible que haya quien se atreva Challemel Lacour, para pronunciar uno de rá el recuerdo de las difamaciones que señalan su paso. sufrieron durante diez y ocho años la pri esos hermosos discursos a los que ha avación de todas las libertades; que esos costumbrado a las Cámaras.
Las razones que impulsan a Challehombres, a quienes se negaba hasta la li Challemel Lacour no es partidario mel Lacour a no considerar como bueno bertad de instruirse, quieran hoy, renegandel jurado, niega su competencia en mate el jurado son numerosas: las enumera; do de su pasado y de la libertad, propone ria de difamación a los funcionarios. pero hay una principal: ros que recurrais leyes semejantes a las «He racilado, he vacilado mucho tiem. Pues bien, declaro resueltamente, nefandas de 1832? No. señores, nó! Nues po en intervenir en la discusión, no por que para las causas que ponen en juego tro amor a la libertad no se ha debilitado, que se requiera cierta resolución para vo las pasiones políticas, el jurado ofrece mela queremos para todos; y puesto que esta tar de conformidad con la convicción que nos garantías que los magistrados correcmos a la cabeza del Gobierno, tenemos la uno tenga, cualquiera que ella sea, pues cionales, cualquiera que sea su origen, y pretensión de defenderla en beneficio de para eso no se necesita ni resolución ni va sea cual fuere el gobierno que los haya intodos. Muy bien! muy bien! en la izquier lor; sino por no presentar en la tribuna ra vestido.
da. zones que prodrían considerarse como una «No se si el jurado es la imagen per«El señor Guarda sellos os ha hablado negación de los principios sostenidos con fecta de la sociedad, ni si debemos desear de la necesidad de proteger el honor de los autoridad incomparable por admirables que lo sea; en todo caso se me concederá funcionarios, y confieso que no se necesita maestros, por hombres que tenemos la creer que en ciertas épocas de turbación mucho tiempo de servicio para comprender costumbre de colocar en el primer término podria reflejar cosas extrañas inspirarse que esa necesidad es indispensable.
de los fundadores de la libertad francesa. en una moral particular; pero me atrevo «Los funcionarios que representan los «Esos principios son los proclamados decir que, fuera de las causas criminales, intereses del Estado, por ejemplo los de y sostenidos desde 1791, los que han sido en las cuales puede considerarse como órhacienda, se ven obligados a luchar contra nuestro remedio y refugio en los tiempos gano de la conciencia universal, corre el los intereses particulares y aplicar rigu de opresión; sí, en una palabra, las tradi riesgo de dejarse dominar por las pasiones rosamente la ley; esos hombres cumplen ciones que se nos presentaban aquí ayer que hierven a su alrededor, y ceder a la valerosamente su deber, y aprovecho esta como pertenecientes al partido republica corriente; pues absuelva o condene, tiene ocasión para tributarles este público home no, en términos que podrian tal vez cau siempre la convicción de que sirve una naje. Ahora, si estos hombres son ataca sarnos algunos embarazos.
causa superior. dos difamados, cómo quereis que el Go. En efecto. quiénes somos nosotros, y El verdadero mal que aqueja la Rebierno no se indigne y les proporcione los sobre todo quién soy yo, para renir com pública, según Challemel Lacour, es la medios de defenderse. Muy bien! en la batir las lecciones de Rover Collard, Ben existencia de una prensa baja que injuria izquierda. jamin Constant, Berenger, Dannon; de to sin cesar, y que, impune siempre, logra a«Podría deciros en qué condiciones se dos esos grandes hombres de la restaura partar de las funciones públicas los más ven obligados vivir ciertos establecimien ción, acostumbrados a identificar la liber dignos de desempeñarlas.
tos particulares para librarse de los ataques tad de la prensa con la institución del Ju. Llegará día en que para formar una Este documento es propiedad de la Biblioteca Nacional Miguel Obregón Lizano del Sistema Nacional de Bibliotecas del Ministerio de Cultura y Juventud, Costa Rica.