4 EL DEMOCRATA.
constituye el fondo sustancial de las creencias y opiniones de una generación.
Pasemos a estudiar nuestra situación actual.
Para reponer al Benemérito General don Bernardo Soto, durante cuya administración el pueblo recobra su espíritu, por lo cual su agradecimiento será eterno, el partido que está llamándose liberal propuso un candidato excelente: hombre ilustrado, de honradez sama, de antecedentes brillantes y al cual solo se tachaba su nacimiento en Rivas de Nicaragua y su carácter un tanto autoritario. Tenía la gran ventaja de estar en el Poder por llama miento temporal del Honorable señor Soto, cuya salud estaba quebrantada. Al decir gran ventaja no aludimos la Jefatura del Ejército; ni la de empleados civiles; ni menos la administración del tesoro público, sino la bellísima ocasión de mostrar su liberalismo y altas dotes, principalmente su habilísima política y sabio entendimiento en el momento en que su situación era en estremo delicada como Presidente y Candidato.
La Opinión no estaba bien manifiesta aun: la creación del Partido Constitucional estaba muy lejos de ser un hecho y del Licenciado Esquivel pendía una casi unanimidad de votos a favor de su candidatura, cuando empezaron las primeras manifestaciones contrarias.
Ese fué el momento de prueba: el Lifcenciado Esquivel sucumbió.
Su administración duró cien días y los males causados en su curso son nega.
dos por su partido. Hay no obstante algúe esquivelista que en particular nos ha dicho: Don Ascensión es magnífico, y si cuando fué Presidente se sufrió algo, el culpable no ha sido él, sino. el colombiano de marras. Famosa diseulpa, lindísima justificación! aceptando el dicho de ese amigo podrá ser conveniente que el hombre que cede influencias nocivas aun para sí mismo, venga gobernarnos! Es esa la energía caracte.
rística del señor Esquivel? No y no.
El apreciable y dignísimo caballero don Ascensión Esquivel, que ocupa uno de los primeros puestos en nuestra sociedad con inagotable caudal de merecimientos, tiene todas nuestras simpatías personales, mas no nuestro voto come candidato la Presidencia de la República.
En cambio el Licenciado don José Joaquín Rodríguez Zeledón, cuya carta los Redactores de La República dice lo que él es qué diferencia tan favorable nos muestra! esa carta, resumen dei más puro liberalismo, de la más encarnada democracia y amor la libertad, conjunto bermoso del mejor y más grande programa político, es el blanco único donde los pr.
tidarios del señor Licenciado Esquivel, esos están llamando liberales, dirigen sus tiros, en su completa carencia de arga mentos más dignos de la causa que pretenden defender; mas se estrellan: esa carta es un escudo de brillante donde reflejándose los rayos del sol de la libertad, ilu minan el camino del progreso y dejan ciegos los que están gravitando en esa esfera de términos medios. Paso la libertad y la democra cia. Paso al hombre liberal!
GACETILLA.
De buena fuente sabemos que Simón Corrales, policía de Aserrí, anda en comisión por las poblacioncitas de Candelaria recogiendo firmas para la Candidatura Esquivel. Es esta la misión de la autoridad?
El partido liberal se cansa de pedir el programa del Licdo. Rodríguez, y sinembargo no hemos tenido nosotros el gusto de ver en letras de molde el del señor Esquivel. Será que quiere que aceptemos por el suyo los últimos acontecimientos de su administración de CIEN DIAS. Imprenta de José Canalias.
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