COMBATE SUÁREZ Existencia Completa de Granos y Abarrotes Mercado Central. San José a Veer EN DEFENSA.
Viene de la Pág. PRIMERA al trabajador y aprovechar esto en los problemas triviales y no de beneficio de una mayor producción. fondo. Tenemos patronos que tiem Sencillamente necesita trabajado. blan ante las inversiones que exi res, los basca, los pone a trabajar, ge la época actual y que luego pero no los organiza ni a ellos ni se quejan y tribuyen a otras cau.
al trabajo que ejecutan. Lo que sas la baja producción. Tenemos aquí digo se comprueba digo se un Ministerio de Agricultura e In comprueba vistando fábricas y cen dustrias que en los daños que tie tros en los que se nota desperdicio ne ha figurado más como decora de tiempo y fuerza humana por ción que como impulso de la eco falta de organización, se observa nomía naiconal.
haciendo un recorrido por nues He hecho estas apreciones para tras carreteras para comprobar fundamentar mi no aceptación a qu donde se debía sembrar pa la campaña que se está haciendo pas se siembran piñas y vicever. con el fin de demostrar que la ce sa, como ejemplo tenemos: en log santía figura como factor número cuales nuestros abuelos semoraban uno y decididamente negativo en maíz y hoy se continúa haciendo el desenvolvimiento de la econo.
lo mismo, por un simple e igno. mía nacional. La baja producción rante apego a las costumbres. que yo analizo a través de tres Desorientación: porque se quie factores, la achacan los patronos re producir sin saber cuál es el uno solo, porque es más fácil, consumo y qué cosa se consumen aún cuando sepan que se están en más; y así, en determinado mo gañando, no reconocer errores que merto, tenemos la plaza abarrotada ya hubieran hecho realidad la co de determinado producto ya sea laboración de clases.
agrícola o industrial, o nos pasa Nuestra actual cesantía en la el caso contrario: escasez au forma que ahora está redactada, sencia completa de los mismos, lo encierra dos interpretaciones: ayu cual obliga las importaciones o da a la desocupación y multa a exportaciones empíricas que he. los patronos. La desocupación, pro mos visto. En la producción nacio blema social en sí, puede ser monal de cualquier clase que ella tivada por causas naturales o ar.
sea, encontramos una marcada de tificales. Naturales si es producto sorientación. En el campo indus de desastres, falta de materia pri trial se clama por mayor protec ma, depreciación económica, etc; ción pero no Se analiza cuáles artificial si es despido sin motivo industrias debe y necesita tener justificado o provocada por el mig el país en relación con la mate. mo trabajador. Cuando es conse.
ria prima que se produzca o fa. cuencia de causas naturales toca cilidades que haya de conseguir al Estado en primer término bus ésta, no siendo extraño que si a cale solución, y en segundo térmiClaudio González se le atnojara no a la sociedad en general, poi o se le ocuriera producir automó las consecuencias de orden social viles o sembrar peras. Se clame que trae consigo. Ya que no pue por proteger los Esfuerzos de do explicarme que ni aquél ni esta Clauudio González sin tomar en posear los recursos o protección cuenta si esta industria va a pro necesarios que los pongan a salvo ducir beneficios o entajas al de los peligros que una desocu.
productor, o al consumidor y el pación encierra. Pero la desocu.
general al país.
pación por causas artificiales y es Falta de tecnicismo. En casi to tando de acuerdo, pues no creo das las ramas comerciales, indus que haya quien no lo esté, que os triales o agrícolas del país, se tra un problema social que afecta a bajo con apego a costumbres pe.
una parte de la sociedad, o a tosadas y métodos anticuados. Los da en forma directa o indirecta adelantos y la técnica actual sir. según las proporciones que tenga, ven para hacer comentarios sobre debe ser evitada sancionando ellos, mas no para ponerlos en quienes a lprovocan. Nuestra ce.
práctica. La técnica moderna exi santía literalmente interpretada, ge mayores inversiones porque re es la ayuda que el patrono da al presentan hayor producción, lo desocupado que él está creando, que cabe decir, economía mejor porque cuando el trabajador por entendida; pero nuestra clase pa voluntad propia, sea por maldad o tronal marcha al día con las ne por ignorancia motiva el despido, cesidades personales que la épo. exanera al patrono de esta pres ca actual les impone, pero quie. tación legal. La cesantía en la ren seguir reatados a sistemas de redcción actual tiene carácter puni producción que no dan el margen tivo también, porque la sociedad suficiente para la sastifacción de merec protección y una de las maesas necesidades, ni a las actua neras de atentar contra ella es les de la clase trabajadora. Quie. creando desocupación, de donde se ren vivir en el siglo XX, pero con deduce la justicia de que quienes los mismos sistemas de producción así proceden carguen con la culpa del siglo XVIII o XIX, de su delito, y ninguna manera Tenemas Cámaras o Asociacio. más efectiva que haciendo que sa nes Patronales que propugnan la tisfaga a aquél a quien se le hace defensa de sus respectivos inte el daño, con una remuneración reses, enfocando la solución de efectiva. Por otro lado el carácter punitivo que tiene, garantiza una relativa estabilidad en el trabajo al obrero. Siendo la desocupación un problema social y el trabajador un componente de la sociedad, lo gico es también que el Estado a través de leyes haya querido per el problema sancionando a quienes lo provocan.
Hasta aquí he analizado dos pro yecciones o interpretaciones. Cuál de ellas sirve en la práctica más al trabajador? La punitiva, porque mientras exista como pena pa ra el patrono, el trabajador se sentirá más garantizado y con áni.
mo de ejercer el reclamo de otros derechos que el Código de Traba jo le da. Corrientemente sucede que un trabajador al iniciar sus labores en determinado lugar sa abstenga de reclamar nada que la esté perjudicanndo, ya que los he chos prácticos le han enseñado que tras el reclamo, lo espera la calle. Opta por guardar silencio hasta sentirse protegido, y enton, ces vienen la reacción que los patronos consideran cambio radical y maligno de parte de éste, pero sin confesar más que al dar tra.
bajo a un obrero empiezan desde un principio a negarle y desaca.
tar la mayor parte de las disposiciones legales proteccionistas que éste tiene a su favor. Reconozco que algunos trabajadores después de los tres meses se comportan en forma diferente a la que debe observar un trabajador responsa ble, pero debemos admitir que ella es hija de das causas: las prédi cas demagógicas de los comunis.
tas y; la reacción equivocada de los patronos que en forma antisocial y poco conveniente para el desarrollo económico del país, se han dado a la tarea de hacer des pidos de trabajadores, antes de los tres meses, creando en ellos el desquite, que llegan a jercerlo cuando han pasado de los tres me ses de trabajo.
Defendemos el carácter punitivo de la cesantía porque sólo así ros sentiremos seguros de conservar otros derechos tales como vacyciones, horas extras, buen trato, etc, y me explico: el día que la clase patronal tenga mano libre para despedir, ninguno o muy po cos trabajadores gozarán de va casiones, porque tenemos la sensación y casi la seguridad de que antes de las cincuenta semanas nos echarán a la calle y; porque estando en libertad de despedir bastarán tres o cinco despidos en los trabajadores más significados para que ninguno otro ase recla mar nada. Sé que con palabras se puede rebatir esto y que con promesas se puede asegurar lo contrario, pero desgraciadamento eodos los argumentos que nos den ante hechos reales y ante la des.
confianza que esos mismos hechos han producido en uestro ani mo y en relación hacia los pa.
tronos. De esto la culpa no es ruestra, sino de las tácticas equi vocadas de nuestro capital.
En la campaña que los patronog esián haciendo para reformar la cesantia, solo una cosa se ha oí.
do: que es gravosa para la economia nacional. Empezando di ra.
zones contrarias a esta aseveración, pero ha algo mas: qué patrono ha probado con umeros que esto sea cierto? Ninguno. Lo dicen, to repiten, más ninguno lo prueba.
Como razón presentan el triste panorama que confrontarian si a la vuelta de ocho años tuvieran tque deshacerse de todos sus tra.
bajadores. Cuando esto dicen sole demuestran dos cosas: que como hombres de empresa son poco serios porque no se puede concebir el establecimiento de un negocio, cualquiera que sea, con vida de.
terminada. Suponer que a los ocho años se ha de despedir a todos lets trabajadores, es suponer la li quidación del negocio y; como pa.
tronos actúan movidos por el de seo de despedir, porque su obsesión es el cúmulo de las presta.
ciones y no la mejor administra.
ción del negocio. En este punto cabe recalcar que la mala administración llega al etxremo de que apartando como lo hacen un cinco por ciento para prestaciones Pasa a la Pág. SIETE a Este documento es propiedad de la Biblioteca Nacional Miguel Obregón Lizano del Sistema Nacional de Bibliotecas del Ministerio de Cultura y Juventud, Costa Rica.