Lo que nunca podrá justificar Alemania es su método de guerra: arrasar, asolar, devastar. Por qué y para qué incendiar la biblioteca de una universidad o derribar una catedral u otro monumento, obras de muchas generaciones, y propiedad de todos los hombres, inclusive los mismos alemanes?
Nunca he olvidado una explicación de un maestro de mi juventud, discipulo de Spencer, por lo que ahora comprendo. Después de explicarnos el complejo papel de las religiones en la vida de los hombres, valiéndose para ello de variadas citas históricas, nos dijo un dia. Pues bien, digan que ya saben algo de lo que hace el miedo, porque todas las religiones son hijas del miedo a la muerte. Por todas partes he descubierto después los frutos del miedo. En lo que me atañe personalmente, puedo asegurar que todos los desaciertos no atribuibles simplemente a mi ignorancia, debo atribuirselos a algún miedo, Se discurre a menudo acerca de los milagros de la confianza, o de la esperanza, o de la fe que salva montañas. no sería también bueno discurrir igualmente, o mayormente, acerca de los milagros del miedo, que hace posibles las situaciones sociales más aflictivas?
Cuando esté más viejo, y vuelvan las supersticiones a hacer su irrupción en mi cabeza, o se yergan las que hayan quedado en algún rincón agazapadas, el primer dios ante el cual voy a doblarme, ya lo verán, será el dios del miedo, que es como si dijera todos los dioses, según el maestro citado. Cuánto va de un botón a la flor?
Pues a mi me parece que entre el acuerdo oficial que hace pagar a los empleados públicos la deuda del partido triunfante, y el acuerdo por el cual se les exija posteriormente una adhesión incondicional al Gobierno, hay tanta diferencia como entre un botón y su flor.
En el fondo, el mismo grave defecto de razonamiento por el cual se desprecia al empleado público, considerándolo como un parásito los de abajo, y como un servidor propio los de arriba, cuando en realidad o justicia el empleado debiera ser considerado por todos como un servidor del pais. Enero de 1911, durante la Administración de don Ricardo Jiménez. Hace mucho tiempo que entro la política en la escuela. Primero le vi.
mos las uñas; luego, en tiempo de la famosa reforma, el cuerpo entero; pero disfrazado. El disfraz se ha venido aligerando después poquito a poco, como vestido de mujer. Lean Uds. hoy en el Diario Oficial los TELEGRAMAS y cartas en que inspectores y directores de escuelas ponen a la «SUPERIORIDAD» administrativa al tanto de «la propaganda a favor de la tributación directa. Ahi tienen, pues, a los maestros, cual jefes politicos, haciendo a ciegas una propaganda extra escolar, sin convicción filosófica, sólo por complacer a la «Superioridad. Peor veremos dentro de poco. Mas esperemos que sea el final, pues no hay mal que no acabe por cerrarse a sí mismo el camino. Agosto de 1916, durante la Administración de don Alfredo González. 287 Este documento es propiedad de la Biblioteca Nacional Miguel Obregón Lizano del Sistema Nacional de Bibliotecas del Ministerio de Cultura y Juventud, Costa Rica.