que, según su idea, habrá de coronar la obra de la paz.
Reivindica Vd. la independencia de Polonia, de Serbia, de Bélgica y la libertad de los pueblos de Austria Hungría. Probablemente quiere Vd. que, en todas partes, las masas populares tomen su suerte en sus propias manos, para formar después una sociedad de naciones libres; pero es particular que no vemos entre estas reivindicaciones ni la libertad de Irlanda ni tampoco de las Filipinas, cuyos pueblos lamentaríamos ver en la imposibilidad de participar, por medio de representantes libremente nombrados, en la organización de la Sociedad de las naciones. También queremos saber, señor Presidente, para principiar las negociaciones tendientes a la creación de la liga de las naciones, como concibe Vd.
la solución de problemas de toda clase de índole económica, cosa que tiene esencial importancia para la obra de la paz futura. No menciona Vd. el asunto de los gastos de guerra, que serían una carga aplastadora sobre las espaldas de las masas populares, en el caso de que la liga de las naciones no se niegue a pagar a los capitalistas de todos los países, sus empréstitos. Usted sabrá, como nosotros, señor Presidente, que esta guerra es el resultado de la política de todos los Estados capitalistas; que los gobiernos de todos los países participan a cual más en los armamentos; que en esa política de presa tomaban parte los grupos capitalistas de todas las naciones civilizadas, y que, por eso mismo, sería demasiado injusto que las masas populares, después de haber pagado por esa política con la sangre de millones de hombres y con la ruina económica, tuvieran todavía que pagar a los verdaderos culpables de esta guerra una contribus ción, en premio a tal política, causa de tantas desgracias. Creemos por eso, señor Presidente, que la Liga de las Naciones establecerá, como cimiento de ella, la negativa a pagar los empréstitos de guerra.
En cuanto a la restauración de los países devastados por la guerra, consideramos muy justo que todos los pueblos ayuden a las desventuradas Bélgica, Polonia 231 Este documento es propiedad de la Biblioteca Nacional Miguel Obregón Lizano del Sistema Nacional de Bibliotecas del Ministerio de Cultura y Juventud, Costa Rica.