ra as te rde la historia dictaba sus oráculos a las escuelas, donde se daba a los ciudadanos la lección del deber, a los gobiernos la de la soberanía, a los soldados la de la obediencia, a los generales la del mando.
га ra Era desde ahí de donde uno de los más autorizados maestros de la ciencia nueva profesaba estas enseñanzas. La guerra es la ciencia política por excelencia.
Probado está, muchas y muchas veces, que sólo por la guerra viene un pueblo de veras a ser pueblo. Sólo en la práctica en común de actos heroicos en bien de la patria, una nación logra tornarse, real y espiritualmente unida. Los civiles han emasculado la ciencia política» desconociendo que la guerra es la segunda función del Estado. Los pueblos más civilizados son los que mejor pelean, y esta «es la cosa principal de la historia. La grandeza depende más del carácter que de la educación; y es en los campos de batalla donde se forma el carácter.
Así dogmatiza el historiador, el catedrático oficial. Oiremos después al filósofo. La guerra. dice él. es la divinidad que consagra y purifica los Estados.
Una buena guerra santifica todas las causas. Contra el riesgo de que el ideal del Estado se corrompa en el ideal del dinero, el único remedio está en la guerra, y, todavía una vez, en la guerra. Queréis escuchar ahora al estratega, al general, al jefe de ejércitos? Escuchadlo. Sin la guerra, las razas inferiores y faltas de moral, rápidamente eliminarían a las razas sanas y longevas. Sin ella el mundo acabaría en una decadencia general. La guerra es uno de los factores esenciales de la moralidad. No basta? Atended todavía. El peor de todos los errores, en la guerra, es el mal entendido espíritu de benevolencia. Porque aquel que usa de su fuerza inexorablemente, sin medir la sangre derramada, llevará siempre ventaja grande sobre el adversario, si éste no se conduce del mismo modo. La estrategia regular con2II Este documento es propiedad de la Biblioteca Nacional Miguel Obregón Lizano del Sistema Nacional de Bibliotecas del Ministerio de Cultura y Juventud, Costa Rica.