¡Qué su direcci to útil qu país por Porque si ha de haber Universidad, habrá de ser una escuela moderna en su clase, un instituto eminentemente científico, para cultivar la ciencia pura y sus aplicaciones prácticas, lo abstracto en sus más altas idealidades, y lo más concreto y aplicado a la vida real en una sociedad moderna que aspira al progreso humano en todas sus manifestaciones.
Inútiles resultan todas nuestras voces en favor del progreso, si como hasta ahora viene aconteciendo se queda todo ello en palabras, siendo liberales pro formula, y ultraconservadores de hecho, y en efecto retrógrados de corazón.
Déjense, pues, de hipocresías, con que sólo podrán embromar a los mentecatos, y entren de lleno en la vida moderna sin «modernismo de ilusión. y como verdaderos patriotas que, por lo mismo que han envejecido respetados, aman sinceramente la juventud y, si es preciso, saben postergar sus intereses personales a los de esa misma juventud, que son los más caros intereses de la patria.
Porque versidades educación Estado, co das y favo bernantes inaudita, multiplicar Tales güedad, la: tarias, de principalm la energía dejan educ Tales tos más subordinad centralista, forma un seis u och Escuelas superiores, dirección Vida. lo primero habría de ser, lógica e históricamente considerado, fundar la Universidad Nacional, sin miedo a esa reunión de fuerzas intelectuales. miedo propio de tiranos, más o menos estúpidos, y nunca de hombres libres y honrados gobernantes.
Mucho se equivocan, a mi parecer, aquellos rutinarios que sospechan de esa agrupación de hombres de ciencia, de verdaderos profesores y profesionales, aunque no se jacten de títulos que tantas veces resultan vanas fórmulas, antiguallas de otras edades.
Las verdaderas enseñanzas en la Universidad moderna, no tienden a formar doctores, ni licenciados, ni siquiera bachilleres; cultivan libremente el saber, los saberes que dijo, hace tanto tiempo, Alfonso de España, llamado el Sabio Cultivan la tierra más fe cunda y explotan la mina que jamás se niega: la mente humana, la razón que es lo más humano y lo más divino en el hombre.
La llamada educación de la voluntad, sin alta cultura filosófica, sin moral cristiana, sin bellas letras para recrear el espíritu, no pasa de ser un embrutecimiento sistemático, dirigido por pedantes llenos de vanas pretensiones. Sus resultados no los verá quien ande por las calles sin ver las cosas; los que tenemos buen sentido práctico, sin mayor saber ni distinguida ilustración, no podemos dejar de verlos, por miopes que se nos quiera suponer. el remedio de la perversión que aquí se ha querido hacer pasar por enseñanza y cultura moderna no puede hallarse en otra parte que en una Escuela Superior de Ciencias y Letras, que se llama Universidad. Quién no quiere ese remedio? Los tímidos y los ignorantes, que se asustan de una juventud liberalmente educada.
Señor Muy seño Acabo de lo que agosto se tal, de pe Colegio Much 174 Este documento es propiedad de la Biblioteca Nacional Miguel Obregón Lizano del Sistema Nacional de Bibliotecas del Ministerio de Cultura y Juventud, Costa Rica.