cumba revolu no sea pontár no fue traer para el país la baja del cambio, y trató de conjurarlos, de la manera más juiciosa, dando existencia legal al proyecto de contrato que para evitar esos males recomendarán la Junta Patriótica, la Conferencia Financiera, la Sociedad de Agricultores y la inmensa mayoría de la opinión pública. El Gobierno no quiso aceptar lo hecho por el doctor Araújo, ni tampoco presentó solución ninguna para el problema en reemplazo de la que el doctor Araújo quería hacer adoptar. En esa situación, no quedaba al Ministro del Tesoro más camino que el de la renuncia, y el doctor Araújo, que ha tenido siempre expedita esta amplia vía de la entereza y del decoro, no vacilo en seguir por ella. Si la causa de la renuncia del Ministro del Tesoro es la que le atribuye «El Tiempo. y si lo que nosotros afirmamos es la verdad, parece injustificada su renuncia.
No dogmatizamos, y si admitimos la posibilidad de errar. Es principio de lógica elemental dudar, por lo menos, del propio dictamen cuando no está de acuerdo con el de los demás hombres.
En nuestro concepto, la libertad es el único medio para resolver las dificultades, porque los pueblos proceden con más acierto que los individuos, quienes raras veces tienen puntos de vista colectivos.
La cotización no se decreta: el interés personal es el nivelador del comercio, y el baqueano, digámoslo así, en las vías escabrosas de la economía social.
JOSÈ BORDA cuestid Huert hubier Gobie lucion favor revolu die le su der tiro Méxic eso chos; tienen en la E: que no princi tados largo Wilson y los periodistas mexicanos mi op suadi Somo milita sas.
ahora de toc prome tando tica «Mi política personal hacia México, la política de mi legislatura, se ha fundado siempre en el principio de que el arreglo de los negocios interiores de México no era asunto que nos incumbía; que no teníamos derecho de intervenir ni dictar lecciones a México en ningún sentido con respecto a sus asuntos particulares. Cuando enviamos tropas a México, nuestro deseo sincero era únicamente prestaros ayuda para libraros de un hombre que hacía imposible por aquel entonces el arreglo de vuestros asuntos. No teníamos la menor intención de hacer uso de nuestra fuerza en ninguna otra forma; y esperaba yo, por el contrario, que su retiro inmediato, después de conseguido tal objeto, sería la mejor prueba de la verdad de las promesas hechas a vuestro Gobierno por intermedio del Presidente Carranza. Cuida el Presidente Wilson de hacer notar, como se ve en el párrafo citado, que su política hacia México es personal y hace una declaración de principios, infirmada a renglón seguido por el procedimiento que confiesa haber puesto en práctica interviniendo en los asuntos particulares de México. menos que no sea asunto que iny ese todo Roos sentir tienen otros porc rian 12 Este documento es propiedad de la Biblioteca Nacional Miguel Obregón Lizano del Sistema Nacional de Bibliotecas del Ministerio de Cultura y Juventud, Costa Rica.