entre quía sobre causad página de hor guno cuand que 11 ment Draper. Es acto de virtud engañar o mentir cuando por este medio se obtiene algún beneficio para la Sagrada Causa. Las anfibologías son lícitas, decía el célebre polemista Lachaise, cuando existe una causa justa para usarlas; por esto, como la palabra latina «gallus puede significar un gallo o un francés, aun cuando yo hubiera muerto a alguno, siempre contestaría que no, entendiendo para mí que se hablaba de gallo. por lo cual Mme. de Montespan. la amante adúltera de Luis XIV llamaba a Lachaise. La chaise de la commodité. No podrán los americanos ni los europeos comprender cómo un hijo eminente de los Estados Unidos sostiene semejante doctrina en los momentos en que su gran Patria lanza generosamente sus huestes al incendio que amenaza la civilización para defender los principios fundamentales de la vida internacional: la igualdad de las naciones y el respeto a los débiles, violados y ultrajados en Bélgica, en Serbia y en Polonia; el sagrado de los Tratados públicos, declarados «papeles inútiles. el fuero territorial y la soberanía de las naciones, declarados también buena presa para el derecho imperialista de la fuerza; el respeto, en fin, y los miramientos que se deben a la paz, a la amistad, al culto de la justicia y al derecho histórico de las nacionalidades y de los pueblos, grandes o pequeños, que se ha pretendido sacrificar ahora y se ha sacrificado otras veces, en aras de aquel imperialismo intemperante y agresivo, llamado por los publicistas «derecho del puño, política cartaginés o fe púnica de tiempos deshonrados. No! La conducta de los Estados Unidos es hoy tan brillante y magnánima en Europa, que el pueblo americano impondría seguramente silencio, como ya lo ha impuesto, a toda voz o ademán de imperialismo que osara mostrarse después de que sus ejércitos, en nombre de la República, han dicho a la audaz e inmoral autocracia disfrazada de moralidad política. De aqui no pasarás. turali fuera, grem L punta Los tacitu niens Si si e: más er Continuará. DE P, BORDA Dir vase re la fran tecer a a las Oig De todo las gi He recibido Les Marges, 53, XIV (Paris, rue Chaptal. Doy las gracias al señor Secretario del cuerpo de redactores.
Para que se tenga una idea del carácter de dicha revista, me bastara traducir literalmente la imagen de la Academia Francesa trazada ha poco por Enrique Beranger y anteponer que tal imagen enfada a los jóvenes de las márgenes. Es la Academia como el arca venerable, hasta vetusta a veces, pero siempre de líneas nobles, echada Dios verda cool divid 364 Este documento es propiedad de la Biblioteca Nacional Miguel Obregón Lizano del Sistema Nacional de Bibliotecas del Ministerio de Cultura y Juventud, Costa Rica.