de lepra, desamparado en un muladar, era grande ante los ojos de Dios, pronto a premiar su virtud; que Baltazar, rey opulento, rodeado de todos los deleites, pero impío y desenfrenado, era un miserable a quien esperaba una triste muerte y las tinieblas perdurables después; sí, fué gravando en el corazón las grandes verdades de la revelación, como el cristianismo pudo hacer que aquella hez degradada, que constituía los noventa y nueve centésimos de la población, se elevara a la alta dignidad de un cristiano, que prefiere habitualmente el deber al interés, el honor al dinero, la verdad a la mentira, la justicia a la iniquidad, que mira con horror en sí mismo y con lástima en los demás, todo acto moralmente vil y degradante. 1)
Nada tenemos que agregar a lo anterior, si no es que lo guardéis en vuestra memoria y en vuestro corazón, porque son palabras de un hombre de bien que fué en su patria todo lo que en una República se puede ser y que al soltar la pluma con la vida, mereció y merece la veneración y el respeto de todos sus conciudadanos sin distinción de clases ni partidos.
EREMITA El cor Wilson, Colombi: dos Unic «Dej política está «tan mos por El se de honor Dura: miramien niado a ciales y de las na con un sobre su bras «I La protesta del ex se consid sobre la sevelt en Conmovid dos es u Nueva El Tratado con los Estados Unidos y algunas opiniones de Mr. Huntington Wilson nión por tado, pul (ABREVIADO) Mr. Zeitz, eminente editor del World.
El Nuevo Tiempo ha traducido del Times de Nueva York, un escrito del distinguido señor Huntington Wilson, a quien aprendi a estimar en el Departamento de Estado, siendo yo Enviado Extraordinario y Ministro Plenipotenciario de Colombia en Washington. Su nombre fué, pues, suficiente motivo para interesarme en su actitud respecto a Colombia y lo ha sido también para que algunas de sus opiniones y aseveraciones me sorprendan y me animen a impugnarlas. 1) Página tomada de Mariano Ospina y su época, obra de GOmez Barrientos. Esa página fué escrita hace cerca de cincuenta años. reyes patriótica de Colom solemne quería oil era el du Invita una de su Carnegie, la Barra, deberes ofreciéndo manifestán ocuparían Roosevelt Acepto 360 Este documento es propiedad de la Biblioteca Nacional Miguel Obregón Lizano del Sistema Nacional de Bibliotecas del Ministerio de Cultura y Juventud, Costa Rica.