trias, representa una pérdida económica muy sensible para los Estados Unidos.
La pérdida de vidas La más lamentable pérdida ocasionada por la guerra es, no cabe duda alguna, la de las vidas humanas.
Es la mayor, por lo irreparable. Sin embargo, en el estudio de la economía política, al igual que en el de otras ciencias, suele prescindirse de sentimientos y el valor del hombre se determina con arreglo a sus aptitudes industriales o sea poder productivo. El señor Barriol, célebre actuario, ha determinado el valor económico del hombre así: en los Estados Unidos, 100; en Gran Bretaña, 140; en Alemania, 380; en Francia, 900; en Rusia, 020; en Austria Hungría, 020: o sea un valor promedio de 892 para los cinco países extranjeros.
Del total de las bajas sufridas hasta hoy, el de 15. 684. 000 de hombres, 509. 000 fueron muertos y 175. 000 incapacitados. Calculadas desde el punto de vista del poder productivo, dichas bajas representan para la sociedad una pérdida de 45. 000. 000. 000, La pérdida de hombres, calculada sobre la base de capital retirado de la industria, es compensada hasta cierto punto por la subida del valor productivo de los demás obreros. Esto obedece a la ley de oferta y demanda; mas se trata tan sólo del valor expresado en moneda que en nada aumenta el poder productivo de los países beligerantes. Puede que el valor productivo de cuatro hombres después de la guerra sea más subido que el de cinco hombres antes de la guerra; mas no por eso podrán ejecutar la obra de cinco. La verdadera pérdida económica para la sociedad no es el valor monetario de los hombres muertos antes de tiempo sino el de su poder productivo.
Compensa asimismo en parte la pérdida de hombres it ferida el gran número de mujeres empleadas actual mente en las diversas industrias. En Inglaterra, de 309 Este documento es propiedad de la Biblioteca Nacional Miguel Obregón Lizano del Sistema Nacional de Bibliotecas del Ministerio de Cultura y Juventud, Costa Rica.