Violence

licos, a su vez, ven en él a un tirano de las conciencias, a un usurpador de los poderes de la Santa Sede. Una coalición se for ma, de la que son jefes Mauricio de Sajonia y el Margrave Alberto de Brandeburgo, antepasado de Guillermo II.
Pero cómo romper el círculo de hierro que cada día se estrecha más y más? Precisa un apoyo, un socorro extranjero. No hay más que uno posible: el de Francia.
Envían a Enrique II una embajada, y ruegan intervenir cito los textos. por la restauración de la libertad de su patria. Carlos dicen. quiere esclavizar para siempre a la nación alemana y quitarle a Germania sus antiguas franquicias y libertades para convertirla a una esclavitud bestial e insoportable, como lo ha hecho en España y en otros lugares. El 15 de Enero de 1552, el Rey de Francia se compromete, en Chambord, a proporcionarles tropas y dinero, y ellos en cambio lo invitan a ocupar cito aún los textos «lo más pronto que pueda, y a «guardar» las «ciudades que no sean de lengua germánica, a saber: Cambrai, Toul, Metz, Verdun y otras semejantes. Esto por lo que hace a Metz. Es esto lo que de Hertling llama «arrancar los territorios por violencia y de una manera criminal. fiada e plazas Los to de yen asolado Francia para frances Est católica guncia Emper ayuda. Estado que garant vastad: por el vendid situaci Metztadores En dijo ei tantes ocasioi tención el paso En reunió dos lo Los Alsacianos apelan a Francia. Alsacia es entregada por los alemanes a cambio de su apoyo contra Fernando II, 1634.
Ochenta años después, Alsacia que había sido gala primero, en seguida romana y después franca es entregada a Francia por los alemanes, de la misma manera y por las mismas razones.
En 1633, otro abuelo de Guillermo II, el Elector de Brandeburgo, Jorge Guillermo, solicita de Luis XIII su alianza, y le ruega «poner bajo su égida la obra de protección y de mediación de «acudir con toda prontitud. En efecto, en la gran lucha entre católicos y protestantes que llenó la primera mitad del siglo XVII, los protestantes habían sufrido la derrota de Praga, después la humillación del Tratado de Lubeck; el Emperador Fernando II había publicado en 1629 el edicto de restitución qne hubiera arruinado al protestantismo; trataba asimismo de obtener de los electores la entronización de su hijo como Rey de los romanos, primer paso hacia la adquisición de la corona imperial. En 1634, una vez más, era vencedor en Nordlingen. El peligro se agravaba de hora en hora. Entonces el Duque de Wurtemberg, los Electores de Sajonia y de Brandeburgo, con los otros Príncipes confederados, se volvieron hacia la patria del Edicto de Nantes y solicitaron el apoyo del rey de Francia.
El de Noviembre de 1634, Luis XIII, por el Tratado de París, les promete un ejército y subsidios; los confederados, a su vez, estipulan sigo citando textos que «la región de Alsacia será conhace de una unánin Мі lament existe, La imperi ¿E tament Duque 164 Este documento es propiedad de la Biblioteca Nacional Miguel Obregón Lizano del Sistema Nacional de Bibliotecas del Ministerio de Cultura y Juventud, Costa Rica.