la cont ayer citos de se debe los ante nual man partes raíces tan delicadas y tan fuertes; pienso que patria es todo lo que me ha hecho lo que soy: son mis padres, mis amigos de ahora y todos mis amigos posibles; la campiña en que sueño, el bulevar donde charlo; son los artistas que amo, los bellos libros que he leído. La Patria no me concibo sin ella. la Patria soy yo mismo por completo. entonces soy patriota del mismo modo que el ateniense que sólo amaba a su ciudad y que no quería que la tocasen, porque la vida de la ciudad se confundía, para él, con su propia vida. En efecto, hay que sentir así. es tan natural! Pero no hay que decirlo: es demasiado ditícil y no tenemos el derecho de ser triviales al expresar nuestro más querido pensamiento!
De La Información. LEMAITRE FRANCIA es, quiéranlo o no sus detractores, la maestra suprema de nuestros intelectuales. Por cada uno de ellos que bebe directamente en las diversas culturas, hay treinta, por lo menos, cuya educación mental ha sido hecha exclusivamente por París.
Sin embargo, es frecuente que estos señores, nutridos con ideas francesas, abominen de la madre a quien todo lo deben. Para los tales escribí yo un epigrama que fué publicado hace tiempo en Serenidad.
Está dedicado a un galófago y dice así. Cuando juzgas a Francia, tu dialéctica es rabiosa. y sin embargo, mi inenarrable autor, lo único que vale de tu obra, es francés.
París ha sido siempre tu colaborador.
Así, a pesar de todo tu orgullo, tu arrogancia, tu galofobia cáustica, tu mordaz acritud, el oro de tus libros es buen oro de Francia y lo tuyo. lo tuyo sólo es la ingratitud. AMADO NERVO El terreno de la teología y de la alta psicología no puede soportar ningún campeón que sea temible. Puede uno avanzar con apostura fanfarrona; pero el gesto es el de un niño que juega al general. Es ésta una observación consoladora que debe reanimar el valor de la razón. KANT. Citado por Cousin, trad. R. Rus por La alem un su do a tuna venc riad hues pos y ma Cong sobre ton, mon los muy puer Kais 102 Este documento es propiedad de la Biblioteca Nacional Miguel Obregón Lizano del Sistema Nacional de Bibliotecas del Ministerio de Cultura y Juventud, Costa Rica.