1 dicho. El más bello hecho de armas de la historia naval de todos los pueblos y de todos los tiempos.
Con estos actos admirables, la marina británica ha realizado en silencio una obra no menos útil. Ha neutralizado la flota del enemigo, impedidole su abastecimiento y su comercio, asegurando a las potencias de Entente el transporte de tropas y municiones, además del tráfico comercial. Lleva transportados 17. 250, 000 hombres, 2, 000, 000 de caballos, 37, 000, 000 de toneladas de vituallas para el ejército, 72. 000, 000 de toneladas de carbón y otros combustibles.
En 1915, los alemanes inauguraron una campaña submarina que duró varios meses; pero poco después se vieron obligados a renunciar a ella, adoptando un plan diferente, el cual entró en vigor en Febrero de 1917. Fué este plan el que vino a poner a los Estados Unidos de una manera definitiva del lado de las potencias de la Entente. Cuando, hace más de un año, Alemania proclamó la guerra submarina sin restricciones, anunció que de ahí a poco Inglaterra capitularia; resultando que en vez de la capitulación de Inglaterra, provocó la declaración de guerra de los Estados Unidos. La guerra submarina, que, según los alemanes, debió haber matado de hambre a Inglaterra desde el verano próximo pasado, no logró ni siquiera impedir este año la llegada de los americanos a Francia por cientos de miles.
Esto es lo que el Sr. Georges Leygues, Ministro de la Marina, explicó recientemente a la Comisión de Marina de la Cámara, y es asimismo lo que acaba de hacer ver por la primera vez un crítico militar alemán, el Coronel Goedtke.
SEÑORAS SEÑORES: Alemania ha unido a Francia y a Inglaterra, no tan sólo en la lucha presente, sino para siempre. Antes de la guerra, había en el campanario de Calais un reloj flamenco. Sobre el hallábanse las figuras de dos caballeros armados de lanzas: Enrique VIII, Rey de Inglaterra, y Francisco I, Rey de Francia. Cada vez que sonaba la hora, cambiaban un bote de lanza un lanzazo a la una, tres cuando las campanas sonaban las tres, doce a medio día. Un obús alemán ha caído sobre los justadores y ha puesto fin al combate. para siempre. Es éste el único obús alemán que ha sido disparado con talento. Saludo en la persona del señor Embajador de los Estados Unidos, a nuestra querida y gloriosa aliada, la gran República americana.
Aclamamos con todo nuestro corazón a sus admirables soldados, valerosos, disciplinados, dispuestos a escuchar los consejos de aquellos que han adquirido la experiencia de esta terrible guerra, soldados escogidos física y moralmente de entre este noble pueblo que, según la expresión de uno de sus hijos, dará hasta su último dólar y hasta la última gota de sangre por una idea. Saludo igualmente en la persona del Señor Embajador de Italia a su patria incomparable, creadora del Derecho y madre de la idea francesa. Hoy hace tres 85 Este documento es propiedad de la Biblioteca Nacional Miguel Obregón Lizano del Sistema Nacional de Bibliotecas del Ministerio de Cultura y Juventud, Costa Rica.