Obras completas de don Rafael Pombo amor a la memoria.
No es me de estos cuen literarias de en innumerab más tiernos a fundos del La inmen playa en sus Alma trop himeneo, per vibraciones sin igual prim Además celentes fábul das para form La intenc ciones y la a comendar su Católico ensalzar y dif Patriota si pregnó sus ve dirigidas a su partido que Muy laudable es que se glorifique a los héroes que han derramado su sangre en defensa de la patria; hermoso es también que se honre la memoria de los estadistas que han sabido guiar a sus conciudadanos por el camino del progreso; pero no es menos digno de alabanza el que se tribute cumplido homenaje al escritor que ha logrado contribuir, mediante sus producciones, a la difusión de las luces y al deleite de nuestro espíritu.
Desgraciadamente, son muchos los autores que, a pesar de sus mérecimientos, no alcanzan a disfrutar durante su vida el placer de escuchar la trompeta pregonera de su fama, y de aquí proviene que la posteridad está obligada a reparar las injusticias cometidas a este respecto.
Animado de este buen propósito, el Congreso colombiano dispuso, no hace mucho, que se exhumaran del olvido en que yacían, las obras del eminente poeta don Rafael Pombo, y se hiciera una edición de ellas a costa del Estado, Fallecido el señor Pombo en 1912, a una edad bastante avanzada, pues poco le faltó para llegar a los ochenta años, no tuvo la satisfacción de dar a conocer su nombre, fuera de su Patria, con toda la amplitud y consideración que merecía.
Sus numerosos trabajos literarios estaban esparcidos en revistas y periódicos, y jamás llegaron a coleccionarse.
No debe pues extrañarse que el vate colombiano, en Chile no fuera conocido sino por un escasísimo número de poesias que con dificultad traspasaban nuestras fronteras.
Muy pocos sabrán, aun entre nosotros, que muchos de los cuentecitos con que hemos gozado en la niñez se deben a la juguetona pluma del señor Pombo. Quién no se ha solazado en sus años juveniles con las regocijadas narraciones de «Rinrin Renacuajo. Simón el Bobito. El Gato Bandido» y tantas otras historietas por el estilo, que hizo imprimir el señor Pombo en los Estados Unidos para servir de incansable entretenimiento a los niños?
Esos modestos libritos, adornados con grotescas ilustraciones, nos embelesan en nuestra primera edad, desarrollan en nosotros el La edición dada a la Ac en uno de sus Restrepo, que sirve de encab.
rasgos biográt mérito inconte El segund: don Hernando producciones.
Hasta aho gundo conti con el titulo composiciones No resistin esas piezas, su brevedad.
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