según reconocimiento explícito de sus ardientes adversarios. Paz y prosperidad a Colombia!¡Gloria a su egregio mandatario!
EREMITA Un discurso del señor Suárez tatísicas lo dotaron de alas para remontarse, señorear el espacio y ponerse a la cabeza de los filósofos y moralistas de su patria, como las sociales, en sesgo vuelo, lo han colocado a la de sus notables estadistas.
Dueño de su voluntad y conocedor de sus fuerzas, jamás tascó el freno de las impaciencias juveniles. los veintinueve años era ya una ilustración y nadie lo sabía. Fué preciso que el centenario de Bello, cuyas obras admiraba y conocía como pocos, viniera a solicitar su entusiasmo y a sacarlo de su voluntario retraimiento. Su aparición, más que un triunfo, fué una revelación: la revelación de un grande espíritu que marchó desde entonces a la par de los más altos conductores de los intereses sociales, sin que jamás perturbara su mente el pensamiento de arrebatarles la bandera. En el reposo de su fuerza, supo esperar su hora; y cuando ella hubo llegado, sin miedo y sin alarde, recogió la gloriosa enseña de manos del insigne Caro, herido por la muerte, en día infausto para la patria. entonces comenzó esa labor de paciente habilidad, de perseverancia, de humildad, de abnegación, de constante inmolación y desprendimiento, que culminó al fin en la restauración del gran partido político, cuya jefatura ejerció y ahora deja para ser el conductor de un pueblo que lo comprende y estima.
Pueblo intelectual y creyente, combatido como pocos por la demagogia y el empirismo al fin vencidos. Colombia ha puesto a la cabeza de su Gobierno, para regir los destinos del país, al «varón más preclaro de la Nación. al más desinteresado de sus hijos, al de mejor y mayor preparación entre sus ciudadanos, Ayer, a las dos y media de la tarde, en medio de un fuerte aguacero, se dirigieron del Capitolio a la casa del señor don Marco Fidel Suárez, los diferentes gremios conservadores que componían la manifestación organizada por el Centro conservador universitario en honor del candidato acordado por la Unión conservadora para la Presidencia de la República. Formaban parte de la manifestación, compuesta de miles de personas, los miembros conservadores de la Representación nacional, altas autoridades distinguidas de nuestros círculos sociales y representantes de las asociaciones obreras de Bogotá. Daban también realce a la manifestación, los estudiantes conservadores de las diferentes Facultades y de los Colegios oficiales y privados de la capital.
Llegado el enorme concurso frente a la casa del señor Suárez, fué indispensable suspender, durante dos horas, el servicio de tranvías en la calle 15. Colmadas de gente las salas, el zaguán y los corredores, la concurrencia se extendió por toda la calle frente a la casa, entre aclamaciones al señor Suárez y a la Unión con195 194 Este documento es propiedad de la Biblioteca Nacional Miguel Obregón Lizano del Sistema Nacional de Bibliotecas del Ministerio de Cultura y Juventud, Costa Rica.