I visita 30 bolo to. cia en esta luchas que espera un Esquilo que la cante, los magníficos recursos de que dispone un pueblo entero consciente de su fuerza y de la justicia de su causa.
Las primeras violaciones de la ley internacional: la invasión del territorio belga y la del Luxemburgo, dieron lugar entre los neutrales a un sentimiento de reprobación absoluta y general. Para basar esta convicción no había ni siquiera lugar a esperar pruebas, pues el gobierno alemán las daba espontáneamente y sin controversia posible.
El ataque de los Imperios Centrales había comenzado por dos violaciones flagrantes del Derecho Internacional, de esa colección de principios que los Estados han aceptado voluntariamente como garantía de sus propios derechos y como base para el empleo de su fuerza.
Hay un trabajo que puede ser considerado como definitivo en esta materia y que debemos a la autoridad universalmente reconocida de uno de los más respetados internacionalistas: Luis Renault, publicado con el título de: Les premières violations du Droit des Gens par Allemagne. Podrá añadírsele a ese estudio detalles nuevos o amplificársele en determinados puntos, pero siempre quedará como uno de los trabajos fundamentales en el asunto. A terasi penderi 32 La moderna concepción del Derecho de Gentes nos muestra que el principio de la independencia entre los Estados rige cada día con mayor fuerza las relaciones entre ellos. Así se ha visto, especialmente en la guerra actual, el poder de ese principio y la extensión de sus aplicaciones. Hace algunos años, los Estados neutrales podían quedar como simples espectadores del drama durante la lucha, si geográficamente estaban alejados del campo de batalla; pero en la Gran Guerra, que ha movilizado fuerzas materiales, económicas, políticas, financieras y morales de toda suerte, la repercusión del terrible conflicto alcanza al universo entero, sin que hayan podido escapar a la influencia de estos trágicos sucesos los pueblos más lejanos de los campos de combate. 200 En medio de este confuso estado de fuerzas materiales y morales en conflicto, hay un hecho de excepcional importancia que llama mi atención poderosamente. Me parece (quizás por especial tendencia de mi espiritu, pero nó, más bien por esa aspiración común que nos une a los que tenemos el culto de la ley) que sobre la preocupación por los intereses materiales que sufren por la guerra, hay el temor en los neutrales y los aliados, de que los principios fundamentales del Derecho se debiliten, en opinión de muchos, trayendo, en consecuencia, un cambio desfavorable en la orientación de la marcha de la humanidad.
Trol Desechemos, sin embargo, este temor y compartamos la creencia que expresa la predicción de William Edward Hall, en el prefacio de su libro Law of Nations en 1889. Si en la próxima guerra hubiese que lamentar graves violaciones del Derecho, necesariamente se producirá una reacción enérgica, que dará fuerza más poderosa a la ley internacionals. si Police Simone Corey od sa ia colle une fois 79 78 80 Este documento es propiedad de la Biblioteca Nacional Miguel Obregón Lizano del Sistema Nacional de Bibliotecas del Ministerio de Cultura y Juventud, Costa Rica.