316 EOS EOS 317 Las grandes crisis, presentan las grandes ocasiones para gros que se presentan, debe estudiarse la determinación liquidar solidamente los momentos peligrosos que entrañan que se impone para no comprometer la causa nacional.
la bancarrota, cuando se aprovechan con sabiduria para ¿Somos aptos para conseguir con nuestro esfuerzo aislasalvar los intereses nacionales.
do, con nuestra indiscutible debilidad, lo que podemos Los instantes precisos están marcados en el tiempo y no conseguir con una actitud franca y desprendida, que pose presentan repetidos; pasan rápidamente y reclaman niendo a salvo el porvenir descarte la creencia de una juicio, serena oportunidad para aprovecharlos con tino y enemistad sistemática e insostenible?
patriotismo. No será este el momento de comprometer un reconoDe un oportuno procedimiento, cuando se sabe penetrarcimiento por un proceder caballeroso? Nobleza obliga, y, en el fondo de las situaciones, al mismo tiempo que se en los momentos críticos, un albur de audacia serena, contribuye al éxito de una buena causa, se pueden obte cambia la suerte favorablemente, ner beneficios que, en otra forma, serian algo más que Hay que reflexionar con desapasionada cordura y serie dificiles, si no imposibles, contrarrestando fuerzas insupe dad sobre estos puntos, antes de que los acontecimientos rables.
precipiten una acción violenta que no de tiempo a un El derecho es uno, si reclamamos el respeto al nuestro, procedimiento reposado.
debemos probar que igual sentimiento nos anima cuando Llevan los acontecimientos que conmueven al mundo, se conculca el ajeno, şin fórmulas egoistas y sin remoras más de dos años; si se ha seguido con criterio sereno el de pasiones comprimidas.
procedimiento de la mayoria de las potencias, unas enEl camino amplio es el de la persecución sincera de trando a la lucha, otras por medio de protestas escritas, ideales que están claramente definidos por la actuación la justicia de la causa de los beligerantes está deslindada.
que desarrollan los acontecimientos.
Se ha proclamado una promesa solemne en el Tratado Sin poner los medios de una simpatia honrosa y conci que se firmó en la capital de donde irradiaron las proclaliadora, no se obtienen las ventajas procedentes, porque maciones emancipadoras propagadas en el mundo con las se ha llegado a un punto de claras y francas definiciones resonancias de la Marsellesa, en aquella oferta de hidalga que marcan una nueva vida, de donde arrancan nuevos justicia no se marcó el limite del alcance de su protección, derroteros.
pero la latitud del propósito puede extenderse hasta los Se verifica en el mundo una transformación trascenden que la suscriban; hay un nuevo campo en donde gestionar tal que no debe desdeñarse, de la que ninguno puede para obtener un pedazo de aquella garantia. El decaimiento apartarse con indiferencia, porque implica una sentencia no debe embargar las energias, ni deben prejuzgarse las inineludible de vida o muerte para las naciones.
tenciones con la anticipación de la duda sobre su cumpliLas capas populares se van sucediendo en progresión miento: es una promesa escrita y firmada por las grandes ascendente y van ocupando sucesivamente los puestos di potencias que, en todo caso, encarna una manifestación rectivos que se resuelven en ondas concéntricas de otras precisa de un compromiso solemnemente contraido.
orientaciones.
Si seguimos halagadoras y siempre falsas promesas de Dentro de la guerra se practica una gestación de evo caudillos ambiciosos que acabaron de corromper el orden luciones, cuyo término y finalidades son incalculables. civil en nuestro continente, por qué no seguir la esperanza Con calma, arrojando con desprendimiento las pasiones, de aquella promesa sellada por el compromiso de naciones que nos cautivan y alimentan y que se acarician con en que dan más garantia para su cumplimiento?
trañable ofuscación, seriamente y compenetrados de la Hay algo más que un ideal en aquella afirmación, existe responsabilidad, midiendo con parsimonia todos los peli algo tangible: el honor comprometido de las naciones que Este documento es propiedad de la Biblioteca Nacional Miguel Obregón Lizano del Sistema Nacional de Bibliotecas del Ministerio de Cultura y Juventud, Costa Rica.