298 EOS EOS III 299 romano y la intrusión de religiones cosmopolitas como nales han crecido todos hasta convertirse casi en el mitraísmo, el judaísmo converso, el neoplatonismo dinastías. En lugar del sentimiento nacional tenemos y el cristianismo deben haber minado el antiguo patrio que reconocer la lealtad del vasallo hacia su rey.
tismo nacido en las ciudades que representaban esta Apoyados por sus fieles vasallos combatieron los dos, el cual no podía menos que sufrir con la com reyes uno contra otro para ensanchar sus dominios.
petencia de aquella rivalidad absorbente de sentimientos. No daban pretextos nacionales ni de raza sino que La Edad Media tuvo su grupo especial de fieles al reclamaban su derecho de nacimiento o de sucesión dominio feudal y al monasterio, a la comunidad y al feudal. Haciendo caso omiso de razas y de idiomas, gremio, a la vez que a la suprema entidad mística de los reyes de Inglaterra subyugaron o trataron de subla Santa Iglesia Católica. Las diversas combinaciones yugar Gales, Escocia, Irlanda y toda la parte occidenfeudales y la debilidad de las monarquías dejaron tal y meridional de Francia. Los reyes franceses poco campo probablemente para la expansión de algo hicieron reclamaciones a Inglaterra y pretendieron semejante al moderno sentimiento nacional. algunas veces extender su dominación sobre las regiones occidentales de Alemania y sobre la Italia septentrional y meridional. Los monarcas de España domiHasta donde yo sé, el nacionalismo no tiene historia. naron Portugal por algún tiempo de igual manera Si la tuviera, habríamos de recordarla siquiera por vía que ciertas zonas del sur de Italia. Los Hapsburgo de introducción como haríamos entre otras cosas con alemanes se han mostrado siempre perfectamente los ejemplos más o menos evidentes de la manifesta indiferentes con respecto de la raza, lenguaje y tradición del espíritu de cuerpo que he trazado a la ligeraciones históricas al constituir el híbrido imperio sobre El paso siguiente nos llevará a esbozar el desenvol el cual mantienen hoy su autoridad. Los cismas relivimiento del moderno Estado nacional. Acostumbramos giosos facilitaron de vez en cuando pretextos para el distinguirlo y señalarle puesto aparte de los feudos y engrandecimiento territorial. La doctrina del equilibrio ciudades que lo formaron paulatinamente, del cosmo de los poderes tuvo también sus adeptos, y los monarpolita imperio romano y de las antiguas ciudades que cas franceses insistieron en la definición de «fronteras representaban estados, tanto como de aquello que naturales, aunque más bien en forma geográfica que llamamos con cierta vaguedad el despotismo oriental. racial. Así es fácil observar que el espíritu nacional no Es evidente que nuestros actuales sentimientos nacio sobresalía mucho entre las diversas fuerzas que pronales tienen algo que ver con el estado nacional. pero dujeron el moderno sistema de estados. Hacia fines me inclino a creer que el estado vino primero y que del siglo dieciocho, la raza, lenguaje y tradiciones después se creó la emoción. Pues descontando la comunes no se tomaron mucho en cuenta para la nueva anómala Suiza y tal vez Holanda, los estados nacio y efectiva distribución de territorio que se intentaba, Este documento es propiedad de la Biblioteca Nacional Miguel Obregón Lizano del Sistema Nacional de Bibliotecas del Ministerio de Cultura y Juventud, Costa Rica.