204 EOS EOS 205 Yo estoy perfectamente satisfecho del matrimonio lo desazona y atormenta más que lo que la general de usted. Todo me dice que ha de ser dichosa, privación puede mortificar al modesto y al humilde, tanto como podemos serlo en este valle de lágri que nada de eso posee, pero que, no ambicionándolo, mas.
vive contento con su obscura suerte.
Tenga usted presente, y ésta es mi primera ad Así es que si se coloca al favorecido con todas aquevertencia, que la felicidad no depende ni de las pren llas dotes personales y con todas aquellas ventajas sodas personales más ensalzadas y apetecidas, ni de ciales, en una situación doméstica en que la desconlas circunstancias sociales que más se codician y en fianza, la contradicción, la envidia, la discordia, el vidian, ni de aquellas virtudes que más llaman la desprecio, el odio, le lancen al corazón cada instante atención pública, y que más aplausos excitan en el un dardo envenenado, la vida de esa persona será un mundo. No: la felicidad depende, en primer lugar, martirio doloroso, continuo e insoportable, a despecho de la práctica sincera y corstante de estas virtudes de esas dotes y ventajas.
modestas, pudiera decirse oscuras, que Cristo enseñó Es, pues, necesario, para obtener la dicha, buscarla, con su palabra y con su ejemplo: la humildad, la pa no en donde las preocupaciones vulgares la supociencia, la resignación, la abnegación; y en segundo ren sino en donde realmente se halla; es decir, en el lugar, de la bienandanza de nuestras relaciones do pacífico goce de las relaciones íntimas de la familia, mésticas, que dependen de esas mismas virtudes, y fundadas y alimentadas por las humildes virtudes del de la prudencia y de la discreción, que también son Cristianismo.
virtudes cristianas. Así la práctica sincera del cristiaVeamos ahora como es que usted ha de obrar, para nismo, no solamente conduce a la bienaventuranza hallar de continuo en el seno de su familia, la paz y eterna, sino que es el único camino que lleva a la la dulzura.
felicidad temporal.
De hoy en adelante, la primera persona para usted, La belleza, el talento, el saber, las habilidades más la más interesante, el objeto primero de todas sus preciadas, la riqueza, el poder, los honores, las dis atenciones, de todos sus cuidados, de todas sus inquietinciones que codicia la vanidad, pueden reunirse en tudes, es su marido. Padres, hermanos, parientes, una persona, y se reúnen a veces, sin que por eso amigos, todos descienden al 2º. y 3º lugar, así en el la felicidad llene el corazón de esa persona tan favoforo interno del corazón. como en las manifestaciones recida y tan envidiada, si la soberbia, la envidia, la exteriores de respeto y de cariño. Esta es la ley de ambición, la codicia, la vanidad, ocupan el pecho de ese individuo que el mundo juzga dichoso; la riqueza, Esto de que los padres deban descender al lugar el poder, los honores, las distinciones que disfruta le en el foro interno del corazón me parece excesivo. Más aún: parecen pocos; y la privación de las que no alcanza, me parece imposible.
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