116 EOS EOS 117 dios de volver al carril y restablecer el país en el estado y lugar que tenía antes del advenimiento del señor González Flores al poder. EREMITA.
Nación y Estado Los hombres la inmensa mayoría tienen la convicción o el sentimiento de la propia supervivencia, concebida en una u otra forma. La tienen, la han tenido en todos los tiempos y lugares, y la tendrán siempre muy probablemente. Sin embargo, todos temen la muerte como el mayor de los males. No hay quizá contrasentido más grande ni más universal.
El filósofo y poeta latino LUCRECIO decía ya, hace 20 siglos: Una de dos ¡Oh hombre. o tu crees, como lo enseñan casi todas las religiones, que el alma sobrevive al cuerpo, y que la conciencia, en fin libre, desligada de los lazos terrestres, va a encontrar en los espacios una vida eternamente feliz; o, al contrario, tú crees que la muerte lo disuelve todo, que el cuerpo se hace polvo y la conciencia desaparece cuando el cerebro se desagrega. Pues bien, en ambos casos, el desprecio de la muerte debe ser igual.
Porque si la conciencia y el alma persisten de qué lamentarse? La vida aquí no es más que una corta travesía, y la muerte no termina nada: ella no hace otra cosa que abrirnos el inmenso y fecundo porvenir. Si al contrario, la conciencia es aniquilada y no es ya posible dolerse de nada ni sentir ¿por qué asustarse de la muerte? Puesto que la muerte termina todo y que todo se acaba con ella, no existen ni recuerdos ni esperanzas ni angustia que pueda atormentar a la nada. Qué significan estas palabras Nación, Estado, que, a veces, en el uso vulgar, en la conversación, aparecen confundidas? Nación no es lo mismo que Estado, aunque a veces coincidan, aunque siempre haya entre uno y otro concepto, mejor dicho, entre una y otra realidad, un momento histórico de coincidencia. Cualquier Manual de Derecho Político distingue perfectamente los conceptos de Nación y Estado. Distinguir los conceptos no es muy dificil.
Como cosa artificial que són tienen fronteras definidas, cierta traza geométrica, cierta regularidad.
Es más dificil distinguir, delimitar las realidades.
Pero también en la realidad vemos que Nación y Estado son cosas distintas. Hay naciones que no son Estados, que están repartidas entre varios Estados. La Nación polaca, por ejemplo, repartida entre Prusia, Austria y Rusia. Una nación todavía puede estar más dividida. Puede estar como pulverizada y disuelta en otros pueblos y, sin embargo, conservar cierta cohesión espiritual. No existe una nación judía? Un Estado puede contener sólo parte de una nación, corresponder con una nación, encerrar naciones diversas. El Estado servio, anterior a la guerra europea, no contenía toda la nación servia.
Francia es un caso de correspondencia de la nación con el Estado. No hay dentro del Estado francés una nación bretona, ni una nación provenEste documento es propiedad de la Biblioteca Nacional Miguel Obregón Lizano del Sistema Nacional de Bibliotecas del Ministerio de Cultura y Juventud, Costa Rica.