Socialism

24 EOS EOS 25 pre que sea de la política favorable al gobierno. Hará aprender de memoria la Declaración de los Derechos del hombre que habrá estudiado poco, pero de la cual habrá oído hablar mucho, y al cabo caerá en la cuenta de que es el más terrible libelo contra el gobierno en que está y contra el régimen que representa, que se haya escrito jamás sobre el planeta, y que tanto valdría hacer a los jóvenes alumnos aprender de memoria los artículos de los diarios de la oposición.
Estará infinitamente molesto en el manejo de sus funcionarios. Los unos, poco favorables al gobierno, harán estrictamente su labor; la harán muy bien, por lo demás; la harán tanto mejor cuanto más sospechosos se crean. Los mirará con horror; pero ¿cómo tocarlos?
En primer lugar, no sería justo, pero esto importa poco; luego las familias se disgustarían, lo que, si aun quedara un girón de enseñanza libre en el país, sería bastante grave; lo que si no quedara en el país, en torno de la enseñanza del Estado, más que la enseñanza doméstica, sería más grave aún; lo que, en fin, si está prohibida la enseñanza doméstica, tendrá el inconveniente de desobligar a gentes que son electores.
Es dificil tocar a un profesor que no está en las ideas del gobierno; bien que, si no está en las ideas del gobierno. a quién sirve?
Otros profesores estarán en las ideas del gobierno, pero lo estarán talvez demasiado. Ellos se adelantarán, lo que es no tener todavía «el espíritu de consecuencia. Bajo un gobierno anticlerical, pero espiritualista, serán ateos; bajo un gobierno radical, serán socialistas; bajo un gobierno que sea socialista, sin saber lo que esto quiere decir, serán colectivistas, porque ellos sí sabrán lo que hablar de esto quiere decir; bajo un gobierno antimilitarista, estarán por la supresión de la patria. Esos son los más molestos. Se les quiere, se les teme, y, cumplimentándolos porqne se les quiere, se les hiere porque se les teme. se sublevan inmediatamente todos ellos, ya queriendo reivindicar la libertad del profesor, aunque funcionario, ya acusando al gobierno de tirar sobre sus tropas y de tratarlos como a sus más detestables enemigos.
En medio de todo esto, el politiquillo de una pequeña subprefectura está en mala postura y hace una figura triste. No puede ni tratar absolutamente a sus profesores como a sus comisarios de policía, ni habituarse a la idea de que debe tratarlos de otro modo y de que sus profesores no son comisarios de policía espiritual.
En cuanto al cuerpo docente de la enseñanza del Estado, puede ser muy bueno, ya que la materia es honorable y actractiva por sí sola. Sólo que sería mejor, si no fuese cuerpo docente de la enseñanza de Estado.
Todo cuerpo docente de la enseñanza de Estado estará infestado de políticos que todos naturalmente, pensarán en adelantar y que para adelantar no contarán más que con la política y que halagarán al gobierno precisamente en la manía que tendrá siempre de considerar a sus funcionarios, quienes quiera que scan, como servidores no del Estado sino del Poder y no como hombres de la confianza del país sino como agentes del ministerio. Es lo que vulgarmente se llama endulzarle a uno los oídos. En un país en donde existe la enseñanza del Estado, encuentro, en una calle de la capital, un profesor, bastante agradable, basEste documento es propiedad de la Biblioteca Nacional Miguel Obregón Lizano del Sistema Nacional de Bibliotecas del Ministerio de Cultura y Juventud, Costa Rica.